Las pruebas del amor

Capitulo 12.

Fernando.

Por fin sentía que mi corazón volvía a tener vida, sentia como cada parte de mi ser despertaba con cada beso que le daba, como el mundo recobraba sentido, cada parte de su cuerpo se acoplaba a la perfección con el mio, estábamos destinándos, eramos el uno para el otro, solo así me podía sentir con vida, cada beso que me daba me llenaba el alma.

Alejo mi boca de la de ella para tomar aire, pego mi frente junto a la suya inhalando y exhalando con los ojos cerrados, tenia que asimilarlo todo, la amaba como a nada en este mundo pero también sabia lo difícil que era esto para ella.

No la veía pero pude sentir como su pecho pasaba de mendigar aliento a las lágrimas. Abro mis ojos y veo como los suyos se cierran con fuerza, pero las lágrimas comienzan a caer.

Me estremezco, volví a hacer algo que prometí nunca volver a hacer, la volví a lastimar, para Ana esto era muy difícil, después de todo ella estaba con mi hermano y ahora nos encontrábamos en esta situación.

La abrazo y la atraigo hacia mi hombro, ella se recuesta y sus lágrimas caen sin control, acaricio su cabello y le doy un beso en la frente, hagacho mi boca hasta su oreja y en un susurro le digo -lo siento- ella se levanta de mi hombro y me mira inundada en lágrimas.

Ana: esto no es tu culpa, no tienes porque disculparte, yo no debí permitir que esto pasara  -hagarrandome el cachete-

Fernando: yo te metí en esta situación Ana -hagarrando su mano y dándole un beso en la palma-

Ana: tenemos que prometer que dejaremos de hacer esto

Fernando: Ana... Es muy difícil para mi esta situación, no puedo tenerte lejos

Ana: para mi también es difícil pero... No podemos, simplemente lo nuestro es tan complicado, tan dificil y si seguimos así le haremos mucho daño a muchas personas Fernando, y yo no quiero eso

Fernando: pero si estamos lejos nos hacemos daño a nosotros...

Ana: si eso lo se -con voz nostalgica- pero eso es por nuestra culpa, Fernando ya es muy tarde para nosotros y además yo no le puedo hacer esto a Diego...

Fernando: no creo que pueda estar lejos de ti...

Ana: Tenemos que intentarlo... Piensa en como se sentiría Diego con todo esto y aunque odie decirlo -hagachando su cabeza- piensa en Isabella, por mas que no me agrade, ellos no tienen la culpa de nuestros errores...

Fernando: maldigo el momento en que te deje ir, en que permiti que lo nuestro se convirtiera en esto.

Ana: los dos tuvimos la culpa Fernando, no tiene sentido que te reproches, las cosas son así y no podemos hacer nada.

Fernando: si podemos Ana, sabes que si podemos estar juntos si tan solo lo intentaramos.

Ana: pero si estamos juntos, lastimamos a personas que no tienen porque pagar por nuestros errores Fernando... De cualquier manera tu y yo ya nos hemos lastimado suficiente, no tenemos porque hacerle eso a los demás.

No podía decirle nada mas, no tenia fuerzas para refutarle lo que me decía, de cierta manera ella tenia razón, los demás no tenían que pagar por nuestros errores pero nosotros no podíamos condenarnos a sufrir eternamente...

Pegue mi frente a la de ella, nuestros ojos se encontraron, no quería perderla, no podía permitirlo...

Pero antes de si quiera poder decir algo, el ruido de la puerta abriéndose me saca de mis pensamientos.

En ese momento Diego camino con cuidado hasta la cocina, abrio la puerta lentamente y cuando la logro abrir completamente pudo ver aquella escena que jamas olvidaria...su hermano junto a su novia.