Simplemente tú.

03: Delfina

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∞— D E L F I N A —∞

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— No, no me queda bien — Concluí, observando mi reflejo en el espejo mientras Luna trataba de peinarme.

Le había contado a mi mejor amiga lo que había pasado con Gastón y entonces ahí estábamos, tratando de verme bien para la cita. —Se escuchaba tan extraña esa palabra. — Sí, tratando, porque cualquier cosa que me pusiera me quedaba fatal; según Luna todo me quedaba bien, pero sabía que solo lo decía para que no me sintiera mal. Sin embargo, al pensarlo bien llegaba a la conclusión que no  importaba lo que me pusiera, si recién Gastón se acababa de dar cuenta que existía, no creía que se fijara en mi ropa, después de todo, era la chica invisible.

— Te queda genial, y no eres invisible.

Ups, pensé en voz alta.

— Sí, ya se. Solo que me parece algo curioso que Gastón me invite a salir... Así.

— No te entiendo. ¿Así cómo?

— Así de la nada. Ni siquiera me saludaba en los pasillos del Blake, y ahora me invita a salir. ¿No es algo ... Raro?

— No Nina, no veo nada raro en que un chico te invite a salir, eres inteligente y muy linda. No veo nada raro en eso.

Pasamos las horas restantes de ropa en ropa, prenda en prenda, y peinado y peinado. Luna me estaba acompañando a la plaza cerca del Roller porque le dije que no quería ir sola, le pedí que me acompañara, lo cual aceptó con la condición que usara las prendas que me prestó; ya sé lo que dirán, que no era nada difícil, pero para mí sí, creánme, parecía una vidriera con todos esos accesorios.

Al cabo de un largo recorrido estábamos sentadas en una de las bancas de la plaza, esperando que fueran las 3:00 para mi cita, —Seguía sonando raro. — mientras tanto, Luna trataba de opacar mis nervios con sus nervios. Sí, sus nervios, y no era por mi salida con Gastón, sino por la competencia de patines internacional que se aproximaba.

Simón y Luna quedaron en primer puesto en la competencia interna que elegiría a los que participarían en nombre del Roller en una competencia mucho más grande, y tenían que viajar para poder representar al Roller en la competencia. Por supuesto que Simón, Ámbar y Matteo, la acompañaban, Simón era su pareja y los otros dos sus suplentes, ya se podrán imaginar la reacción de Ámbar cuando se enteró que sustituiría a Luna, trataba de que no se notara su mal humor, pero esto era algo imposible, se notaba desde la esquina que no le gustaba nadita la idea de que Luna sea titular.

Las dos parejas bailaron muy bien, pero Luna y Simón los superaron por la conexión que tenían, en cambio Matteo y Ámbar también tenían buena conexión, pero el cambio que le hicieron a la coreografía, se notó que fue de último minuto y esto le restó puntos. En fin, Luna estaba nerviosa, y trataba de que con sus nervios se me olvidaran los míos, pero era algo prácticamente imposible, sabía que lo mío era una ridiculez a lado del motivo de ella, pero tampoco era tan fácil, imagínense salir en una cita — Confirmado por él mismo. — con el chico que te gusta desde siempre.

¿Se lo imaginaron? ¿Y que me dicen? ¿Tienen también ese nudo en el estómago? O ¿Que sienten?; les diré lo que yo sentía; emoción, ansiedad y felicidad, pero al mismo tiempo nervios, terror y miedo.

¿Miedo a que?

A que saliera todo mal y quedar como una tonta frente a Gastón, cosa que sería muy posible si seguía así de nerviosa.

Tratando de olvidar todo el tema, puse en práctica uno de los ejercicios de relajación de mi mamá, inhalar y exhalar.

Inhala, exhala.

Inhala, exhala.

Inhala, exhala.

— ¿Estás bien? — Preguntó Luna.

— Sí, solo hago uno de los ejercicios tranquilizantes de mamá.

— Me parece genial que te quieras tranquilizar, pero ya son las 02:55. ¿Por qué mejor no vamos a buscar a Gastón?

— Sí, sí, mejor.

Caminamos como 10 minutos y nada.

— Creo que hubiese sido buena idea que me dijera el lugar exacto. — Dije al ver que no lo encontrábamos.

— Es que te lo vengo diciendo todo el camino. Vamos, sigamos caminando. — Dijo Luna

Seguimos su consejo y buscamos a Gastón como por 5 minutos más, y mejor que no.

Ahora los nervios fueron sustituidos por tristeza.

No me confundan, Gastón sí fue, pero no fue solo. Ahí estaba él, en una banca abrazado a Delfina.

En seguida me reprendí y me dije lo tonta que había sido, era obvio que alguien como él no se podría fijar en alguien como yo, por algo era la chica invisible.

— No Nina, no digas eso. — Me dijo Luna, con preocupación tiñendo su voz.

No me di cuenta que pensé en voz alta otra vez, pero ahora no me importaba. Ahora no me importaba nada. Solo quería ir a casa, meterme en mi pijama y dormir hasta que fuera la competencia de Luna.

— Sí Luna, sí lo digo porque es así. Gastón no se podría fijar en mi y yo fui una tonta al pensar que sí podría pasar.

— Nina... — No la dejé terminar.

— No Luna. No digas nada. Mejor me voy, gracias por todo, por acompañarme y por ayudarme, pero ahora sólo quiero irme.

La dejé ahí, sin opción de hablar mientras lo único que hacía era irme, lo que debí hacer desde un principio.

Cuando llegué a casa no estaba mamá, y no podía estar más agradecida por eso. Y es que, era mucho mejor así, en ese momento no quería contestar interrogatorios sobre mi estado de ánimo y mis ojos llorosos. Así que, lo único que hice fue agarrar mi celular y postear en la cuenta de felicity, póstear mis sentimientos, escribir lo que sentía, era lo único que me haría sentir mejor, por lo menos por algún momento.

FelicityForNow: "Cuando el amor suena en otro tono, por más que fuerces tu voz para alcanzarlo, nunca vas a poder cantar la misma canción. Es como dos manos que aunque estén muy cerca, no se rozan. Si estás en otra sintonía, tal vez sea el momento de pasar el track. #CambiemosDeCancion #FelicityForNow"