𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔

1. Kiddo

—Mírala y dime que no se parece a él —hablo Nick Fury viendo a la pequeña niña castaña dormir profundamente aferrada a su oso de peluche. Peggy Carter, quien ya estaba retirada y se suponía que no debía estar ahí, pasó una mano por su rostro y suspiro de forma cansada.

—Sí, sí se parece un poco a Anthony pero no puedes estar seguro de si es o no. ¿Cómo la encontraste? —dijo Peggy notando la ropa sucia y los ligeros hematomas en la niña.

—Estaba en una misión, todo había salido con éxito y el día que ya me tocaba regresar apareció ella en la puerta, no hablaba y parecía un poco confundida. La subí a la camioneta conmigo y la traje hasta el complejo, solo a la enfermera que la reviso le dijo que tenía dos años. —Fury tomó el expediente y comenzó a hojearlo de nuevo. —Yo no puedo presentarme en la casa de Stark y decirle: Hey, creo que está niña es hija tuya así que hazle una prueba de paternidad y quédatela.

Peggy lo miro molesta y negó. —Tampoco puedes quedártela, ¿sabes quien es su madre?

Fury torció la boca antes de responder —es hija de Rebeca Talahan, casualmente se caso unos días antes de que la niña llegará a nosotros y obviamente no hay espacio en su vida de recién casada para una niña.

Peggy asintió ante las palabras dichas, si no tenía tiempo para una niña,  entonces por que no se cuidó. Ella no tenía contacto con Anthony, lo llego a ver algunas veces cuando era pequeño pero nada más, él siempre solía estar con su madre o su niñera así que su interacción había sido mínima.

La sorpresa que sintió al saber quién era su madre supo disimularla bien, hacia tanto que no la veía o siquiera sabía de ella...

—Podríamos crear el rumor de qué hay una Stark por ahí, obviamente atraerás la atención de Tony y así, él podrá hacer lo que le corresponde. —sugirió Carter, caminando hacia el ascensor. —Es una buena idea, yo me encargaré de que llegue ese rumor hasta oídos de él y sus allegados. —antes de que Fury respondiera subió al ascensor y se fue de ahí.

El afroamericano observó con más atención a la pequeña y frunció el ceño, esperaba estar en lo correcto si no, le daría falsas esperanzas al hijo de Howard Stark e incluso a la niña frente a él. Llamo a una de las enfermeras y salió de ahí, él tenía trabajo que hacer y no podía quedarse a cuidar de una infante.

We will rock you se reproducía a todo volumen en el taller mientras Tony bailaba y se acercaba a seguir trabajando en la nueva arma que sería vendida al gobierno.

Pepper estaba trabajando desde la sala hasta que le llegó un correo. El asunto y remitente la alertaron ligeramente, aunque bien podría ser otro admirador del sr. Stark o algo así, con un suspiro resignado lo abrió.

Asunto: ¡Urgente!
Remitente: No es relevante.

Buenas tardes señorita Potts, me encantaría poder presentarme pero me temo que eso es imposible. Por este medio quiero informarle acerca de la aparición de una nueva Stark. Debería hablarlo con su jefe, la pequeña se encuentra en una casa a las afueras de Long Island. La reconocerá porque será la única niña que verá ahí.

Pepper leyó y releyó el mensaje una y otra vez, la persona en cuestión no había pedido nada a cambio solo había dado la información, ¿sería posible? Se levantó como si de un resorte se tratara y bajo rápidamente, ingresó el código y entró al taller.

—Sr. Stark tiene que ver esto. —Pepper le extendió el aparato para que pudiera verlo, Tony se acercó y comenzó a leer el mensaje, soltó una carcajada cuando terminó.