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Soobin miraba por la ventana, esperando alguna señal de su hermano mayor.

Los demás seguían haciendo su día, a la espera de que ellos volvieron, no podía negar que estaban asustados y preocupados por la gran demora. La noche ya había caído y el riesgo que corrían los cinco muchachos era mayor.

Suran ya no soportaba la incertidumbre. Necesitaba que su hermano volviera, ella no era capaz de volverse a separar de la única persona que le quedaba. Lo mismo con Jimin, su menta daba vueltas y vueltas en Jungkook, esperando que estuviera bien.

Seokjin y Ji-eun igual estaban al pendiente de la llegada de sus compañeros, preferían mil veces que volvieran a salvo que arriesgarse por un par de cosas que podrían conseguir más adelante.

El único que estaba aislado y alejado de todo era Taehyung, él tenía sus propias preocupaciones o eso creían, sobre todo Yeri que ha estado encargada de Yeonjun todo el día, no porque se lo pidieran si no porque se dio cuenta de lo perdido que andaba Taehyung. Estaba en sus propios pensamientos, le hablaban y no respondió o no prestaba atención.

La muchacha vio que Yeonjun estaba más inquieto de lo normal, si su padre lo estaba él igual. Kim apenas tomó al niño, a estado en el cuarto casi la mayor parte del día y apenas salió para ir al baño y comer algo. Le preocupaba por supuesto, ella había generado cariño hacia Taehyung y Yeonjun, con todos en realidad, pero ahora su atención se fijaba en Kim.

La chica se acercó a su madre que estaba intentando arreglar la calefacción del piso, ya que Jackson y Hoseok no lograron y esperaba que ella sí.

-Mamá -llamó ella.

-¿Mmmh?

Su madre estaba bastante concentrada en el arreglo del aparato. Junto a ella estaba Park, quien le sostiene la linterna para iluminar.

-Yeonjun está inquieto y Taehyung oppa me preocupa... ha estado disperso hoy -explicó con voz débil.

La mujer dejó de lado la calefacción.

-Bueno... quizás está cansando o está preocupado por Kook y Nam -dijo la mujer. -Y este bebé necesita de su papá.

Eunwoo tomó a Yeonjun con cariño y comenzó a mecerlo para que estuviera más tranquilo.

-Si quieres y si eso te deja tranquila, hablaré con él -ofreció Jimin amablemente.

Yeri asintió con un sonrisa en sus labios.

-Bien, iré a ver que ocurre con Tae.

Jimin dejó de lado su labor dejando a madre e hija solas junto al bebé.

Durante todo este tiempo, desde el campamento hasta el hospital, Kim y Park comenzaron a generar una sana y buena amistad llena de confianza, lo cual era importante. Ambos chicos aveces se sentían solos sin tener con quien hablar de algunas cosas que les molestara o si querían compartir algo importante. Uno se preocupa del otro y viceversa, así es como ahora Jimin estaba extrañado de la actitud de Taehyung.

Pensó que quizás tenía que ver con Yoongi, si bien Taehyung le dijo que comenzaron a hablar con normalidad había una "astilla" -por decirlo de alguna manera- en la relación. Era rara incluso incómodo cuando ambos quedaban conversando, no surgía algún tema del cual hablar, claro que Min jamás dejó de lado a Yeonjun, cada día, incluso los cuales ellos estaban enojados, Yoongi jugueteaba con el bebé.

Eran inseparables.

Yeonjun, siendo un bebé de unos dos meses ya, reconocía el calor que Min le transmitía y la voz grave del pálido. Apenas lo oía o se sentía en sus brazos sus risas eran incontrolables. Taehyung y Jimin, al igual que el resto se daba cuenta de esto, pero Kim no podía evitar sentirse triste y feliz a la vez.

Outlast ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora