𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔

74. Titán

Infinity War
Parte 2

Taylor se fue a investigar junto a Derek, dejando así a su padre ideando un plan para liberar a chispitas doradas, que se encontraba levitando con un montón de cristales puntiagudos a nada de enterrársele. Ambos fueron cautelosos cuando pasaron junto a Calamardo y el otro sujeto raro. Finalmente llegaron a donde parecía ser la cabina o el control de mando, Taylor no estaba segura de cómo denominarlo. Según Paw Patrol podría ser ambas.

—¿Estás segura de qué es aquí?

—Claro.

—¿En serio?

—¡No! Jamás he estado en una dona gigante en medio del espacio, Derek.

Derek estaba a nada de responder, hasta que la nave se puso en alerta y en una de las pantallas apareció un mensaje con letras rojas: «PELIGRO: DESPRESUARIZACIÓN».

Taylor frunció el ceño. —No podemos dejarlo solo cinco minutos porque ya nos quiere matar.

Derek asintió —Vamos...

En el camino de vuelta, la nave volvió a estabilizarse pero aún así, Derek y Taylor se dieron prisa para llegar cuanto antes. No querían arriesgarse a que la nave sufriera otro daño por culpa de Tony, quien se presumía ser un "genio".

Cuando llegaron a donde tenían a Strange, se encontraron con Peter ahí también. Taylor le dio un golpe en el brazo.

—¿No deberías estar en casa? —ella preguntó ignorando a Strange y Tony, que se encontraban a unos pasos de distancia, viéndola fijamente. —. No tienes que estar aquí. La nave está autocorrigiendo su curso. La dejamos en modo automático.

—Solo quiero aclarar que lo estoy y no debías golpearme tan fuerte.

Taylor decidió ignorar a Peter y le hizo frente a los otros dos adultos.

—Podemos controlarla... —dijo Strange caminando hacia Tony —. Regresar a casa.

Taylor no necesitaba saber leer la mente para adivinar lo que su padre decidiría. Hizo una mueca y asintió cuando sus miradas se conectaron, entonces Derek y Stephen los miraron a ambos con algo de temor.

—Stark.

—¿Sí? —respondieron ambos.

—¿Pueden llevarnos a casa? —Stephen veía directamente a Tony. Derek a Taylor, Ella rehuía de la mirada de su mejor amigo.

—Tal vez no deberíamos... —Tony se negó a mirar a Stephen.

—No podemos llevarle a Thanos la gema bajo ninguna circunstancia, creo que no has entendido el riesgo.

—Tú eres el que no está entendiendo. Thanos ha estado en mi cabeza desde hace seis años, cuando envió sus tropas a Nueva York y arriesgó la vida de mi hija. ¡Ahora ha vuelto! Y no se que hacer, no se si es mejor pelear en nuestro territorio o en el suyo, pero tu viste lo que hicieron... lo que pueden hacer. Ahora la vida de mi futura esposa, mi hijo y mi nieta corre peligro. Ir hacia él, es algo que no espera. Yo digo que llevemos la pelea a él, ¿estás de acuerdo, doctor?

Stephen y Tony estaban parados frente a frente viéndose fijamente.

—Iremos a él, pero debes entender que si debo salvarte a ti, al niño, a tu hija, a tu sobrino o a la gema del tiempo. No voy a dudar en dejar que mueran ustedes. No puedo porque nuestro universo depende de ello.

—Trató hecho —Tony le dio unas palmaditas en el brazo a Stephen y después camino hacia Peter hasta quedar frente a él y su brazo derecho lo apoyó en el hombro izquierdo del joven, después del derecho —. Bueno niño, oficialmente eres un vengador.