--¿Puedo ayudarlos?
Que Jessica dijera eso me había abierto los ojos y darme cuenta de algo que había ignorado.
Flash estaba fuera del equipo, ya era definitivo, no podría hacer actividades físicas por tres meses, y eso sin contar la rehabilitación.
¿Qué era de su beca? ¿Qué pasaba con irnos juntos después de graduarnos?
--¿estás bien?-preguntó Jessica jalándome del brazo.--¿Qué te pasa?
--¿Quieren que llame a alguien?-preguntó el encargado. Negué con la cabeza y me di la vuelta para irme de ahí, a paso rápido.
--¡Oye! ¿Qué te pasa?-preguntaban Jessica mientras me seguía por las calles repletas de gente que compraba los regalos.--¡Epa!
Me di la vuelta hacia ella.
--¿Y ahora?-pregunté. Ella me miró sin entender.--Flash sin jugar fútbol es nada prácticamente...
--¿A qué le temes tanto?
Ps no se, o bueno si se; pero no te voy a decir... No mentira.
--No lo sé, yo...
Sus ojos confundidos me hacían sentir peor.
--¿Vamos a esa tienda?-preguntó señalando otra, asentí.
Me quedé mirando las cosas que tenían, y encontré el regalo perfecto para cada uno, en la misma tienda, y me dieron descuento, lo cual fue muy bueno.
Llegue a casa, y May estaba ahí, con mi mamá y mi tía, mi mama tenía cara de pocos amigos, en cambio tía May, ella parecía feliz.
--Te tengo una noticia que te encantara.-dijo alegremente. La mire sin entender.--O mejor no te digo, que te diga Peter.
--Está esperándote en tu habitación.
Era todo tan extraño, entre a mi habitación y Peter estaba sobre mi cama revisando su teléfono.
--¿Cuál es el misterio que tienen esas tres?-pregunté cerrando la puerta detrás de mí.
--Tendrás un nuevo vecino M.J.-dijo.--Ayer invente llevar a mi tía al hospital, y el doctor le dijo que ya flash podría regresar a su casa, pero...
--No hay nadie que lo cuide allá.-dije, sentándome y mirándolo con atención.
--Bueno, mi tía quiere que se quede en casa.
--O sea que...
El asintió.
--Que raro.-dije mirando a Peter mientras reía.--Que yo sepa antes se odiaban, ahora se va a quedar en tu casa, y van a comer pizza juntos.
--Ahhh ¿estás celosa?-preguntó. Negué con la cabeza.--Si, si; niégalo. Fue idea de mi tía, t bueno; ella tiene razón, nadie va a cuidarlo, y ella tiene unas semanas libres por vacaciones de Navidad.
--¿Sabías que tu tía es una Santa?
--Si.-dijo en un suspiro.--Si le pasa algo me muero... ¿Qué traes ahí M.J?
--Nada.-dije escondiendo la bolsa de regalos detrás de mí.--¿Por qué eres tan salió Peter?
Comenzó a reírse.
--Es un don.-dijo, guarde la bolsa en mi closet.--Te tengo otra noticia.-dijo. Lo mire atenta.--Mi amigo me a dicho que podrían intentarlo otra vez.
--¿Qué amigo?-pregunté.
--Tu sabes quien, Spiderman tonta.-el rostro se me iluminó de alegría.--Mañana te diré dónde podrán encontrarse.
--¿Por qué tanto secreto? Solo dame su número.
--¿Para qué te la pases viendo si está en línea? ¿O sí cambia su foto de perfil? No.-dijo, se reía como tonto. No pude evitar sonreír.
--Es lo más ridiculo que haz dicho Peter.-dije.
--Créeme que sé que lo harías, además, no puedo darte algo que no tengo.-dijo, asentí.
Nos quedamos callados por varios minutos, solos haciéndonos caras y riendo.
--¿Cómo va la beca con el señor Stark?-pregunté.
--Vamos bien, ¿por qué la pregunta?-dijo.
--Solo para saber, o sea que... Cuando nos graduemos ¿me dejarás?
--Ni que me fuera a vivir en la torre stark tonta.-lo mire enojada.
--Deja de decirme así.-dije pinchándolo con mi dedo.
--Además, tú también te irás ¿no?-preguntó.
Sonreí.
--¿Qué significa esa sonrisa?-dijo curioso.
--No le e dicho a nadie todavía...-susurre. Se acercó un poco más.--Fui aceptada en Columbia para estudiar periodismo.
--¿QUÉ?-casi gritó, pero me hizo sobresaltarme.--¿Por qué no le haz dicho a nadie? ¡Es lo mejor que te pudo haber pasado Mary Jane!-me tomo de los hombros.--Debes decirle a tu mamá ahora mismo...
--Es que, no sé si pueda pagarla.-dije. Peter me miró, y suspiro.--No quiero que ella se consiga otro trabajo y no pueda dormir bien solo por pagarme la universidad, no podría pedirle eso.