77: Están vivos

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Derek veía fijamente la fotografía en sus manos. No sabía exactamente cuánto tiempo llevaba haciendo aquello pero sin duda era lo más hermoso que veía, claro que aún era muy pequeño y apenas y lograba apreciarse pero era la primera fotografía de su futuro bebé y no podía estar más orgulloso por aquello.

—Creo que en algún punto deberás dejar de ver la ecografía —murmuró Meredith sentándose a su lado. Todos los héroes sobrevivientes se encontraban en el complejo de Los Vengadores, siendo los Stark los que seguían ausentes —. ¿Algún avance?

Derek negó y dejó de ver la ecografía, entonces alzó la vista para ver la pantalla frente a él, donde se encontraba una fotografía de Taylor.

—Desapareció... no hay señales de ella en ningún lado.

—Va a volver.

—Ya pasaron cinco días, Mer. ¿En verdad crees que sigue viva?

—Taylor es fuerte, ella estará bien, Derek. Puedo sentirlo...

Y Derek en verdad quería creerlo porque no podía imaginar una vida sin Taylor, no podía hacerlo sin ella. Limpio las dos lágrimas que escaparon de sus ojos y guardo la ecografía en el bolsillo de su pantalón, después comenzó a teclear una vez más. Buscaba y buscaba alguna señal de alguno de los Stark, en esos días no se habían ido a casa, ni siquiera Pepper y Will lo habían hecho. Seguían ahí esperanzados y no mentiría, también lo estaba porque eran lo único que tenían.











Derek sirvió su séptima taza de café y se recargó sobre un escritorio de cristal que había ahí. A su lado llegaron Natasha y Steve, sabía lo que querían pero no estaba seguro de estar listo.

—¿Cómo te encuentras? —preguntó Natasha, que ahora tenía el cabello platinado. Se le veía angustiada... incluso culpable y deprimida. Steve lucía peor —. ¿Cómo llevan todo esto?

Derek suspiró. La furia en su interior deseaba hacer acto de presencia y gritarles lo furioso que estaba, pero no se sentía de humor... no tenía ganas de nada, solo de encontrarla.

—No conozco un mundo donde ella no exista... tu como crees. —finalmente respondió con simpleza dando un sorbo a su bebida.

—Ella volverá, Derek —intento animarlo Steve —. Tiene que volver.

Y Derek sabía que tenía razón, Charlie esperaba por Taylor, cada noche se escuchaban sus gritos y su llanto porque su mamá no estaba. El primer día, Meredith había ayudado pero ya no era suficiente, la pequeña había notado la diferencia de inmediato. Will tampoco era suficiente, Derek tampoco y Steve... bueno, aún no le permitían ver a Charlie.

—¿Cómo están ustedes? —Derek decidió cambiar el tema, tal vez eso les ayudaría —. Se ven terribles.

—Sigo esperando a que entre por esa puerta y me grite cuán poco hombre fui...

—Yo también espero que haga eso. Tal vez deba decirte que voy a grabarlo, es algo que quiero recordar y mostrarlo a las futuras generaciones.

Los tres rieron. Ya no eran solo días, ahora iban a cumplirse casi tres semanas sin saber de ellos... algunos comenzaban a perder las esperanzas, otros, como ellos, no lo hacían. Meredith llegó corriendo alertándolos a todos, en sus manos llevaba una de las miles tabletas que había en el complejo.

—¿Qué ocurre Mer?

—Taylor —ella dijo con los ojos totalmente abiertos —. F.R.I.D.A.Y., la ha encontrado. Esta en Malibu...

Derek asintió dejando su taza de lado —¡Dónde todo comenzó!

Meredith asintió.

—Will y Pepper ya están avisados, nos esperan el jet. Solo faltamos tu y yo, vamos por Taylor.

𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora