48. Nuevo proyecto

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Semanas después.

Derek y Meredith, estaban acostados en el pasto, mientras platicaban de cómo les iba en sus respectivas carreras y mencionando que estaban a dos años de graduarse. Ella aún no decidía en qué hospital haría su residencia y él, no estaba seguro de si seguiría los pasos de su padre. Claro que quería ser alguien en el ejército pero de igual manera, quería cuidar de su novia y su mejor amiga.

Derek le había contado lo ocurrido en Washington, a Meredith y ambos se prometieron no permitir que nadie hiriera a Taylor y a darle más atención, ya no la dejarían de lado por tener citas. Pues ella tenía mucha razón, desde que su relación se hizo oficial y formal, ambos olvidaron el hecho de que tenían amigos y debían frecuentarlos de vez en cuando.

Y era por esa razón, por la que se encontraban en aquel parque, mientras Taylor y Angelica hacían competencias contra las mascotas, claro que Howard e Irina siempre les ganaban cuando de correr se trataba pero ambas chicas no se rendían, con la esperanza de que alguna vez serían más rápidas.

Jason había llegado unos días atrás, con la gran novedad de que su relación con Reyna había llegado a su fin, sorprendiendo a todos, Taylor y Angel le ofrecieron una habitación de la casa para que se quedara ahí, el tiempo que necesitaba.

Charlie llegó acostándose en medio de la pareja, llenándolos de sudor, pues había sido perseguido por un perro por más de diez cuadras, Jason llegó seguido de él, mientras se carcajeaba por lo ocurrido. Finalmente, la pelirroja y la castaña se unieron a sus amigos al escuchar las risas y rindiéndose en aquella competencia contra las mascotas, que también parecían estar agotadas.

Los seis pasaron el resto del día haciendo un poco más de ejercicio y jugando para pasar un buen rato. Las risas no faltaron y las nuevas anécdotas se hicieron presentes. Jason se encargó de inmortalizar aquel momento en un fotografía, que resultó en un fracaso al ser interrumpidos por las mascotas, pues querían ser las protagonistas de aquel momento. El grupo de amigos, volvió a casa de Taylor entre risas, para después tumbarse en el sofá, pedir pizza y ver películas de terror hasta que poco a poco comenzaron a quedarse dormidos.




Tony entró a casa de su hija, encontrándose con un grupo de seis personas en ropa deportiva, repartidos en los sofás de la sala de forma bastante graciosa, Derek y Charlie compartían sofá mientras se abrazaban, Taylor dormía con sus dos hijas, en el sofá más pequeño, Jason y Angelica dormían en el otro sofá, mientras ambos se daban la espalda, Meredith dormía sola en el sofá más grande, con una mano colgando. No pudo evitarlo y les sacó una fotografía, aquellos chicos ya tenían asegurados el bullying de por vida.

Taylor fue la primera en despertar al percibir el aroma del café, se cayó del sofá cuando intentó levantarse rápido y casi que corrió hasta la cocina, donde se encontró a su papá, desayunando plácidamente como si de su casa se tratara.

—¿Ya hicimos las pases? —preguntó en un bostezo, pues sus padres se habían enojado con ella por lo ocurrido en Washington, que habían dejado de hablarle todas esas semanas después del gran sermón y regaño.

—Vengo a hablarte sobre un proyecto. La fundación Maria Stark es tuya. De eso quiero hablarte.

—¿Qué? ¿Quieres que le dé mis derechos de la fundación a Pepper? —Taylor había respondido demasiado a la defensiva. —¿Dónde firmó?

—No seas ridícula, Taylor. Vengo a hablarte de un proyecto.

—Te escuchó.

—S.H.I.E.L.D. ya no existe, la desmantelaron por completo.

—Lo sé, estuve ahí. —Taylor señaló la cicatriz que la bala dejó en su hombro.

Tony ignoro aquello para no comenzar una pelea. —¿Qué te parece que la fundación Maria Stark patrocine a los Vengadores? La torre Stark, dejaría de serlo para convertirse en la torre pues de los vengadores.

Taylor guardó silencio y caminó hasta la alacena, sacó una taza roja grande y se sirvió café, tomó asiento frente a su padre y bebió tan deliciosa bebida, solo para dejar en suspenso a su papá y molestarlo.

—Debe un proyecto bien estructurado, señor Stark y lo consideraré.

Tony entrecerró los ojos para después sacar su celular y mostrar en un diagrama de luz sólida, todo el proyecto. Ambos lo revisaron a detalle y después de varias discusiones sobre si sería bueno o no, Taylor accedió y se dispuso a preparar un viaje a Nueva York y otro a Washington, para comenzar a trabajar en los permisos correspondientes.

Tony acordó que hablaría con un arquitecto para que rediseñará la torre y comenzaran a trabajar en un logotipo que los identificará y los hiciera lucir claramente geniales.











Taylor estuvo viajando sin cesar de Washington a Nueva York, por casi una mes, sin darle oportunidad de volver a casa y encargarse de su empresa, aprovechó su momento de sacar permisos y arreglar papeles, para comenzar también el proceso de ampliar su empresa y poner una cede en Nueva York, tendría tal vez el doble de trabajo y debería buscar alguien que se cargara de Malibu, también debía buscarse un tiempo para Iron Girl y para tener una vida pero estaba segura que lo lograría, sería algo difícil al principio pero se acoplaría, ella era un Stark y los Stark jamás renunciaban, ¿cierto?

Había estado tan ocupada trabajando, que no le tomó importancia al hecho de que Steve no la había buscado desde la ultima vez que se vieron y ella tampoco lo había buscado a él, su trabajo la tenía completamente ajena a lo que ocurría en el mundo real. Tampoco había sabido nada de Bruce y ni siquiera había notado el cambio de Charlie hacía con ella, parecía molesto e incluso que la evitaba.

Pero ella estaba demasiado ocupada como para pensar en otras cosas que no fueran sus empresas, su fundación, sus mascotas, los permisos para el proyecto vengadores y buscar una bonita residencia para cuando llegara el momento de mudarse a Nueva York.

𝐃𝐀𝐔𝐆𝐇𝐓𝐄𝐑 𝐎𝐅 𝐓𝐎𝐍𝐘 𝐒𝐓𝐀𝐑𝐊 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora