106-Donde hemos sido felices.

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Mónica: Vanesa... ¿Bea, la viste?

Bea: ¡Lo que vi es a un motociclista que ibas a atropellar! ¿Qué pasa Mónica? ¿Dónde estás?

Mónica: Bea, era Vanesa... estoy segura, ¿no la viste? Estaba ahí, en una moto.

Bea: Creo que la plática de hace rato te dejó un poco turbada, yo no vi a Vanesa, seguro te confundiste, solo piénsalo, ¿Qué tendría que estar haciendo aquí? Si la novia está con Lola, ella debe saber que no está en tu casa, seguro solo creíste verla... anda, vamos que mis padres nos esperan, ¿localizaste a Lola?

Mónica: Emm... sí, contesto a un mensaje que estaban por terminar, pero Inma quería ir por un trago, así que nos verá más tarde en casa de tus padres.

Tienes razón... Vanesa no tendría nada que hacer aquí... -me reincorporo y sonrío- si ni siquiera quería venir cuando estábamos juntas, jajajajaja estoy enloqueciendo, mejor vámonos ya.



Vanesa

¿Pero qué acaba de pasar? Era ella, Mónica... la vi, sus ojos... esos ojos...dios mío, se veía tan radiante, tan linda... tan feliz -sonrío al pensarla- tan feliz...

En cuanto abro la puerta de mi piso, guardo mi casco e intento pensar en otra cosa, así que lo mejor será tomar una ducha, Inma no debe tardar en regresar, así que le dejo un mensaje para invitarla a una cita esta noche, quiero estar bien con ella, así que estoy decidida a arreglar cualquier malentendido y pasar un buen rato juntas.

Al salir de la ducha, lo primero que hago es ver mi celular buscando una respuesta de mi novia, pero no hay nada en la pantalla así que me decido a llamarla, el teléfono timbra y después de varios intentos me manda al buzón de voz, lo intento nuevamente y vuelve a pasar, luego de un par de intentos más por fin escucho su voz del otro lado.

Inma: Sí, hola Vane... dime.

Vanesa: ¿Hola guapa, cómo lo estás pasando? Llamo para invitarte a salir, me encantaría tener una cita contigo, cenar fuera, ir por una copa, a bailar, no sé... lo que quieras, pero intentemos arreglar las cosas corazón, por favor.

Inma: Si... Jo, vane... tendrá que ser en otra ocasión, lola y yo iremos a tomar unos tragos, hace mucho que no nos vemos en forma y como comprenderás necesito estar con una buena amiga ahora, lo reprogramamos, si aun quieres... te dejo, Vanesa, después hablamos.

Vanesa: Pero, Inm... -antes de que pudiera seguir la plática, escucho el tono, me ha cortado la llamada- bueno... parece que esta noche no habrá reconciliación... -me tiro en el sofá con pongo entre mis piernas- ¿Qué tal mi niño? Aquí nos quedamos solos... Que me he quedado toda guapa para salir por ahí y ahora... ¿sabes qué? ¡Me voy! Esta noche tenía otro plan así que, con Inma o sin Inma lo haré, no solo ella tiene amigos que hace mucho que no ve, ¡yo también! Nos vemos más tarde, ponguito de mi alma...

-Agarro el casco y mi motocicleta y salgo del piso, necesito relajarme un poco, perderme y dejar de pensar en tanta cosa, necesito un psicólogo, alguien con quien hablar... sonrío ampliamente recordando que tengo a la persona perfecta.

Al llegar me pongo una moldura de gafas y mi gorra, esta noche quiero llamar la atención lo menos posible así que, al entrar al lugar, me voy directo a la barra- Un tequila, y que sea doble, pero con cara de triple, por favor.

Barman: ¿Vanesa? ¡La mismísima Vanesa Martin en mi barra!... jajaja después de nuestro último encuentro no esperaba tanta amabilidad... aquí tienes, reposado con cara de triple, limón y sal... ¿Qué te trae por aquí, Vanesa?

Entrelazadas... ¿Puedes sentirlo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora