Capítulo 23: ¡A bailar!

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Bombón entró cabizbaja en la sala de reuniones, seguida por Brick que a diferencia de ella iba con la cabeza bien alta. Todos los miembros de las casas reales y algunos consejeros ya se encontraban sentados en la gran mesa esperando a que los "héroes" del día les dieran alguna explicación de lo ocurrido en el Campo de juego.
— ¡Brick! — gritó el padre del susodicho. — ¿Se puede saber desde cuándo puedes hacer esas cosas que has hecho hoy? — de pronto miró a su esposa — ¡¿Tú sabías algo?!

— Cómo iba a saberlo, se lo tenía calladito. Estoy impactada como todos los demás — respondió la madre de Brick.

— ¿Y bien?

— Bueno... — Brick, con la sonrisa más cínica que podía poner, señaló a Bombón. — Como soy un caballero, voy a dejar que la historia la cuente mi prometida.
La ojirrosa le miró con una mezcla de incredulidad e indignación. ¡Menuda falta de respeto hacia ella y hacia todos los demás! Pero al parecer a ellos no les importaba quién les daría una explicación, sólo querían oírla cuanto antes para saber de primera mano lo que pasaba en el reino.

— Bombón — habló el rey de Nordixia. — Hija, ¿tienes algo que decir sobre lo de hoy?

— Es una historia muy larga...

— Tenemos tiempo de sobra — respondió su madre.

— Todo comenzó la noche que mi hermano desapareció. En el Bosque Encantado... — comenzó a contar, pero se puso muy nerviosa al sentir las miradas de toda esa gente clavadas sobre ella. — yo estaba sola y entonces apareció una luz que...

Antes de que la pelirroja pudiera continuar con la historia, la puerta se abrió de golpe y entró el mago Barbablanca.

— Ni una palabra más — gritó alzando el dedo índice. — Los asuntos mágicos son confidenciales — dio un golpe en la mesa y continuó dando vueltas por la sala. — La princesa no tiene permiso para contar nada.

— Pero Excelencia, tenemos derecho a saber lo que está ocurriendo — intervino el padre de Brick. — Sin comerlo ni beberlo nos vemos atacados por una especie de hechicero chiflado y acto seguido descubrimos que éstos dos tienen poderes mágicos — dijo señalando a los pelirrojos. — Merecemos una explicación, ¿no le parece?

— Ellos dos pueden usar sus poderes contra el "hechicero chiflado", como le habéis llamado. Es toda la explicación que recibiréis. No sé qué pretendía mostrándose ante toda esa gente, pero hemos guardado todo este asunto en secreto durante siglos, y no permitiré que se sepa más sobre ello.

— La gente también querrá saber lo que pasa, quién era ese hombre... — el rey del Sur se acercó a Barbablanca mientras hablaba. — Querrán saber si están en peligro y nosotros también.

— Majestad, por ahora todos deben conformarse con saber que si están en peligro, tienen a alguien que les protegerá, como ha sucedido hoy. Tanto los jóvenes como nosotros los Sabios nos encargaremos de ello. Dejen los asuntos mágicos a la gente mágica, por favor se lo pido.

Se hizo un largo e incómodo silencio en toda la sala. Todos intercambiaban miradas confusas y finalmente el rey de Nordixia se dirigió de nuevo al mago.

— Respetaremos su petición, Excelencia — el padre de Bombón le sonrió a su hija. — Si me asegura que mi hija no correrá peligro. Mas si hay algo más relacionado con ella que debamos saber, dígamelo, se lo ruego.

Barbablanca negó con la cabeza y el rey Blaze se quedó más tranquilo. Bombón en cambio sentía que se le iba a salir el corazón de los nervios. Claro que había más cosas, muchas más, pero no podía contárselas a sus padres.

Los colores del amor - (PPG y RRB).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora