Outlast ¹

06

La cegadora luz del sol atravesó las blancas cortinas del cuarto. Cuando pudo abrir bien sus ojos se percató de que a su lado no había nadie, lo que quería decir que Taehyung no estaba, se preocupó al no ver al castaño a su lado durmiendo, así que sentó en la cama para buscarlo con la mirada. Un alivio se instaló en su pecho al ver que Kim estaba a los pies de la cama colocándose una sudadera que le quedaba bastante grande, dándole un toque adorable.

—Buenos días chico promesa —dijo Taehyung regalándole una sonrisa.

—Buenos días hyung, ¿Cómo amaneciste?

—De maravilla, jamás había dormido tan bien —respondió Taehyung tratando de no mencionar el detalle de la pesadilla que había tenido.

—¿Y cómo ibas a dormir mal? Sentí tu pierna en mis costillas casi toda la noche, y una que otra patada —se quejó Jungkook poniéndose de pie.

—Lo siento, me cuesta encontrar una posición cómoda teniendo esta panza que me cargo —Kim levantó del suelo la mochila negra de Jungkook para entregársela—. Cámbiate, ten.

Jungkook solo recibió su mochila y vio como Taehyung salía del cuarto para dirigirse posiblemente a la sala de estar. Jeon entró al baño colocando el pestillo de la puerta. De su mochila sacó un pantalón negro rasgado, y una camiseta blanca, simple y sencillo.

Primero se dio una ducha, la necesitaba para poder despertar mejor, esperaba que la ducha le ayudase a reaccionar un poco más. Luego se vistió para así poder cepillarse los dientes.

—Buenos días —saludó a Namjoon y a Soobin quienes se veían preocupados.

—¿Sucede algo malo? —preguntó el azabache observado los rostros de ambos.

—Aún no hay señal, y lo peor es que al aparecer hubo un apagón, no hay luz —respondió el moreno.

—Además no han dejado de pasar policías, bomberos y ambulancias. También han pasado como tres helicópteros militares por la zona, creo que la situación no mejora para nada —agregó Taehyung, quien miraba por la ventana.

—Debemos pensar en algo para poder irnos. Es muy peligroso salir si la situación está empeorando por minutos.

—Los puedo ir a dejar al terminal, nos queda cerca. Además, tenemos un auto —ofreció el mayor.

—No claro que no. No queremos ponerte en peligro, aparte ya has hecho mucho por nosotros hyung, ya pensaremos en algo —Taehyung se negaba rotundamente a poner en peligro a la persona que los había ayudado tanto.

—Vamos... ¿Qué puede salir mal? —Namjoon ignoró a Taehyung y fue a buscar las llaves de su auto que yacían colgadas.

—¡Absolutamente todo! —Jeon estaba exasperado por la situación que se había hecho en un momento.

—Chico, eres muy pesimista, ¿lo sabes?

Salir sería un completa locura de su parte, era ponerse en peligro ante esas cosas, que no sabía bien si aun rondaban por las calles, además la situación parecía no haberse calmado, al contrario, empero más, ayer no había ni un solo helicóptero en el aire, y las sirenas no dejaban de sonar.

—Entonces, si tú vas, yo voy —Soobin se oyó firme

—No Soobin, tú te quedas aquí, será rápido.

—¿Por qué siempre me tratas como si fuese un bebé? —pregunto irritado el dongsaeng —Siempre me dejas atrás, ya deja de tratarme así...

Soobin no pudo acabar su frase, ya que justo en ese instante un auto había chocado contra el vidrio y pared de la sala de estar de la casa reventándolo por completo. A lo primero que atinaron fue a correr y cubrirse.