Dalton comenzó a conducir. Yo miré por la ventanilla para poder evadirlo aunque fuera un poco. Porque estaba molesto. Era imposible que no lo estuviera. Debía haberse decepcionado mucho y tenía razón, arruiné todo.
Seguimos en silencio hasta que me di cuenta de que nos dirigíamos a su casa. Eso era raro.
— ¿No debías llevarme a mi casa?— dije.
— No, tenemos que hablar y lo sabes.Lo observé. Conducía muy serio.
— Está bien— dije resignado.
Traté de prepararme para lo peor. Aunque no sabía qué podría ser eso. No lo había pensado mucho. No quería. Me daba miedo lo que podría descubrir si analizaba las cosas.
Llegamos. Bajé del auto. Entré a su casa. Nancy estaba ahí pero me pasé de largo. Me sentía muy angustiado.
Entramos a un salón. Lo miré.— Está bien, hablemos— dije preocupado.
— Aquí no, en mi habitación— dijo.
— ¿Y si vamos a la piscina? Te gusta estar ahí...
— Emery, no estoy de humor para eso— dijo.Efectivamente su cara daba miedo.
— De acuerdo— dije.
Subimos las escaleras. Yo sólo lo seguí. Ya adentro, él cerró la puerta.
Lo observé y la inquietud me invadió por completo. Se sentó en su cama.— Ven aquí— dijo, señaló a su lado.
Lo hice más por temor que por otra cosa.
— Entiendo— dijo—. Comprendo que quieres ir a la universidad. Sé por qué. Y me encantaría que lo hicieras si eso te causa felicidad...
— ¿De verdad?Me observó. Ya no parecía enojado. Parecía triste.
— Quiero que seas feliz— dijo.
— Pero... ¿Qué significa eso?
— Lo he pensando llegué a una conclusión: tú debes ir a la universidad. Todas las cosas al parecer pueden variar menos eso... tú de verdad deseas ir ahí. Por eso me escondiste todo lo que hacías. No querías causar problemas pero... es imposible que algo como esto no lo haga... porque es una decisión complicada.Estaba siendo muy maduro.
— De acuerdo— dijo—. Encontraremos una forma. Pero debes ir a esa universidad porque te gusta.
— ¿Y qué forma será esa?
— No lo sé— dijo—. Pero pensaremos en algo...
— ¿Entonces no estás molesto conmigo?
— No... lo estaba al principio pero ya no. Más que enojado... me puso muy triste que me ocultaras tantas cosas. Pensé que confiabas en mí.
— ¡Confío en ti!
— ¿Entonces por qué no me contaste nada de eso?
— Porque no estaba seguro— dije triste—. Porque me gusta la idea de poder ir a la universidad pero también me agrada poder quedarme aquí contigo, junto a mi abuelo...
— No pueden gustarte ambas cosas— dijo—, debías elegir... me dijiste que querías quedarte... ¿Era una mentira?
— ¡No, en ese momento sí deseaba quedarme!
— ¿Y ahora ya no?
— ¡Es que no planeaba conocer a la madre de Tony y que me alentara con todo eso! ¡Yo no creí que terminaría teniendo ganas de realizar algo en concreto! ¡Y cuando te lo dije de verdad quería quedarme porque mi abuelo me preocupaba...
— ¿Entonces todo era por tu abuelo? ¿En algún momento te importé yo?
— ¡Las cosas no son así, yo de verdad quería quedarme contigo pero...No terminé la frase. Porque él tenía una expresión muy triste en la cara.
— Yo... te amo— dijo—. Es todo lo que sé... y no sé por qué me pareció que eso sería suficiente porque la verdad es que nunca lo es...
— ¡No, te equivocas, sí es suficiente!— dije alterado y triste—, ¡He sido más feliz desde que te conozco de lo que alguna vez fui!
— Pero quieres irte.
— Aún no estoy seguro de eso— dije—. Sólo estudiaba por si acaso.
— ¿Y cuándo planeas estar seguro?
— Es que aún no lo pienso...
— Eso sí no entiendo— dijo—, ¿Cómo puedes no saber lo que quieres?
— ¿Entonces tú estás absolutamente seguro de lo que quieres?
— Sí, por supuesto— dijo muy serio—. Quiero empezar mi propia empresa mientras el amor de mi vida está a mi lado. ¿Sabes por qué estoy tan seguro? Porque amo ambas cosas. A mi sueño y a ti. Pero presiento que las cosas no son así para ti... porque si amaras algo esto no sería tan difícil para ti...
— Te equivocas, yo...
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De Amor Y Otras Cosas Imposibles
Fiksi RemajaDalton necesitaba graduarse a como diera lugar. En su desesperación, le ofreció un trato a Emery, un chico muy inteligente: si le ayudaba a pasar los exámenes, él le pagaría una buena cantidad de dinero. Emery necesitaba el dinero para la universid...