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Peter miraba todo fascinado, Carey había estado toda la tarde concentrada en Friday y sólo se distraía momentáneamente cuando hablaba con Peter de algo, pero principalmente era con Friday con quién hablaba y a quién le consultaba todo. Habían tomado uno de los trajes de su padre y lo habían abierto para saber cómo era el mecanismo. Peter lo observaba con emoción pero sin embargo no entendía mucho, era un mecanismo muy avanzado para él. La Stark por su lado, lo miraba concentrada y parecía entender totalmente todo.

Aburrido mientras dejaba a la chica trabajar se fijó en el móvil de ella, se lo había dejado desbloqueado y con una conversación abierta. Peter sabía que estaba mal leer nada sin su permiso, pero la curiosidad pudo con él.

Ahí fue cuando Peter entendió en su totalidad la frase La curiosidad mató al gato.

—¿Cómo puede ser que a nadie se le haya ocurrido imitar la armadura de Iron man? —preguntaba Carey mientras comenzaba con su trabajo.— no sé, yo lo intentaría.

—Bueno, por una parte no todos tienen acceso a las armaduras originales para ver cómo funcionan, por otra es bastante complicada y peligrosa. No todo el mundo puede ser Iron man, por eso es tu padre. —opinó Peter mientras tomaba uno de los guantes del traje.—

—Tienes razón Peter, aunque no creo que sea tan complicado, peligroso quizás, pero complicado no mucho. Aunque te doy toda la razón en lo del acceso a estas armaduras, somos privilegiados. —dijo con cierta emoción mientras seguía desmontando piezas.— y obviamente no otra persona podría ser Iron Man. —Alzó la vista y miró a su compañero de misión, que jugaba con el guante del traje de su padre.— suelta eso Peter, es muy peligroso.

—¿Qué? ¿Por qué? No está conectado.

—Pero puede estarlo, no sabemos cómo funciona. El guante es de las cosas más peligrosas y si te pasa algo me muero. —insistió esperando que le hiciera caso.—

—Claro como no me llamo Alan no puedo tocar tus cosas. —dijo Peter algo molesto, haciendo que la chica dejara lo que estaba haciendo y lo mirara bastante mal.—

—¿A qué viene esto? —dijo seria mientras se cruzaba de brazos.— es un ataque en toda regla.

—No sé, dímelo tú. —la miró con la misma seriedad e imitó su gesto.—

—Estaría encantada de decírtelo pero hasta el día de hoy no sé leer mentes. —respondió con cierta gracia.— no entiendo este cambio de humor repentino.

—Claro, yo soy bipolar y Alan es fantástico. Genial.

—¡Pero que no he dicho que seas bipolar! —exclamó la chica con molestia.— ¿qué te pasa ahora con Alan?

—¿Por qué te llama amor? —le contestó Peter alzando un poco la voz. Se arrepintió al instante.—

—Peter Parker me has leído los mensajes sin permiso!

Peter sintió como la temperatura de su cuerpo bajaba drásticamente, el enfado se convirtió en preocupación y sentía como las manos le comenzaban a sudar.

—Ese... Ese no es el caso. —trató de justificarse.— pero él te habla bonito y tú... —Carey volvió a interrumpirlo.—

—No me lo puedo creer, sabes de sobra que él es homosexual, sabes de sobra que te quiero a ti y sabes de sobra que si me habla bonito es porque después de todo somos amigos. Amigos de toda la vida.

—Perdón yo... —le volvió a interrumpir.—

—Llevas teniendo ataques de celos desde que nos conocemos, ¿Cómo justificas el que Spiderman sin ser nada de mi, inmovilizara a Alan con telarañas cada vez que le venían ganas? ¿Cómo me justificas la desconfianza que tienes en mí? ¿Cómo me vas a justificar que me hayas leído los mensajes sin permiso?

—Cariño creo que estás haciendo una montaña de un grano de arena. —murmuró asustado Peter.—

-¿En verdad crees eso? —preguntó Carey sorprendida.— no hagas como que estoy loca invalidando mis sentimientos y actuando como si esto no fuera importante. —le volvió a regañar.— quiero estar con un chico, no con una cámara de vigilancia.

—Pero tan solo leí unos mensajes. —volvió a justificarse Peter. Estaba tan agobiado que las lágrimas inundaron sus ojos, aunque se esforzó para que no salieran. Peter quería llorar no sólo por la discusión, sino porque sabía que había cometido un grave error y no podía hacer nada para remediarlo.—

—No solo es eso. Sabes que no es solo es eso. —suspiró molesta Carey.— esta es la gota que colmó el vaso. Sabes que estoy mal porque mi padre puede estar secuestrado o muerto o no sé y aún así mírate, con tus ataques de celos y tu desconfianza en mí. Necesitaba tu apoyo, no esto.

—¿Me estás dejando? Porque parece que sí. —murmuró Peter mientras notaba como un nudo en su garganta se comenzaba a formar.—

—No exactamente... Creo que necesito un tiempo ahora mismo. No puedo gestionar vaivenes emocionales tan grandes. Ahora lo que me importa y preocupa es mi padre. —declaró también con dolor ella.— creo que tenemos que dejar de lado esto y centrarnos en encontrar a mi padre.

Peter bajó la mirada como si buscase consuelo en sus pies, Carey con dificultad logró volver a hablar.

—Peter, te quiero, pero siento que estas pequeñas discusiones y todo lo nuestro debe esperar hasta que mi padre aparezca.



—Tenemos que encontrar a Stark ya. —dio un golpe en la mesa el capitán mientras hablaba con tono de enfado.—

Bruce lo miró tratando de transmitirle tranquilidad, pero era imposible. Steve estaba de los nervios desde la desaparición del héroe, se podía decir que la bondad del capitán había desaparecido momentáneamente.

—Cap, lo estamos buscando, todo a su debido tiempo. —habló esta vez Natasha.—

Steve se tapó el rostro con frustración, no quería que su cólera le dejara llevar, se quería y debía mantener tranquilo. Su trabajo era mantenerse tranquilo en estas situacionesZ

—Nat, lo necesito, y no sólo yo también su hija y también Peter. Estamos escondidos en un departamento porque Carey nos pilló. Ella ya lo sabe todo y debemos decirle.

—¿Decirle? El amor le ciega Capitán. —le escuchó decir a clint.— he estado protegiendo esa información para ella todo este tiempo, queremos que sea feliz, no que viva preocupada. No es bueno decirle, es una niña.

—Ya vive preocupada. —aclaró Steve.— es una niña, pero es muy inteligente. Necesita saber el paradero de Tony, eso la calmaría.

—¡Oh, vamos! Eres un idiota, sólo escuchas tu opinión. Todo el equipo estamos intentando decirte que mejor que sea así para ella.

Thor interrumpió lo que sea que iba a decir Steve y miró a Clint tratando de calmar la tensión que había.

—Amigo Steve solo está preocupado por su familia, hay que ser comprensivos. —les digo el dios a todos.—

—Pues que no piense en su familia tanto y piense en que esto es una misión, un plan de rescate. —dijo Clint.—

—Primero es preocupación por Carey, después no, es una misión... Aclárate.

—Tan solo digo que tú estás muy implicado emocionalmente en esto y es mejor que no opines.

Steve tensó la mandíbula, se había sentido desafiado. Él era el capitán, su trabajo era, entre otros, opinar y ordenar. Y en ese punto de su vida, no aceptaría órdenes de Clint, ni de nadie.

—Mañana quiero saber dónde está Tony. —ordenó con bastante seriedad Steve.—

—¿qué? Yo no soy adivino yo no... —Steve lo interrumpió.—

—Es una orden.

La Stark Donde viven las historias. Descúbrelo ahora