Capítulo 14: FINAL parte A

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Eran las 7 de la noche cuando por fin daban noticias de la morena ojo azul.

Ella, a pesar de las fracturas en clavícula, pierna derecha y más raspaduras por todo el cuerpo, todo estaba bien con su persona, permitiéndosele así a Archie el acceso inmediato, y siendo Patty la que se quedara bajo su cuidado ya que los padres de la paciente estaban de viaje fuera del país.

Con respecto a Candy, Terry la dejó a cargo de su madre, ya que él debía presentarse en el teatro para terminar con sus funciones; y a partir de ahí, no despegarse más de su lado.

A Tom se le informó absolutamente nada del accidente hasta después de que su hermana fuera dada de alta al día siguiente, pero eso sí, con estricta recomendación de estar en completo reposo hasta que su primer trimestre de embarazo estuviera completo.

Sin embargo, la pareja pronta a casarse pensó seriamente en retrasar los planes de boda; pero éstos continuaron a petición de Annie quien sí se lamentaba de su situación, ya que no estaría presente en el evento, más no permitió que sus amigos aplazaran lo planeado.

Por lo tanto, la primera semana de diciembre comenzó su curso; y una mañana, mientras desayunaban en casa de Eleanor, Terry recibió una llamada por parte de los agentes policíacos quienes le reportaron:

Tenemos un avance en la investigación del accidente.

Con lo dicho, el actor sonrió satisfecho de la pronta acción de aquellos los cuales le citaron junto con Archie, al haber sido su novia la más afectada.

A las cuatro de la tarde de ese día, en las Oficinas del Departamento de Policía del Estado, Terry estrechaba manos con los hermanos Cornwall en la espera del Oficial Donald.

Éste no tardó en aparecer.

— Buen día, caballeros.

Los considerados respondieron al saludo.

Consiguientemente...

— Me gustaría me acompañaran a la oficina del comisionado —, se les indicó el camino.

Los tres hombres lo siguieron hasta que llegaron a una pequeña sala de reuniones donde cada uno ocupó una silla, quedando a la cabeza de la mesa el oficial quien conforme les extendía un sobre con fotografías, decía:

— Aquí está el reporte de Control del tráfico en el momento cuando... — carraspeó, — el auto que golpeara a la señorita Brighton se pasaba el alto.

El uniformado había sonado un tanto avergonzado a lo que rápidamente Archie preguntaba:

— ¿Entonces ya tienen al culpable?

— Sí y no — hubo sido la respuesta, la cual causó desconcierto en tres seres, siendo Stear el primero quien cuestionara ahora:

— ¿Cómo es eso?

— Enseguida les explico.

El oficial sacó las imágenes y las extendió a lo largo de la mesa, logrando con su acción que los tres amigos abandonaran sus asientos para ir adonde el agente les señalaba para que observaran la primera fotografía y siguieran la secuencia mientras les informaba:

— Como pueden ver, a las señoritas las estuvieron siguiendo por un buen tramo donde en cada una de las tomas aparece el mismo vehículo deteniéndose en cada parada que ellas hacían. Al principio, pensamos que se trataba de un reportero persiguiendo la señorita Stevenson.

Se miró a Terry el cual asintió ante tal posibilidad.

— Pero en esta otra —, a él precisamente se le extendió la toma; — cuando su prometida va cruzando y se detiene viendo hacia arriba... que me imagino trataba de distinguir...

— La punta del Empire — aseguró Terry.

— Aquí lo descartamos, ya que, la luz estaba en rojo, el vehículo en el primer carril apenas doblando a la derecha, pero que se vio obligado a detenerse por el grupo de transeúntes que ya cruzaban; sin embargo, cuando la ve llegar a la esquina y empieza a cruzar la avenida, el chofer gira el volante, pisa el acelerador para seguir derecho con la clara intención de arrollarla —, se volvió a mirar a los tres que por más estaban enojados y se les siguió diciendo:

— Al buscar en la base de datos el número de placas, dimos con el dueño de la unidad. Esa es la persona que está detenida; aunque insiste que un hombre, no mayor de 35 años, cabellos muy cortos ondulados y casi rojizos, le solicitó trabajo y lo empleó por cuestión de semanas, y exactamente el día del accidente, renunció devolviendo la unidad y pagando el golpe en el auto. También nos reveló su nombre, pero desafortunadamente es falso.

Mi Querida CampeonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora