Hechicera entre alquimistas: La Esposa del Rey Fantasma II

Cap. 225 El es mi hombre (4)

-"Además..."

Ella sonrió fríamente a la asombrada multitud. 

-"Siempre he estado aquí, durmiendo con mi hombre y nunca salí de la tienda, pero alguien vino a buscar a mi hombre y nos dijo que nos fuéramos de este lugar para mañana. Mi hombre temía que ella interrumpiera mi sueño, por lo que la echó. No sé nada acerca de este abuso sexual; ¿como paso? No creo que él estando conmigo, todavía miraría a otras mujeres."

Mu Ru Yue estaba tan segura. Si Ye Wu Chen la tenía y aún le gustaban otras chicas o incluso quería traicionarla por otras, entonces él no sería digno de su amor...

Las miradas de la otra gente se cruzaron con Mu RuYue y Ji Shui Rou.

Realmente fue así, ya que Mu RuYue era mucho mejor que Ji Shui Rou. Si una persona no estuviera ciega, no abandonaría la perla para escoger un ojo de pez...

-"Rou Er, ¿qué está pasando?"

La expresión de Qin Yi se oscureció mientras gritaba ásperamente. El delicado cuerpo de Ji Shui Rou se estremeció. Ella solo mordió firmemente su labio inferior sin decir una palabra, realmente había sido demasiado descuidada. Si hubiera sabido que esta mujer estaba aquí, no habría inventado tal mentira.

-"¡Rou Er, discúlpate con Lady Mu y con el señor Ye!"

Qin Yi frunció el ceño, con un escalofrío en su rostro sobresaliente.

Los hermosos ojos de Ji Shui Rou se llenaron de lágrimas. ¿Quería que ella se disculpara? ¿Cómo podría el desear hacer eso? Sin embargo, si no lo hace, su primo se enojaría y ya no se preocuparía por ella. ¿Qué debería hacer ella?

-"Lo ... lo siento."

Ji Shui Rou parecía haber usado toda su fuerza solo para decir esa palabra. Su cuerpo se balanceó un par de veces y casi cayó al suelo.

-"Wu Chen, todavía nos vamos mañana."

Mu RuYue miró fríamente a la multitud de la familia Qin. Cuando vio que Qin Yi quería decir algo, no le dio la oportunidad de hablar.

-"Esta vez, Wu Chen y yo seremos inflexibles. Si no fuera por ti insistiendo en que nos quedemos, no lo habríamos hecho. Como no todos ustedes nos dan la bienvenida, no puedo continuar espesándome y quedándome aquí."

Qin Yi sabía que ya no había ninguna posibilidad de que Mu RuYue cambiara de opinión, así que no pudo evitar mirar a Ji Shui Rou.

Tal vez fue debido a su amabilidad que quería ayudar a esta niña, pero más tarde, después de ver su fuerza tiránica, supo que si esta niña los protegería, no enfrentarían ningún peligro en su camino. Sin embargo, el egoísmo de Ji Shui Rou la obligó a irse con furia...

Nunca había pensado que Mu RuYue y su compañero tuvieran tal relación.

Qué risible que él siempre hubiera pensado que este hombre de aspecto común era su subordinado...

Después de todo, los dos parecían realmente incompatibles cuando estaban juntos.

-"Rou Er, sígueme."

Parecía que él realmente la había estado mimando demasiado...

Ji Shui Rou apretó los dientes y lo siguió. Ella no sabía cómo la trataría su primo después de este incidente ...

Al día siguiente, cuando la gente de la familia Qin quiso convencer a Mu RuYue para que se quedara nuevamente, descubrieron que su tienda estaba vacía porque ya se había ido con Ye Wu Chen. Solo podían regresar avergonzadamente para informar de esto a Qin Yi.

Cuando Qin Yi escuchó que los dos se habían ido sin decir una palabra, solo pudo suspirar, Mu RuYue y Ye Wu Chen se habían ido antes del amanecer.

Tuvieron suerte esta vez, ya que cuando abandonaron el grupo de la familia Qin, encontraron otro grupo de personas que pasaban por la Cordillera de las Bestias Mágicas.

Fue debido al incidente de ayer que no iniciaron ningún contacto con este grupo y simplemente los siguieron en silencio. Con su habilidad, estas personas naturalmente no los descubrirían.

Después de un día de caminata, finalmente salieron de la Cordillera de la Bestia Mágica.

Pero justo cuando Mu RuYue quería dar otro paso y dirigirse cuesta abajo, una gran mano la empujó por un lado. Su cuerpo rodó cuesta abajo ...