20. Viva el Pepperony

1.4K 101 7
                                    

Semanas después.

—¿Que piensas al respecto? —Taylor miró a Howard, esperando a que le respondiera de alguna manera, terminó de ponerse su playera de tirantes y tomó a la cachorra en brazos. —¿Estamos bien con eso? Se que siempre has querido que papá sea feliz —Howard le ladro a modo de respuesta —, exacto pero no debes sentir que te esta cambiando. Tú siempre serás la chica de papá. ¿De acuerdo? —la mascota volvió a ladrar mientras movía la cola y Taylor besó su pequeña cabecita.

—Exacto —Tony veía a su hija y a su nieta perruna desde el umbral de la puerta, Taylor se sobresaltó y se giró para verlo. —, siempre serás mi chica.

—Escuchar conversaciones ajenas es de mala educación. —Taylor depositó nuevamente en el suelo a Howard que salió corriendo de la habitación, la castaña continuó arreglándose.

—No sabía que era privado lo que le decías al chimino animal del demonio —Stark entró a la habitación y se sentó en la cama, había ropa tirada por todos lados.

—Como sea —Taylor le restó importancia y se puso la máscara de pestañas —. ¿Necesitas algo?

—Quiero pasar tiempo con mi hija adolescente.

—Ajá. No saldré con ningún chico, quede con Meredith. Tendremos un día de chicas o algo así. —terminó de poner el maquillaje en sus pestañas, puso una ligera capa de gloss sobre sus labios. Ya estaba lista, sonrió satisfecha por su obra maestra.

—Tal vez Pepper, quiera ir con ustedes —Tony dijo como que no queriendo la cosa.

—Pues lo lamento —Taylor tomó su bolso y guardó algunas cosas que necesitaría —pero no puede hacerlo, es una tarde de chicas menores a veinte años. —no le dio tiempo a su padre para que respondiera y salió a toda prisa de ahí, se topó con Howard en el pasillo, que iba caminando de regreso a la habitación seguramente para dormir de nuevo, su forma de andar le daba risa. Caminaba como si el mundo tuviese que rendirle pleitesía y eso que apenas tenía tan solo unos pocos meses de nacida.








Taylor y Meredith estaban sentadas en una cafetería de la plaza, habían pasado algunas horas comprando ropa y accesorios, ambas la pasaban bien y se divertían pero Taylor ya se había quejado bastante por lo mucho que le dolían los pies por tanto caminar.

—Derek habló conmigo —Meredith dio un sorbo a su capuchino antes de continuar bajo la curiosa mirada de su amiga castaña —, dijo que te estás comportando extraña. Está preocupado y yo también, no has dicho alguna broma o has sido sarcástica. ¿Qué ocurre?

—¿Tú vives solo con tu papá, cierto? —Taylor había entendido todo, sabía que no había sido ella, desde que escucho lo que su padre le decía a Pepper en el techo después de terminar con Iván Vanko, al notar que Meredith asentía, negó inmediatamente—Solo olvídalo, ya se me pasará.

—Escucha, no tienes que hablar conmigo de esto, en realidad sabía que no lo harías —Meredith llamo a alguien que estaba detrás de la joven Stark —. Por eso le hable a alguien con quien si lo harías —, se puso de pie, terminó su bebida, tomó sus bolsas y le sonrió a ambos. —. Los dejare solos.

Meredith abandonó la mesa que estaba fuera de la cafetería y dejó a Derek y Taylor a solas, parecía que ella en verdad lo necesitaba.

—¿Me dirás qué ocurre? —Derek tomó asiento donde momentos antes había estado Meredith.

—No ocurre nada.

—Te conozco, hemos sido mejores amigos toda la vida. ¿Qué te pasa?

—¿Recuerdas lo que ocurrió en el techo de aquel edificio en New York? —Taylor mordió su dona con nerviosismo. No quería hablar de aquello pero tampoco quería seguir viviendo en aquel tormento.

—¿Te molesta que Pepper y mi tío estén juntos? —Derek intentó ocultar su sorpresa pero fracasó.

—No, eso no es —suspiro y mordió con nerviosismo su labio nuevamente —. O no del todo. Los he querido juntos desde que tengo memoria pero ahora es incómodo, siento que necesitan su espacio y si, si estoy consciente de que tengo quince, pero aún así, ellos en algún momento querrán... ya sabes, y también hacer más serías las cosas y no creo que una adolescente esté incluida en esos planes.

—Taylor —Derek pensó como decir aquello, sabía que su mejor amiga simplemente lo ignoraría o lo haría callar —, tú no eres una carga para ellos.

—Lo fui para mi madre —finalmente lo había dicho, desvío la mirada, no quería que Derek la viera con lástima.

De pronto todo hizo click en la cabeza del joven Rhodes —Lo que dijo tú papá, esa noche, te hizo acordarte de ella. —, afirmó.

—Fui un estorbo para ella, tengo los vagos recuerdos de que tenía pareja, era rubio y ella tenía su cabello casi negro, sus ojos eran azules. Les estorbe y así fue como termine abandonada.

—¿Como es que lo recuerdas? Eras muy pequeña, yo no recuerdo mucho de mi infancia.

—Yo la escuchaba hablar por teléfono, no entendía nada, solo mi nombre. Supe que algo iba mal así que me propuse a nunca olvidar su rostro, he fallado demasiado, solo recuerdo su cabello y sus ojos. —con un gran suspiro de resignación hizo a un lado sus alimentos, el apetito se había esfumado.






Pepper y Tony, que veían y escuchando todo desde el taller del mencionado, hicieron una mueca, Taylor jamás había presentado señales de extrañar a su madre, jamás la nombraba, jamás preguntaba por su paradero.

—Señor, creo que deberíamos darle privacidad a la señorita Stark y al joven Rhodes —la voz de Jarvis, trajo a la pareja de vuelta a la realidad, Tony tecleó algunas cosas y su hija desapareció de la pantalla.

𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora