La Stark

82

Peter había colapsado, tenía tal enfado que no cabía en sí. Siempre había sospechado y le caía fatal Bucky, y que Carey hubiera hecho eso y de tal forma era lo peor que le podría haber hecho.

—Te besaste con Bucky. —lamentó de nuevo el chico mientras caminaba de un lado a otro con angustia, los sentimientos negativos cada vez se hacían más presentes en él y eso facilitaba la mala toma de decisiones.— y no me dijiste nada, seguiste conmigo como si nada pasara.

—Peter, exageras todo. Yo no me besé con él, él me besó. ¡Ni siquiera sabía que me había besado! —dijo Carey mirando a Peter con nerviosismo. No sabía cómo justificarse.

—Pero serás mentirosa. —exclamó de nuevo el chico en un lamento.— de haber sido algún otro me lo hubieras contado, pero se trata de Bucky y no podías decir nada de él... ¿Verdad?

—¡No es por eso! Es que fue una tontería, y no fue un beso así como tal.

Carey suspiró con agobio, ahora todos se iban a enterar y tanto ella como Bucky iban a estar en problemas. El chico no paraba de verlo como una traición y conociéndole, se lo contaría a todo el mundo.

—Yo no quiero a Bucky, deja de insinuar que sí. —dijo Carey mientras se cruzaba de brazos.— te repito que no fue nada.

Peter se quedó callado y asintió ligeramente, estuvo varios segundos en silencio, meditando bien qué diría a continuación.

—Se acabó, no puedo más. —dijo con un tono de voz neutro.

—¿Perdón? Me ignoras durante meses, no te preocupas por mi, tienes un algo extraño con mi amiga la cual me quitó el habla misteriosamente, me ignoras para estar con mi padre, ¿y la mala soy yo?

—Estoy harto de ignorar las miradas que Bucky te lanza y que tú le devuelves, de preocuparme de que esté cerca de ti a solas y de que tú actúes como si la atracción que él siente por ti no fuera evidente. Esta situación me sobrepasa y escapa de mi entendimiento, no entiendo qué es lo que pretende él o lo que quieres tú, pero no me gusta. Me mientes siempre con respecto a él y dios, es tan difícil verlo desde esta perspectiva. Perdona por trabajar y llevarme bien con tu padre si eso te molesta, y con respecto a que Michelle y Ned, eso es problema tuyo con ellos, no mío. Háblales, no me metas a mi en medio.

Carey lo miró entreabriendo los labios con sorpresa y negó varias veces, sin creer lo que acaba de decir. Peter estaba seguro de que él tenía toda la razón y ella, aunque sabía que lo de Bucky había sido una gran metedura de pata, no podía creer que él no viese sus errores.

—No puedes estar terminando conmigo por un beso que no fue mi culpa. —rebatió Carey aún sin creer lo que estaba ocurriendo.— estás obsesionado con Bucky, desde que lo conociste. Eres un celoso, si hablo con otro chico que no seas tú te comportas de una manera insoportable y yo tampoco estoy dispuesta a esto. Solo ves mis errores y me tratas como si fuera inferior y estoy. Cuando quería hacer mi armadura me dijiste que no, siempre que intento hacer algo por mi misma me dices que no sirvo para esto y que me aleje del mundo. No es solo el hecho de que me veas incapaz e inferior sino que me fuiste desleal y te perdoné en silencio, y lo tuyo es mucho peor que un beso.

—No soy un celoso ni te fui desleal, eso son conclusiones tuyas sin sentido. Yo tenía razón desde que conocí a Bucky porque te miraba igual que yo te miro a ti. —tomó aire.— está bien, tú no soportas mis celos y yo no soporto este raro juego que te traes con él. Pues poco más que decir. Y con respecto a ser vengadora, tengo razón. No tienes un don especial ni la motivación que hace falta para ser una heroína y no solo lo pienso yo. Solo queremos protegerte.

—¿Disculpa? —casi gritó la chica.— ¡vives en tu propio mundo si crees que un Stark no tiene un don especial!

–La inteligencia y el dinero no lo es todo, si así fuera habían diez Iron Man más.