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Habían pasado alrededor de veinte minutos y Steve se había relajado bastante. A decir verdad, había actuado demasiado impulsivo, se arrepentía bastante de lo que había hecho. Sabía que la culpa no era solo de Peter y aunque le costase admitirlo, entendía que les hubiese pasado eso, todos cometen errores.

Tengo que querer mucho a esos niños para justificarlos en esto. —Pensó el Capitán mientras suspiraba brevemente.

Decidió ir a hablar con Carey, necesitaba ver cómo estaba y qué haría. Evidentemente Steve, que era un hombre con ideas antiguas, no estaba a favor de un aborto. Tony al contrario pensaba muy distinto, él estaba muy a favor, pero no discutiría eso con el capitán porque como le dijo a Peter; es una decisión en la que ni él ni Steve podían interferir.

Steve paró al ver la puerta medio abierta de la habitación de ella, se escuchaban unas voces dentro. Sabía que estaba mal lo que iba a hacer, pero para él era muy necesario; escucharía qué hablaba la niña y con quién.

Abrió ligeramente más la puerta para escuchar mejor y esperó en silencio a escuchar parte de la conversación.

—... ¿Tú qué quieres hacer? —le preguntó Carey hacia una persona que Steve no pudo ver pero intuyó que era Peter.—

—No lo sé, sinceramente. —escuchó la voz de Peter.— por un lado pienso que sí, que es responsabilidad nuestra. —Steve lo felicitó mentalmente.— pero por otro lado... creo que es la peor idea del mundo. Mis padres hubo un día que no volvieron, eran agentes de Shield. Me crié como un huérfano, todos los que conozco tienen un padre o una madre y la verdad fue duro crecer así. —Steve escuchaba todo cada vez más interesado en el tema.— y me tuve que criar con Ben y May.

Steve frunció el ceño a la misma vez que Carey ambos conocían a May perfectamente, pero ninguno a ese tal Ben. Si supuestamente Peter vivía con él debía ser invisible.

—No conozco a Ben. —murmuró Carey, Peter sentía como las palabras se le clavaban en la garganta sin querer salir de ahí.—

—Lo sé, murió también, asesinado. —agregó suspirando levemente.— lo que quiero decir con todo esto es, que algún día puede que yo no vuelva, a lo mejor me iré a alguna misión y moriré. O a lo mejor tú te quieres dedicar a algo relacionado con esto y sufras el mismo riesgo. Puede que a cualquiera de nosotros nos pase porque como dice Steve somos humanos con rarezas, pero al fin y al cabo somos humanos, mortales todos. Si tuviéramos un hijo, viviré con el miedo de que él crezca sin mí o sin ti y no sé si me siento listo para eso. Creo que estas cosas son para gente más adulta.

Se escuchó un silencio de varios segundos en los que Steve no sabía qué estaba pasando, estuvo tentado de entrar pero no iba a estropearlo todo por chismoso, tan solo esperaría pacientemente a escuchar algo más.

—Ahora lo tengo todo más claro. —escuchó decir a Carey.— gracias a todo lo que me contaste creo que la decisión es más que obvia.

Steve se tapó la boca horrorizado y negó varias veces, no quería que Carey abortara, todo menos eso. Aunque la decisión no era de él no podía evitar sentir horror ante la idea del aborto. Aún no estaba puesto en la realidad de la medicina actual entonces creía que era algo cruento.

—¿Abortarás?

—No. O sí... Creo que necesitamos ver a un terapeuta, alguien completamente imparcial en esto y que nos aconseje.

—Igual es muy pronto. —opinó él pensativo.—

—Dejemos que pase algo de tiempo y pensamos bien, creo que de momento debemos hacer eso, pensar y que todo se calme.

Steve no aguantó más y abrió la puerta entrando, encontrándose la tierna escena de Carey dándole un abrazo a Peter, que aún estaba algo afectado por lo que había contado.

Ambos se separaron y miraron a Steve, Peter con miedo y Carey  confusa.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Carey mientras miraba al silencioso capitán.—

—Viene a matarme. —susurró Peter a lo que Steve aún avergonzado por su reacción anterior, negó varias veces.—

—Peter, lo siento mucho. Perdí los papeles antes. —murmuró Steve mientras bajaba la mirada.— vengo a pedirte perdón, sé que pase lo que pase eres inteligente y sabrás llevarlo. —le sonrió ligeramente y luego la miró a ella.— y tú señorita, ¿cuándo ibas a decirme todo esto?

Carey le sonrió inocentemente, esperando una charla como la que le había dado su padre, pero Steve no le dijo nada de eso.

—Hagas lo que hagas te apoyo, pero cuidado con tu padre, ya sabes que es un poco sensible. —le advirtió Steve antes de que m Carey lo abrazara.— ¿ya tomaron una decisión? —preguntó tratando de disimular que había estado espiando.

—A veces siento que eres el único que me apoya.  —dijo ella mientras suspiraba.— y creo que sí que hemos tomado una decisión. —observó a Peter y este con una leve sonrisa asintió ligeramente dándole su aprobación.— ambos creemos que es demasiado pronto y vamos a pensar solo entre nosotros, de momento no queremos escuchar opiniones de algún familiar.

Steve sonrió satisfecho con la decisión y esta vez obligó a Peter a unirse al abrazo, apretando ligeramente más de lo normal a Peter en este, igual sí que conservaba parte de su enfado, pero solo una pequeña parte.

—Ay mis niños que ya son mayores. —dijo con una sonrisa para luego agacharse un poco y susurrarle a Peter.— Parker, si se te pasa por la mente dejar a mi niña en este estado... —le advirtió Steve antes de separarse.— los dejaré solos, cualquier cosa me avisan.

Y dicho esto abandonó la habitación, dejando a un Peter algo asustado y a una más feliz Carey. Steve parecía ser el único que los apoyaba, era una sensación muy buena aquella, ojalá su padre fuese tan comprensivo como Steve lo era.

Lucas iba eufórico a buscar a su amigo, ya quería saber cuál sería la reacción de él. Le prometió a Tony que no diría nada pero siendo sincero él sabía que todo de lo que se enterase se lo contaría a su amigo, era como una regla no escrita que tenían ambos.

Entró en la habitación de Bucky y lo miró unos segundos en silencio, antes de llamar su atención.

—James. —llamó Lucas al hombre que observaba un IPad con curiosidad, como si fuese algo venido del futuro.— ¿qué haces?

Bucky alzó la vista y lo miró enseñándole la evidente sorpresa que sentía por el objeto que tenía en la mano.

—Steve me prestó esto, dice que se llama Hay Pan. Es como una televisión de este tiempo, pero portátil.

Lucas tapó su cara con una mano mientras negaba ligeramente, a veces olvidaba que su amigo era prácticamente salido del museo de historia.

—Sí, como un teléfono pero grande. —añadió Lucas con exagerada emoción haciendo que Bucky asintiera, dándole toda la razón.— ¡suelta el IPad y escúchame! Tengo un notición.

Bucky echó a un lado el IPad Y miró de mala gana a Lucas, esperando a que le diera la noticia.

—Vamos a ser tíos. —dijo sonriendo con falsa ilusión.— tu novia está embarazada de tu mejor amigo Peter.

—¿Perdón? —frunció el ceño mientras se levantaba, ahora el Ipad le importaba bien poco.— ¿está Carey embarazada?

—Sí, y no es de ti, se te adelantaron. —bromeó Lucas evitando reírse demasiado con la situación.— ahora tu futura mujer va a tener un hijo con otro. ¿No es maravilloso?

—No es mi futura mujer. —respondió Bucky secamente.—

—Evidentemente ya no. —añadió Lucas con diversión.—

Bucky se quedó en silencio varios segundos pensativo, para luego dirigirse hacia la puerta.

—Necesito hablar con ella.

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