Capitulo 35.

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Doroteo: pero mira que linda -hagachandose- sabes, nunca quise hacer nada de esto pero tu y tu patroncito lo provocaron o no... Tu noviecito -con burla- si tan solo te hubieses quedado bailando como todo ese tiempo habias hecho -pasando sus dedos por la cara de Ana hasta su cuello- y no te hubieses metido en asuntos que no te importaban -apretándola por el cuello con fuerza- después de todo, te recibí en mi lugar, te preste ese dinero, te tendi la mano -con mas fuerza- tu me pagas así? -soltándola ya que estaba bastante ahogada- aun no te quiero matar, sabes? -poniéndose de pie- Necesito dinero de tu querido Fernando, estoy seguro ya me cerraron el lugar y ahora no me queda nada! así que le haremos una llamadita -pasando detrás de ella y hagachandose de nuevo-

Ana.

Doroteo se hagacho atrás de mi y saco su celular.

Doroteo: te lo advierto lo advierto! Si dices algo de mas, las pagas!!

Marco y en cuestión de segundos ya le habían contestado.

Doroteo: Hola señor Lascurain, es un placer hablar con usted.

Fernando respondio algo del otro lado.

Doroteo: mire señor Lascurain digame lo que quiera! Quiere ver con vida a su querida Ana? Que le parece si hacemos un intercambio.

.....

Doroteo: no creo que opine lo mismo, mire acá se la paso. -mirandome- tu amado quiere hablar contigo

Doroteo solto la cinta de mi boca y puso su teléfono en altavoz.

Ana: mi amor -llorando-

Fernando: Ana! Mi vida! Estas bien?

Ana: si -mirando a Doroteo algo temerosa-

Fernando: no te preocupes muy pronto estará de vuelta

Doroteo: eso lo decido yo! Claro si usted esta dispuesto a aceptar mis condiciones. -levantandose-

Ana: Mi amor no hagas nada! -gritando- Dile a Jhonny que estoy en el mismo lugar donde el estu...

No pude terminar, Doroteo se había volteado y me había pegado lo que origino que saliera mas sangre de mi cachete, cai de medio lado y el me dio una patada logrando que diera un grito de dolor.

Fernando.

Pude oir un golpe fuerte y luego escuche a Ana gritar.

Fernando: no le hagas nada! Yo te doy lo que quieras! Porfavor no le hagas nada!

Doroteo: yo no estoy jugando señor Lascurain, necesito que me deje el dinero en un lugar, yo le enviare los datos por un mensaje, alguien vigilara muy bien que si cumpla y se lo advierto! No pretenda hacerme ninguna jugada, ira usted solo! Si veo a un solo policía por ahí, ella muere. Apenas llegue entra al lugar, solo, haremos el intercambio allí adentro.

Fernando: y como se que Ana si estará allí?

Doroteo: y como se yo que usted ira sin policias? Confie en mi y yo confió en su palabra, así solucionaremos esto rápido, y se lo repito, llegue solo, no juegue con la vida de su amada. -en burla-

La llamada se corto, me quede pensando y lo tenia decidido no permitiría que le hicieran nada malo, no iba a jugar con su vida.

Las horas pasaron ya había recibido el mensaje del lugar, hable con Jhonny por lo que Ana me dijo y al parecer la dirección de la entrega del dinero coincide con la del lugar donde lo tenian a el y por lo que Ana me dijo era muy probable que de verdad estuviera allí, por lo que esta vez solo me quedaba confiar.

Voy en el auto, de mi pensamiento no sale Ana, ojala este bien, no soporto pensar que esta sufriendo, me parte el alma solo pensarlo. Llege al lugar de la dirección, estoy demasiado nervioso, me paro frente a la puerta, miro a los lados y toco, inmediatamente hay respuesta.

Sale uno de los guaruras y me mira de pies a cabeza.

Guarura: quitese el saco!

Fernando: que?

Guarua: que se lo quite! No queremos micrófonos ni camaritas escondidas.

Fernando hizo lo que le pidió, también le dijo que se quitara la corbata.

El guarura miro a los lados y al no ver nada extraño lo dejo entrar, cerrando la puerta bajo tres candados.

Fernando entro y se encontró a Doroteo.

Doroteo: veo que usted es un hombre de palabra. Y el dinero?

Fernando: Y Ana?

Doroteo: no creerá en mi palabra? -con una sonrisa de superioridad-

Fernando: Y Ana?

Doroteo lo miro con desden y le ordeno a uno de los guardias que fueran a una habitación, Fernando lo observo bien era la del fondo. El guarura entro y le ordeno algo a Ana no le entendió bien, pero al parecer ella no le obedeció.

Doroteo: que la hagas hablar imbécil.

Pude escuchar un golpe seguido de un grito de dolor, era Ana.

Fernando: NO LE HAGAS NADA!! -abalanzándose en dirección al pasillo-

El otro guarura lo detuvo.

Doroteo: el dinero primero señor Lascurain. -con superioridad-

Este es el tercero del día de hoy, se esta poniendo interesante no creen? Gracias por los votos y el apoyo que nos estan dando. No paren de comentar que opinan.

Twitter: @clartini (Daniela)
@connybrise12 (Conny)

Las pruebas del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora