Los colores del amor - (PPG y RRB).

Capítulo 6: ¡El príncipe ha desaparecido! (Parte 2)

- Dónde estará... - Bombón escuchó a su madre decir esas palabra en voz baja. - Hace tres horas que salieron.

- No te preocupes, regresarán en cualquier momento y traerán a Blake sano y salvo.

Bombón intentaba tranquilizar a la reina, pero ella también estaba muy angustiada. Su hermano sólo había "desaparecido" en una ocasión, durante hora y media, y había sido porque resulta que se quedó dormido jugando al escondite. Esta vez era distinto, la sirvienta lo había perdido de vista y para cuando se había dado cuenta, ya no estaba. Según les había contado, lo perdió en el norte del reino, así que por ahí habían ido a buscarlo. Pero algo no iba bien, había mucha gente buscándolo, tenían que haber vuelto hacía rato.

- ¡Ahí vienen! -gritó la reina y salió casi corriendo, seguida por Bombón.

El rey se acercaba al castillo con un gran grupo de hombres detrás, pero el príncipe no se veía por ningún lado, eso fue lo primero que notó la reina. El rey Blaze se bajó de su caballo mientras su mujer y su hija esperaban que les dijera qué había pasado.

- ¿Dónde está? - preguntó la reina, que ya estaba impaciente, pero él negó con la cabeza. - ¡Di algo, por favor!

- No le hemos encontrado.

- ¿Cómo que no? ¡No puede ser!

- He vuelto para organizar una operación de búsqueda, registraremos todo el reino. Tienes que calmarte - dijo abrazándola al ver que comenzaba a llorar - te prometo que le encontraremos.

- Papá, yo también voy a buscarle.

- ¡No! - la reina agarró a su hija del brazo. - Tú no vas a ninguna parte, bastante tenemos ya con un hijo desaparecido.

- No me pasará nada, tengo que ayudar. ¡Es mi hermano!

- ¡He dicho que no!

- Bombón, haz caso a tu madre, no es buena idea. - el rey acarició la cabeza de la pelirroja - Quédate aquí, estoy seguro de que todo irá bien.

Los reyes entraron en el castillo seguidos por varios hombres de armaduras pesadas y se encerraron en el despacho principal. Bombón iba a subir a su habitación, pero vio a Robin en el jardín.

- Qué bonitas rosas, pero las de mi reino son más grandes - comentó mientras olía las flores, Bombón sólo suspiró. - Tranquila, aparecerá, a tu hermano le encanta meterse en líos, ya verás cómo al final volverá él solito.

- Espero que tengas razón, pero no pienso quedarme de brazos cruzados.

- ¿Qué piensas hacer? - preguntó sorprendida la pelicastaña.

- Si no le encuentran antes de que anochezca, yo misma saldré a buscarle y nadie me lo impedirá. Tengo que hacerlo, me da miedo que le pase algo.

- ¿Estás segura? Si todo un ejército no logra encontrarle, tú sola no vas a poder. - Robin sonrió y continuó - A menos... que te acompañen tres personitas que sé que no dudarían en ayudarte.

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Narra Boomer

- ¡Vamos, Boomer, sal del agua antes de que te hayas arrugado como una pasa!

Salí del agua y me senté sobre la hierba, hacía un día precioso y había decidido aprovecharlo para darme un baño y de paso practicar, ya que se acercaban los Campeonatos e iba a participar, como cada año. A mi lado, mi amigo Butch sacaba brillo a una de sus armas, era uno de sus pasatiempos favoritos. Eso y desmontarlas para volver a montarlas luego, lo cual me parecía muy aburrido, pero al parecer a él le encantaba.