Operación "Línea de Tiempo"

Capítulo 11. Confesiones con Cynthia.

Aquella noche lo estaban pasando genial. Habían ido todos a un pub nuevo, estaba  lleno de gente y el ambiente era buenísimo. Cynthia y Sara bailaban juntas en la pista. Sonaba And then he kissed me, y las dos chicas se movían mientras hacían gestos referentes a la letra, era muy divertido.

John y Paul las miraban sonriendo. John estaba contento por la relación que tenían las dos muchachas, sabía que a su mujer le hacía falta una amiga. Hacía tiempo que no la veía disfrutar tanto. Paul, por su parte, miraba embelesado a Sara.

En ese momento una chica se acercó a él por detrás y le tapó los ojos. Luego le susurró al oído. Paul se volvió y sonrió, levantándose para darle un abrazo. Fueron juntos a tomar algo a la barra.

Sara, que todavía bailaba con Cynthia, se quedó mirando la escena. Al poco dijo que quería sentarse. Fueron a la mesa y entablaron conversación con John y Ringo. Pero Sara no podía dejar de mirar a Paul y su acompañante, que coqueteaban sin parar. Cynthia se la quedó mirando muy seria.

-Es Ann, un antiguo ligue de Paul –le dijo.

Sara se volvió hacia ella.

-¿Qué? –dijo fingiendo no saber de qué le hablaba su amiga -¿quién?

-La chica que está con Paul, cielo, la que estás mirando –contestó ella.

-Yo no estoy mirando a nadie –respondió ella incómoda.

-Ya… -dijo Cynthia pensativa.

Paul, desde la barra, la miró de soslayo y vio su expresión triste. Volvió a su conversación y, al cabo de unos minutos, se acercó con la chica de la mano.

-Me voy a casa de Ann, adiós a todos –dijo feliz.

Sara bajó la mirada y comenzó a juguetear nerviosa con su anillo, pero no dijo nada. Paul, frustrado, meneó la cabeza y se marchó.

Conforme fue pasando el tiempo, Sara conectaba más y más con el grupo. Compartían buenos momentos, no sólo durante los viajes y conciertos, sino también fuera del trabajo, ya que solían quedar juntos con otros amigos.

A menudo cenaban en casa de ella, y a veces iban también Cynthia y Pattie (esta última fingía amabilidad aunque seguía sin caerle nada bien la recién llegada). John, gran intelectual, hablaba con ella sobre política, historia… Había entre ellos un juego muy curioso, que sólo los otros tres integrantes de la banda podían comprender. John le preguntaba a Sara, en clave, si lo que afirmaba era por sus conocimientos del futuro. Ella, de una manera u otra, lograba hacérselo saber sin que las chicas o quien estuviera allí más con ellos pudieran darse cuenta de nada.

Paul empezaba a valorarla cada vez más. Trabajaba duro y se portaba muy bien. Además, era muy discreta, nunca buscaba salir en ningún medio, ni daba ningún tipo de escándalo.

Sara y Cynthia eran ya buenísimas amigas. Salían juntas de compras y quedaban para comer. Poco a poco se iban haciendo cada vez más confidencias.  Por supuesto no le había contado nada sobre su procedencia, el trato con Mal y los chicos era no decir una palabra. Había sido casi un juramento entre ellos.