Cap. 277 Traspasando a Xiantian (5)

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-"¡Insolente!"


Feng Xiang se levantó después de golpear su mano sobre la mesa. Miró a Feng Jing Tian, ​​con el rostro ceniciento. Apretó los puños con fuerza y ​​rugió con furia:


-"Jing Tian, ​​¿qué tiene de bueno esa chica que irías en contra de tu padre por ella?"


Feng Jing Tian se rió dos veces, los labios curvados cínicamente. Pero, lo que dijo después fue tan resuelto, no había un solo rastro de duda dentro de él.


-"¡Quiero romper mi compromiso con Lan Yue y casarme con Mu RuYue como mi esposa!"


-"Feng Jing Tian!" 


Los ojos de Feng Xiang parecían escupir llamas de furia. 


-"Es suficiente jugar con una niña. Si quieres convertirla en tu concubina, puedo estar de acuerdo con eso. ¿Pero quieres casarte con una basura como tu esposa? ¡Eso es imposible! Ciertamente no permitiría que una mujer con antecedentes desconocidos se case con mi familia Feng."


'Aunque este mocoso es arrogante y obstinado, por lo general no iría contra mía, su padre. Sin embargo, ahora, ¿realmente fue contra mí por una mujer? Parece que la mujer debe ser eliminada...'


Un rastro de crueldad brilló en los ojos de Feng Xiang.

Como jefe, siempre hacía cosas en beneficio de la familia Feng. Si alguien se convirtiera en una amenaza para los intereses de su familia Feng, no los dejaría ir, especialmente esa mujer que hizo que su hijo le diera la espalda.

Pero sabía que con Feng Jing Tian aquí, no sería capaz de ponerle una mano encima...


-"Jing Tian."


Pensando en eso, la expresión de Feng Xiang se volvió gentil. Con destellos bailando en sus ojos, continuó: 


-"Si quieres casarte con ella, no es del todo imposible."


Las cejas de Feng Jing Tian se movieron, pero no dijo nada, ya que quería saber qué estaba tramando su padre.


-"Pero..." 


Feng Xiao sonrió fríamente mientras continuaba.


-"El poder de la familia Lan también es muy formidable, por lo que no será fácil romper el compromiso con la familia Lan, por lo tanto, necesitaré que obtengas algo. Escuché que la familia Lan ha estado buscando una planta medicinal conocida como la hierba del dragón invocador. Ese ingrediente se puede encontrar en la Gran Cordillera del Dragón en la Región Central. Una vez que lo obtenga, tal vez la familia Lan estará dispuesta a romper el compromiso."


Feng Jing Tian se mantuvo en silencio mientras miraba dudosamente a Feng Xiang.


-"¿Tienes tan buenas intenciones?"


Hace un momento, este bastardo solo le gritaba furiosamente, luego cambió de humor tan repentinamente. ¿Cómo podría Feng Jing Tian no sospechar de eso? Además, Feng Xiang siempre había sido conocido por planear y hacer cualquier cosa para alcanzar sus objetivos.

Anteriormente, ¿no mató a la madre de Feng Jing Tian por sus objetivos?



-"Mocoso apestoso, eres mi hijo sin importar qué. Aunque estoy realmente enfurecido por tus acciones y te reprendí por golpear a una chica de la familia Lan, debes saber que es porque el viejo de la familia Lan es muy protector. ¿No es eso malo para mi familia Feng entonces? Sin embargo, al verlo desde una perspectiva diferente, también espero que mi hijo sea feliz y bendecido."



La seriedad se expresó en las cejas de Feng Xiang. Era como un padre que realmente cuidaba a su hijo.

Sin embargo, parecía que Feng Jing Tian aún no podía creer sus palabras. Feng Xiang estaba completamente furioso, pero no lo mostró en su rostro. 


-"¡Puedo prometerte que la familia Feng no le hará nada a esa mujer después de que te vayas!"


La familia Feng no se movería, pero eso no significaba que la familia Lan no...


Feng Jing Tian retiró su mirada y miró a Feng Xiang de una manera siniestramente fría. 


-"Espero que cumplas tus palabras. Cuando regrese, deseo ver a Mu RuYue completamente ilesa. Si se lastima en lo más mínimo, ¡no me culpes por causar un baño de sangre en la familia Feng!"


-"¡Mocoso apestoso, no olvides que eres de la familia Feng!" 


Todo el cuerpo de Feng Xiang se sacudió. 


'¿Este maldito bastardo realmente creará un baño de sangre en su propia familia para esa mujer?'


En ese caso, definitivamente no podía dejar que esa mujer viviera...

Hechicera entre alquimistas: La Esposa del Rey Fantasma IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora