El estrés antes de la boda era una de las cosas más horribles que Clarisse había vivido. Estaba demasiado feliz con ser la esposa de Bill, pero detrás de toda la celebración habían cientos de cosas que tenía que hacer para tener todo listo. Era tanto que tuvo que pedir la ayuda de las chicas y de Molly para no desmayarse.
Clarisse tenía mucha familia, así que había estado enviando invitaciones a diferentes lugares para que no le faltara ninguna persona. Para su sorpresa, solo pocas personas se negaron a asistir, así que todos llegarían el día de la boda, a excepción de sus padrinos, que llegarían un par de días antes para ayudar con los preparativos y conocer a Bill.Había más personas que estarían asistiendo, menos sus padres. Ella no quería verlos en la ceremonia, pues estaba segura que arruinarían todo. Había enviado invitación también a sus compañeros de Hogwarts y a Viktor Krum, con el cual llegó a convivir varias veces. No estaba de más tener ahí a todos aquellos que habían sido buenos con ella. Bill había enviado invitación a varios de sus compañeros de trabajo y amigos de Egipto, así que esperaban que la boda fuera bastante grande.
La búsqueda del vestido había sido lo más estresante de todo, pues ninguno la convencía. Desde que era niña se había burlado de las novias por aquello, hasta que supo lo difícil que era tener todo preparado para el gran día. También le había pedido a Ginny y Hermione que fueran sus damas de honor.
Molly estaba igual o peor que ella, ya que estaba segura que si hijo Ron, junto con Harry y Hermione estaban planeando hacer una especie de misión, así que intentaba mantenerlos separados mientras los mandaba a hacer ciertas actividades de limpieza dentro de La Madriguera, además de que tenían sumamente prohibido aparecerse dentro de los terrenos de la casa de los Weasley, así que Arthur Weasley había decidido ir a recoger a la familia de Clarisse a la cima de la colina que estaba más cerca de casa.
—¿Estás nervioso? —Clarisse le preguntó a Bill al verlo mover su pierna mientras estaba sentado en el sofá.
—Un poco. Pensé que tu familia era pequeña —Bill respondió con nervios.
—Es que no nos vemos tanto, pero la verdad es bastante grande —Clarisse respondió pensativa— pero no te preocupes, son divertidos y apuesto que les vas a caer muy bien.
—Espero que así sea —Bill hizo una mueca.
—Suelen ser muy bromistas, así que no te tomes a mal sus bromas —Clarisse sonrió con emoción. Después de mucho tiempo los volvería a ver a todos— creo que los únicos aburridos eran mis padres.
—¿Son iguales que tú? —Bill preguntó un poco más tranquilos.
—Todos coincidimos en el mismo carácter —Clarisse se encogió de hombros.
—La única excepción es que les gusta hacer chistes un poco pasados de la raya —Cedric dijo, uniéndose a la conversación— ya sabes, les encanta el doble sentido.
—Ahora lo entiendo todo... —Bill respondió lentamente, mirando de reojo a Clarisse.
Después de unos segundos, las pesadas pisadas de los invitados se hicieron presentes en las hierbas del patio, así que los tres salieron de La Madriguera para recibir a los invitados. Varios miembros de la familia estaban ahí, sonriendo con emoción y mirado la casa de los Weasley con asombro. Los demás llegarían el día de la boda.
—¡Madrina!—gritó Clarisse con emoción, y corrió a abrazarla— ¡Padrino!
Su padrino la miraba con emoción, mientas que su madrina sonreía ampliamente al ver a su ahijada después de tanto. La mujer era hermana de la madre de Clarisse, pero era complemente diferente. Llevaban a dos niños pequeños de las manos, Joshua y Natasha, los cuales eran los primos de los hermanos Diggory. Después de que saludaron a la pareja y a Cedric, el padrino de Clarisse se dirigió hacia la señora Weasley y le plantó dos besos en cada mejilla, dejándola aturullada.
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Clarisse ⟨••Bill Weasley••⟩
أدب الهواة(COMPLETA) Clarisse Diggory jamás imaginó que a partir del torneo de los tres magos las cosas se pondrían feas, mucho menos que a pesar de la desgracia encontraría a alguien que la haría feliz en los momentos oscuros. (Basada en los libros)