Capitulo 54

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Bill había intentado tranquilizarla por un rato, así que Clarisse no puso resistencia alguna. Terminaron su cita por San Valentín y el tuvo que marcharse nuevamente.

Sabía haberse comportado como Cho la había hecho igual de mala que ella, pero aún así aún tenía la satisfacción de hacerla pagar por cada burla que le había hecho desde que Cedric se fue.
Sabía que Harry la estaba pasando bastante mal por la actitud de la chica, en especial porque estaba muy enamorado de ella.

Al día siguiente cuando entró al Gran Comedor parecía que el chisme de lo que había sucedido en el salón de té había recorrido todos los espacios del castillo. El grupo de amigos de Cho la miraban mal, pero aún así había muchos más que la veían y le sonreían, en especial los gemelos.

—Desearía haber estado ahí —George hizo una cara de tristeza fingida— muchos están comentando qué tal vez te pasaste con ella.

—Aunque tengo que admitir que la aguantaste por mucho —Fred le aplaudió— ni siquiera se como lo hiciste.

—No pensaba golpearla, para ser sincera. Me molesto mucho que fuera mala con Harry... también que hablara sobre mi hermano cuando ni siquiera había guardado luto —Clarisse movió la cabeza de un lado a otro en forma de negación— ella iba a golpearme primero, así que en ese momento no me di cuenta de lo que hacía hasta que mi mano impactó contra su mejilla.

Los alumnos de Gryffindor que estaban cerca de ellos se habían quedado callados para poder escuchar bien lo que había pasado. Lo más seguro era que para la tarde todos sabrían lo que había dicho.
Todos se quedaron callados cuando Cho Chang y Marietta Edgecombe pasaron frente a todos sin dirigirles la mirada. Clarisse miró al instante a Harry, el cual solo bajo la cabeza con tristeza.

•••

Después de cenar, Clarisse y los gemelos Weasley se dirigieron hasta donde sería la clase de Astronomía en busca de Ron y Ginny, pues como ya no formaban parte del equipo querían que Gryffindor se llevara la copa ese año.

—¿No están aquí ni Ron ni Ginny? —preguntó Fred a Harry mientras miraba alrededor y arrastraba una butaca— : Mejor. Hemos estado viendo el entrenamiento. Los van a aplastar. Sin nosotros son un completo desastre.

—Bueno, Ginny no lo hace tan mal del todo —intervino George, y se sentó junto a su gemelo— la verdad es que no me explico que lo haga tan bien, porque nunca la hemos dejado juntar con nosotros.

Clarisse había visto a Ginny jugar mientras nadie la veía las veces que fue a la Madriguera. Solo había estado un par de veces ahí, pero eso le había bastado para ver cómo la chica era genial haciéndolo.

—Porque ustedes no prestan atención —Clarisse les respondió mientras se acomodaba al lado de sus amigos.

—Tú hermana entra a hurtadillas en el cobertizo de las escobas del jardín desde que tiene seis años y vuela con sus escobas, por turnos, cuando no pueden verla —informó Hermione desde detrás de un inseguro montón de libros sobre la asignatura de Runas Antiguas.

—¡Ah! —exclamó George, ligeramente impresionado—. Bueno, eso lo explica todo.

—¿Ha parado Ron alguna bola? —preguntó Hermione asomando la cabeza por encima de su libro.

—Verás, el caso es que las para cuando cree que nadie más lo mira —explicó Fred poniendo los ojos en blanco— de modo que lo único que tenemos que hacer es sábado es pedir a los espectadores que se den la vuelta y hablen unos con otros cada vez que la quaffle llegue al extremo del campo —se levantó e, inquieto, fue hacia la ventana y desde allí contemplo los oscuros jardines— ¿saben una cosa? El quidditch era lo único por lo que valdría la pena quedarse en este colegio.

Clarisse ⟨••Bill Weasley••⟩ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora