Capitulo 111

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Aquella navidad fue completamente diferente a las que ya habían festejado con anterioridad. Fleur y Cedric se habían marchado a Francia para festejar. Los miembros de la Orden habían decidido no festejar nada para no hacer grandes multitudes. En aquellos momentos lo mejor era estar al pendiente de los diferentes lugares seguros que tenían.
Molly no había dudado en invitarlos a cenar algo aquel día, pero Bill y Clarisse se negaron rotundamente a asistir. Tenían a Ron de invitado en casa y no querían exponerlo de alguna manera frente a todos.

Ron no se había quedado callado y se había negado rotundamente a "arruinarles" aquella celebración, así que Bill había hablado seriamente con el sobre cómo estaban sucediendo las cosas, así que después de que se había dado cuenta que la pareja no cambiaria de decisión, dejó de quejarse. Aquello no sería como siempre, pero aún así Clarisse estaba dispuesta a hacer todo lo posible porque pasaran un rato agradable en aquella ocasión.

Aunque solo eran tres decoraron la casa, pusieron luces navideñas e hicieron un enorme banquete que serviría para comer los próximos días.
No era el mejor lugar, pero sin duda alguna aquello fue memorable. Por un segundo pareció que nada malo sucedía. Los tres recibieron regalos e incluso pusieron un poco de música para hacer el momento un poco más lindo. Aquello les había funcionado de maravilla, sin duda alguna.

A pesar de tener una fecha tan linda, la rutina de todos no había cesado. Bill había estado pensando en dejar de trabajar en Gringotts, aunque sabía que aquello no lo beneficiaría en nada. Los duendes no habían dejado que los mortifagos se infiltraran, así que aún se podía considerar un lugar seguro. Gracias a todo lo que sucedía tenía más trabajo que de costumbre, hasta el día que un grupo de mortifagos lo atrapó, así que se convirtió en un furtivo. Ahora solo le quedaba hacer guardia con los miembros de la orden.
Clarisse, por su parte, había estado más tiempo en casa que en Hogwarts. Madame Pomfrey y la profesora McGonagall solamente la llamaban cuando era muy necesario, pues no la querían poner en peligro.Para su sorpresa, aquello se debía a que los abusos con los estudiantes cada vez eran más pocos, incluso se había enterado por Neville que era gracias a que todos se mantenían ocupados con el Ejército de Dumbledore, incluso los primeros años estaban aprendiendo cosas que iban contra el decreto estudiantil.

Bill se había ido a dormir un poco más temprano debido al agotamiento del día y a la celebración que habían tenido horas atrás tarde era uno de los días en que si la necesitaban en Hogwarts, así que después de hacer su trabajo volvió a casa para descansar un poco y preparar la cena para sus chicos. Todo pintaba bien, hasta que se percató que Ron estaba tomando sus pocas pertenencias para marcharse. Clarisse estaba feliz por una parte, pues sabía que el pelirrojo había mejorado un poco y estaba listo para continuar con su camino, pero por otro lado que se fuera la asustaba bastante, pues no tenian ni la más mínima idea de donde podían encontrarse Harry y Hermione. Ambos habían intentado hablar por ellos por el pedazo de espejo, pero no tenían respuesta alguna. Incluso se había contactado con Sirius, pero el hombre no había recibido ningún llamado.

—Clarisse, no te esperaba en casa tan temprano —Ron le comentó una vez que ambos se encontraron en la entrada de la casa.

—No hice mucho hoy... me doy cuenta que te irás ahora –Clarisse le comento con algo de melancolía. Aquel chico le había hecho compañía por unas largas semanas y sin duda lo extrañaría— ¿tienes alguna idea de donde pueden estar?.

—Para nada —Ron hizo una mueca— pero los buscare hasta en los lugares más recónditos. De nada me sirve estar escondido aquí mientras ellos pasan dificultades.

—Te entiendo. Espero que me dejes ayudarte a buscarlos —Clarisse le comentó con preocupación.

—No puedo dejar que hagas eso, Clarisse. La misión que tenemos es demasiado peligrosa como para que estes enterada —Ron se apresuró a decir, aunque Clarisse negó varias veces con la cabeza. No se refería exactamente a la misión de Dumbledore.

—Se que es un complejo secreto, pero por lo menos espero poder ayudarte a llegar a tu destino. Yo puedo regresar fácilmente a casa, pero para ti es difícil porque los chicos pueden estar en cualquier parte del mundo ahora mismo —Clarisse comentó— es mejor dos que uno.

—Es genial contar contigo ahora mismo. Te lo agradezco mucho.

—No tienes que hacerlo, Rorro —Clarisse le dijo. Al instante se aguantó la risa al ver el rostro avergonzando de Ron.

—¿Quién te contó sobre eso? —Ron le preguntó apenado.

—En Hogwarts los chismes corren rápido —Clarisse se encogió de hombros, recordando las graciosas anécdotas que había escuchado.

—¿Fue Ginevra verdad? —Ron le preguntó con una ceja levantada. Clarisse no pudo aguantarse y se rió por lo bajo.

—Tienes que admitir que fue algo gracioso —Clarisse se cruzó de brazos una vez que termino de burlarse del chico.

—En su momento no fue, hasta que comenzó a ser molesto. No pensé que una chica tan linda como Lavender podría llegar a tal grado de acosadora —Ron se estremeció ligeramente— aún no tengo mucha idea de porque odiaba que estuviera junto a mis amigos.

—Estaba celosa de que te gustara Hermione y no ella, es algo que no tiene mucha lógica —Clarisse le respondió— ¿acaso no recuerdas cuando llamaste a Hermione en la enfermería?.

—Pensé que había sido un sueño —Ron se rascó la cabeza, pensativo— ahora entiendo porque Lavender estuvo distante conmigo.

Clarisse se quedó en silencio, observando por unos segundos al chico que tenía en frente. Se movía de un lado a otro y parecía que quería decirle algo más, así que ella esperaba que lo hiciera pronto.

—¿Estás bien? —Clarisse le preguntó.

—¿No escuchas eso? —Ron le preguntó un poco titubeante. Clarisse solo negó con la cabeza, pues aparte de las voces de ambos no había nada más— desde hace un par de días escucho que alguien dice mi nombre... es como un susurro bastante lejano... no lo sé, la voz la conozco.

Clarisse no tenía idea de que podía decirle, pues jamás había nadie más en la casa que no fuera Bill o ella, así que le preocupaba un poco que el Ron estuviera imaginando cosas. Sabía que el chico no tenía nada malo en si, pero tal vez el estrés le estaba cobrando factura.

—¿Te sientes bien? —Clarisse le preguntó, acercándose un poco más a él para ver de cerca su piel y las pupilas de sus ojos, pero aún así el pelirrojo menor se veía completamente bien. No tenía ningún signo visible más que el cansancio de los últimos días.

Clarisse quería revisarlo más, pero se sobresaltó en el momento en que Ron sostuvo entre sus manos el desiluminador y lo miró de cerca con asombro. No entendía lo que pasaba hasta que una luz bastante fuerte salió de el y se adentró al cuerpo de Ron, haciendo que el chico cayera de bruces al suelo. El asombro era más grande que el miedo y el dolor del chico, así que así como estaba tirado en el suelo se levantó con rapidez.

—Se donde se encuentran, tengo que irme ahora —Ron le dijo con rapidez.

No dudo ni un segundo en correr hasta la puerta. Clarisse no entendía lo que pasaba, incluso seguía repitiendo en su cabeza la escena que había presenciado tan solo unos segundos atrás. Jamás había visto nada así, era algo completamente nuevo y seguramente no lo volvería a ver jamás. Después de unos segundos comprendió que Ron estaba marchándose de casa para seguir con su misión. Siguió al pelirrojo lo más rápido que sus piernas le permitían, pues quería al menos darle algunas cosas para su búsqueda, pero solo alcanzó a ver cómo Ron desaparecía en el aire. Solo esperaba que tuviera un buen viaje.

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Holaaaaaaa!!!!

Ahora si me tome mucho tiempo de descanso y lo siento, para todos aquellos que estuvieron esperando actualización.

Les subiré dos capítulos hoy para remediar mi inactividad, los amo ♥️

Clarisse ⟨••Bill Weasley••⟩ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora