La Stark

33

Steve aún no recobraba el color natural de su piel, seguía estando pálido e impactado por lo sucedido. Todo había sido su culpa en realidad, no se centró del todo en lo que hacía y había casi matado a Lucas Murphy.

Con suerte todo había salido bien, nada que unos días de descanso no pudieran arreglar, o al menos eso había dicho uno de los enfermeros de la enfermería del complejo.

Stark estaba dentro de la habitación donde ahora descansaba Murphy y llevaba unos veinte minutos sin salir, Steve comenzaba a desesperarse un poco, pero esperaría pacientemente.

—Pasaré más tarde a verte. —dijo Tony mientras abría la puerta de la habitación para salir de esta, topándose con la presencia del capitán.— no sé qué mierda haces aquí. —dijo en un tono frío el millonario mientras cerraba la puerta y se ponía en frente de él.— mira lo que hiciste, casi matas a un inocente.

Steve soltó una risa irónica y se levantó de donde estaba sentado.

—¿Desde cuándo es un inocente? Es un asesino Stark, ¿Es que no lo recuerdas?

Tony lo miró negando suavemente, algo decepcionado con la actitud del supuesto hombre más justo y correcto del equipo.

—¿Sabes quién es un asesino también? Tu super amigo Bucky. —dijo Tony tratando de ocultar su enfado que aumentaba por segundos.— ¿pero sabes? Aún así pienso que los dos son inocentes, porque no tuvieron culpa. No puedo perdonar a Bucky por lo que me hizo pero sí que puedo ser justo con él y admitir que él no tuvo culpa. El problema es que tú piensas que tu maldito amigo es inocente y Lucas no, ¿Hay alguna diferencia entre ellos como para que tu opinión sea tan distinta?

—No me fío de Lucas. —se limitó a decir Steve, sin concretar más.—

—¿Por qué no? Vamos Steve, eres un hipócrita de mierda, solo ayudas a quienes te interesan. Ahora es cuando no me arrepiento de haberme separado de ti.  No eres tan bueno como quieres hacer creer.

—No me fío porque está todo el día pegado a ti. —admitió Steve en un prolongado suspiro y tratando de no darle demasiada importancia a las palabras hirientes de su ahora ex pareja.—

Tony se quedó callado mientras miraba al hombre con el que llevaba días discutiendo, no daba crédito a lo que había escuchado. ¿Toda esa frialdad y ese comportamiento impropio en él eran frutos de unos celos? Jamás creería que a alguien como Steve eso le afectase, pero al parecer sí

—Eres un celoso y de los malos. —dijo Stark haciendo que Steve frunciera ligeramente el ceño.— tus celos casi se cobran una vida.

Steve se quedó callado y bajó la mirada, se sentía culpable. Tony tenía toda la razón, sus celos casi matan a Lucas.

—Tienes razón, lo siento. —murmuró Steve admitiendo por fin sus sentimientos.— no sé el porqué, pero todo lo referente a ti hace que mi razón se nuble, como cuando para salvarte lleve a Carey y a Peter. He estado a punto de matar a Peter y ahora a Lucas, creo que no tenerte a mi lado hace esa reacción en mí, me hace mal que no estés conmigo. Creo sinceramente que te amo.

Tony lo miró con sorpresa y entreabrió los labios para decir algo, pero ni una palabra salió de él. Se quedó ahí mirando al rubio sin saber qué hacer o qué decir, tantas cosas pasaron por su mente que se preguntaba si debía empezar a decir algo o si no debería de decir nada.

—Está bien, no es necesario que me contestes ahora. —susurró el súper soldado y bajó la mirada.— nos vemos después.

—No, Steve, espera. —dijo por fin Stark mientras le tomaba de la mano.— yo también creo que... eso.