𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 𝐇𝐀𝐒 𝐒𝐈𝐃𝐎 𝐓Ú - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀

8.

Capítulo 8.

Grace.

Cada vez que llueve tan intensamente como ahora, recuerdo nuestra niñez. Cuando Niall me encontraba escondida dentro de la tina, aferrada a mis piernas. Él sonreía al verme, pero no se burlaba, se metía conmigo y me abrazaba hasta que los truenos y los relámpagos se detuvieran.
Nada a cambiado, él continúa abrazándome, aferrando mi cuerpo al suyo mientras escuchamos la tormenta.
Mis piernas y las suyas son una enredadera bajo las sábanas, me hace sentir segura. Él siempre me ah hecho sentir segura.

—¿Recuerdas cuando pequeños... —

—¿Te encontraba en el baño? —Me interrumpe.

Sonrío.

—Me sorprende tu capacidad para saber que estoy pensando exactamente. —Bromeo.

—Hemos crecido juntos, sé más de ti que tú misma. —Se burla.

—Tienes razón. —Susurro acariciando su cuello con mi nariz. —Estoy feliz de estar aquí y no en casa. Hubiera estado muerta del susto.

—Yo también estoy feliz de que estés aquí. —Murmura y luego lo escucho suspirar. —¿Grace?

—¿Sí?

—Tengo que decirte algo.

—Te escucho.

Él se queda en silencio por varios segundos.

—La abuela se está muriendo. —Me dice.

De entre todas las cosas que podría haberme dicho, jamás creí que hablaría de su abuela.

—Oh. —Susurro sin saber que decir.

—Rechazó la quimioterapia. —Continúa hablando. —Su cáncer es avanzado y quiere vivir el último tiempo que tiene de vida lejos de un hospital.

—Lo siento, Niall. Sé que la quieres, ella te ama también. —Digo.

Niall vuelve a suspirar.

—¿No te gustaría verla? —Su pregunta es apenas en un susurro, un poco temerosa mientras sus dedos juegan con mi cabello.

—No. —Mi respuesta es inmediata, no tengo nada que pensar.

—Uhmm. —Murmura. —¿Eso quiere decir que tampoco has pensado sobre la herencia y el testamento donde ambos somos parte?

—¿Porqué debería seguir pensando en eso? Habíamos dicho que no aceptaríamos nada de ella. —Le recuerdo. —¿Tú lo estás considerando? —Le pregunto alzando el rostro para verle.

Niall me observa con una mueca en los labios.

—Sí lo hiciera ¿Te sentirías molesta conmigo?

—No sé. —Respondo. —Es tu decisión.

—¿Pero te sentirías molesta?

Suspiro también.

—No debería, pero sí. —Admito. —Sé que no puedo tomar las decisiones por ti, pero no deseo nada que venga de ella. No puedo llamarla abuela, nunca lo fue.

—Entiendo. —Responde y sonríe un poco.

—Niall, lo siento. —Respondo. —Es solo que te amo tanto, y ella intentó arruinarlo. Si lo hubiera conseguido no sé qué habría sido de mí. No lo hubiera podido soportar. —Continuo diciéndole. —Sé que mi orgullo no me llevará a ninguna parte, pero ella quiso arruinar nuestras vidas.

—Pidió perdón. —Susurra mirándome.

—Lo sé. —Respondo. —Pero no la puedo perdonar.