Las pruebas del amor

Capitulo 14.

Fernando entro a terapia intensiva, vio a su hermano realmente mal, tenia sus manos bendadas en totalidad, no pudo evitar llorar pues le dolia verlo asi.

Diego: que haces aqui!? -aun seguia molesto-

Fernando: Diego, por favor calmate, lo que menos necesitas ahora es intranquilidad...

Diego: no te quiero ver, me traicionaste! Al igual que aquella mujer!

Fernando: y te pido que me perdones por eso! -sonando suplicante- ademas...-dandole la espalda-

Diego: que!? Ademas que Fernando!?

Fernando: ella no queria hacerlo, fue mi culpa...yo la obligue a hacer eso -tratando de sonar firme-

Fernando.

Lo volvi hacer, volvi a mentirle a mi hermano, sabia que tanto yo como ella deseaba eso que sucedio, pero no podia permitir que el pensara lo peor de Ana.

Fernando escuchaba algo a lo lejos, era Diego...asi que se volteó a mirarlo.

Diego: ...respondeme

Fernando: perdon...no te escuche bien.

Diego: quieres que te perdone, no?

Fernando: por supuesto! Estoy dispuesto a todo!

Diego: entonces quiero que te olvides de Ana para siempre! Que no la busques ni mucho menos te acerques a ella

Fernando: ni por los niños?

Diego: ella puede verlos, pero en tus horarios de oficina.

Fernando respondio sin pensar en todo el daño que eso le provocaria a el.

Fernando: sii... -vacilante-pero prometeme que me perdonaras de corazón y harás lo posible por mejorarte rapido, tu eres mi hermano y no quiero verte así.

Diego: te lo prometo hermano, pero debes cumplir tu palabra!

Fernando salio de la habitacion de Diego, se sentia realmente mal, no sabia si era por el estado de su hermano o porque acababa de renunciar al amor de su vida, eso le dolia muchisimo mas...sentia que le arrancaron una parte de él, sabia que no podía alejarse Ana, ya lo había intentado miles de veces y nunca lo lograba, pero habia dado su palabra y tendria que hacer todo lo posible por cumplirla.

Llegue a sala de espera, ya estaban Jenny y papa, Ana estaba de espaldas, les decía algo, apenas salí mi papa me miro y Ana se giro a verme, nuestros ojos se encontraron e inmediatamente pude ver como nacia la preocupación  en su rostro.

Nicolás: Fernando como esta mi hijo?

Fernando: bien papa, dentro de lo que cabe bien... Tiene sus manos muy lastimadas pero si... Esta bien.

Nicolás: bueno yo pasare... A menos que quieras pasar tu primero Ana?

Ana: no señor, pase, usted es su papa.

Nicolás: gracias Ana.

Vi como la enfermera acompañaba a mi papa adentro, me sentía muy mal, no se si lo que acabo de hacer estaba bien, pero de lo unico que estoy seguro es que quería que mi hermano este bien.

Ana: que paso Fernando?

Fernando: nada Ana -limpiándose una lágrima que se escapo de su ojo-

Ana: si todo esta bien porque tu estas así? Dime que paso porfavor

Fernando: nada Ana enserio, solo que me causo impresión verlo así... No es nada mas -vacilante-