𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 𝐇𝐀𝐒 𝐒𝐈𝐃𝐎 𝐓Ú - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀

32.

Capítulo 32.

Grace está acostada en la cama de mi antigua habitación mientras hablo por teléfono con mi abogado. Sus dedos se deslizan por su vientre y susurra palabras de amor para Liliane. Verla así me hace perder el hilo de la conversación, así que desvío la vista y vuelvo a ponerle atención a Richard. Según sus palabras, Megan arriesga seis meses de cárcel por haber incumplido la orden de alejamiento, incluso un año si el juez lo determina.
Las cámaras del centro comercial muestran quién inició la discusión y sobre todo el momento exacto en que tomó a Grace, provocando la reacción de ella al golpearla con la bandeja de plástico que le dañó la nariz.

Si existe algo bueno en todo esto, es que en ese momento se encontraba un policía fuera de servicios, disfrutando con su familia en su día libre cuando presenció lo que estaba pasando. Así, no sólo tendremos a Lily como testigo, si no aquél hombre que pudo socorrer a Grace cuando yacía tendida en el suelo.
Cuando termino de hablar con Richard, y corto la llamada, me acerco a mi hermosa chica y me siento a su lado. Ella me observa a la espera de una respuesta.

—Háblame ¿Que dijo Richard?

—Bueno, de entre todas las cosas que mencionó, es que Megan podría pasar una larga temporada en la cárcel por incumplir la orden de alejamiento. Y también por el daño que te ha hecho —Le cuento —Pero, ya sabes que ella y su familia no querrá que eso suceda, así que van aferrarse a la idea de que está enferma, para poder internarla en algún centro psicológico. Y con respecto a nuestra demanda, Richard sugirió una indemnización.

—Niall, yo no quiero dinero, solo quiero que nos deje en paz. Quiero caminar libremente por el centro, por el parque... por donde sea sin temer a encontrarla y vivir un episodio así —
—Me explica —No quiero su asqueroso dinero, no lo necesitamos.

—Lo sé nena, pero debemos hacerlo. Porque de alguna manera debe pagar por lo que te hizo. Ella no está enferma, te empujó Grace -Le recuerdo -Lo hizo conscientemente, no le importó que estés embarazada, y no me quedaré de brazos cruzados viendo como la internar en un psiquiátrico. Sé que no necesitamos ese dinero, pero lo haremos para que sepa que con nosotros no se juega.

Ella me observa no muy convencida. Entiendo que lo único que desee es paz y tranquilidad, en poco tiempo nacerá Liliane y necesita estar en un ambiente cálido y tranquilo. Pero solo imaginar que podríamos haber perdido a nuestra hija me enfurece.

—Esta bien —Acepta —¿Ella está en la cárcel ahora?

—Sí, pero Richard dijo que su abogado está intentando que obtenga la prisión preventiva en su domicilio.

—Dios mío ¿Y si viene hasta aquí?

—No lo hará, no es tan estúpida como para arriesgarse —Acercando mi mano, acaricio su vientre —Todo estará bien, déjamelo a mí.

—Sí —Ella suspira —Ayer Lily escuchó lo que Megan dijo, eso de que somos primos y que no éramos tan amigas si yo no le había contado.

—Tú sabes porqué no se lo dijiste, es un secreto de familia. Nos prometimos que no saldría de estas cuatro paredes.

—Tú se lo dijste a Louis —Me recuerda.

—Lo sé, estábamos pasando momentos difíciles y necesitaba hablarlo con mi amigo. Ya sabes, para escuchar algún consejo —Le explico —Sí quieres hablarlo con Lily, llámala.

—Ya lo hice, pero no me contestó. Creo que no aprueba nuestra relación.

—¿Porqué no lo haría?

—Ayer se veía asombrada, y quizás un poco decepcionada de que no se lo hubiera contado.

—Grace, si ella se siente así tendrá que entenderlo. No es algo que se hable a los cuatro vientos, teníamos nuestras razones —Le explico —Si ella no desea hablarlo, no insistas. Ya vendrá a ti.