𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔

15. Un perro

3 Mayo, 2009

Derek y Charlie estaban en la cocina de la mansión Stark, Pepper había salido a comprar algunas cosas y Tony, había tenido que ir a la oficina y después se pasaría a comprar lo que hacía falta para que el día fuera perfecto.

Taylor estaba dormida, había tenido una noche agotadora ya que a todos les había parecido buena idea llegar y jugar karaoke, las rondas cada vez se hacían mas intensas ya que las canciones iban variando en género e idioma. Finalmente, Pepper y Charlie, se habían ganado el título de los vencedores. Sin duda alguna, debían hacer una tradición aquel juego.

El olor a comida inundó su habitación pero su cansancio y pereza eran mayores que ni siquiera abrió los ojos, se dio la vuelta y se tapó completamente para seguir durmiendo.

—Jarvis —comenzó Derek, terminando de preparar el desayuno que estaba haciendo con Charlie —abre la puerta de Taylor y no la despiertes.

El IA hizo lo que le pidieron, ambos chicos entraron a la habitación, uno llevaba la bandeja de comida y el otro los regalos.

—¡Feliz Cumpleaños! —gritaron al mismo tiempo haciendo que Taylor brincara en su cama, esta los miro con cara molesta y volvió a acomodarse dispuesta a seguir durmiendo.

Al ver que Taylor parecía reacia a abrir los ojos, los chicos decidieron tomar cartas en el asunto. Charlie dejó los regalos en uno de los taburetes que habían en la habitación y obligó a Taylor a sentarse, besó su mejilla derecha, después la izquierda, sus ojos y finalmente su frente.

—Feliz cumpleaños, princesa —le susurró muy cerca de los labios, Taylor ya tenía los ojos abiertos aunque seguía más dormida que despierta. Derek se aclaró la garganta y con mucho pesar, Charlie se alejó recibiendo una mala mirada y un pisotón en su pie izquierdo por parte de Derek.

—Te preparamos el desayuno —puso la mesita de madera que estaba cerca de la cama y la cual era para comer el desayuno en la cama. Colocó la bandeja y besó la frente de su mejor amigo —feliz cumpleaños, Tay.

Taylor sonrió viendo a Derek y comenzó a comer la fruta picada que había, se habían lucido. La bandeja estaba llena de sus frutas favoritas, un grande vaso de jugo de naranja, panqueques con crema de avellana, huevo conocido como a la mexicana y una quesadilla. Los chicos habían aprendido a preparar todo eso solo por ella, se los agradecería eternamente.

Le sonrió a Charlie y no pudo evitar ver los labios del chico, la cercanía que habían tenido anteriormente la había puesto sumamente nerviosa.

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—Ya tienes 15 años —hablo Pepper una vez que Taylor terminó de bajar las escaleras para reunirse con los chicos en la sala, ya se había duchado, se había despertado bien y ahora si usaba ropa decente.

—Me faltan tres años para poder vivir sola —mencionó la chica con un poco de burla, Pepper abrió los ojos horrorizada haciéndola reír. La mujer que había sido como su madre se acercó a abrazarla y dejar besos en todo el rostro de Taylor haciéndola sentir vergüenza, sus amigos estaban ahí, viendo todo.

—¡Feliz cumpleaños! —gritaron Happy y Rhodey, entrando a la casa haciendo que Pepper soltara a la menor. Ambos llevaban cajas de regalos y una bolsa de Burger King.

—Tío Hap, tío Rhodey —se acercó a los mayores y besó la mejilla de ambos.

—Esto es para ti —Happy le entrego la caja y la bolsa —te compraré todas las hamburguesas que quieras si me sigues sonriendo así

Taylor volvía a sentirse avergonzada, muchas veces la trataban como si fuera una niña pequeña, ya estaba grande.

—Y esto también es para ti —Rhodey hizo lo mismo que Happy, Derek se acercó a ayudar a Taylor y le prohibió con la mirada a Charlie acercarse.

—Bebita —Tony entró con el pastel de cumpleaños y detrás de él había varios regalos, por supuesto, Tony opacaría a todos.

—Eso es injusto —comenzó a protestar Charlie, los demás le dieron la razón haciendo reír a los Stark.

Taylor se sentó a un lado de Charlie, Tony se sentó en medio de ambos obligándolos a hacerse a un lado ya que los estaba aplastando. Derek miró tal acto con aprobación, cosa que no pasó desapercibida para nadie.

—Bueno —Pepper comenzó a hablar antes de que comenzaran las preguntas incómodas, era obvio que entre Charlie y Taylor había algo más que sólo ser "mejores amigos" —ya todos te dieron sus obsequios menos yo.

Potts se acercó con una caja grande y una más pequeña encima.

—Espero que te gusten, en cuanto los vi no pude evitar pensar en ti.

Taylor sonrió, no podía pedir más. Estaba con las personas que amaba, claro que le faltaba una pero seguía sin haber rastro de ella.

Taylor tomó el regalo de Coulson, había llegado por mensajería unas horas antes. Le marcaría después para agradecerle.

—¿Por qué el regalo del agente se mueve? —preguntó Rhodey, comiendo una rebanada de pizza, todos se habían alejado solo por si llegaba a explotar o algo por el estilo.

Taylor lo abrió y de este sacó un hermoso cachorro de ojos verdes y pelaje blanco. Un pitbull.

—Es hermoso —la menor comenzó a besar la carita del cachorro y Tony estaba a nada de morirse de un infarto.

—Dijimos que nada de mascotas —sentenció viendo al cachorro morder unos mechones del cabello de su hija

—Dijiste que nada de cachorros hasta que fuera responsable y ya lo soy, soy más responsable que tú. —Taylor estaba embobada con su nueva bebé.

Tony ya no pudo decir nada y con mucha resignación, se llevó a la nueva integrante al taller con él, cuando Taylor se quedó dormida.