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Una semana después.

La semana más dura para todos, Liam sabía que el moreno iba a estar deprimido por mucho tiempo, pero iba a tratar de que sonriera un poco, que saliera adelante junto con él, Liam dejó la malteada de pepinillos en la mesa de centro, era curioso que logro un gran avance, ya no estaba más en la cama.

-Lo tomarás todo, la pequeña lo necesita, ama los pepinillos mi amor.- Zayn como un zombie volteo para ver a Liam.

-No me cabe nada.- susurró.

-Debemos visitar a Noah ¿no crees?.- Zayn solo miraba un punto muerto de la sala abrazándose a sí mismo, Liam lo atrajo a sus brazos besando su cabello.- Desde donde esté Niall te hubiera regañado por estar con este ánimo...

-Pero Niall No está, y lo extraño...- Liam se quedó callado, contuvo las lágrimas besando repetidas veces el cabello de Zayn.


-Cariño...- los papás de Noah trataban de animarlo pero Noah había adoptado la cama como su hogar, tapado por las sabanas se mantenía las 24 horas del día mientras que le daba vueltas a su anillo de compromiso.- Los padres de Niall están aquí.- Noah no se movió ningún centímetro, solo pensaba en que todo esto era un sueño y pronto despertaría.- Mi amor.- sintió una acaricia en su espalda.- Vamos cariño, le hace mal al bebé...- Noah se destapó viendo a los papás de Niall mirándolo con ropa negra, Noah miró la foto que tenía en su mesita de noche, la misma que Niall adoraba, mientras una rosa blanca estaba a un lado de la foto, miró de nuevo a los padres.

-¿Qué hacen aquí?.- su voz ronca decía que tenia horas llorando.

-Niall dejó un testamento.- Noah bufó tapándose de nuevo.- Pide que estes presente.- Noah de nuevo se destapó tratando de entender.- Así que te necesitamos.- Noah tragó saliva, su relación duró solo pocos meses, meses de intensa relación que se había vuelto en una dependencia de uno del otro, jamás pensó en un testamento.

-No Ire...- susurró muy bajo.

-Cariño.- volteo hacia su mamá.- Es la voluntad de Niall, quería que estuvieras presente...

-ES QUE NO LO ENTIENDEN...- todos saltaron un poco.- ÉL NO ESTÁ MUERTO, ÉL SIGUE VIVO.- todos se quedaron en silencio.- No hay un testamento que leer, es que Ni no mamá... Ni es mi príncipe ¿verdad? Él no nos dejaría.- susurró hacia su mamá con esperanza, los días de duelo y la cremación fueron los más duros para Noah, mantenerse en ese mensaje de "Te amo", la negación de que Niall estaba muerto abundaba en Noah.

-Jamás los dejaría.- susurró su mamá abrazándolo, Noah lloró, Trisha sollozo un poco haciendo que Yaser la abrazara.- Pero él necesita que vayas para que lean el testamento, haz eso por Niall cariño, ¿no crees?.- Noah se separó viendo a los padres de Niall.

-No entiendo que hacen aquí, ustedes me odian al igual que odiaban a su hijo por estar conmigo.- Trisha se congeló.- Así que esas lágrimas no van conmigo, nos dieron la espalda, joder Niall los amaba y... USTEDES LE DIERON LA MALDITA ESPALDA.- Noah se iba a dejar ir sobre ellos pero su papá lo tomó entre sus brazos abrazándolo.

-Ssshhh mi amor... ya tranquilo.

-Ellos nos odiaban papá, ellos... Niall, necesito a Niall.- Su papá se acostó con él tapándolo con las sabanas tratando de calmarlo.

-Solo váyanse, nosotros hablamos con ustedes, pero Noah no está bien para leer un testamento.- Ellos asintieron saliendo lo más rápido posible, Noah lloraba sin parar, sus papás se miraron preocupados, Noah necesitaba un psicólogo urgentemente.


-Ahora no padres.- susurró Zayn cuando los miró entrar a la casa, Liam cerró la puerta.

-Nos estamos encargando de todo, el abogado de Niall me habló y... necesita que toda la familia esté presente al leer el testamento, incluyendo Noah, fuimos hoy...- Zayn cerró sus ojos con pesadez para volver abrirlos y mirar a sus padres.

Perdón (ZIAM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora