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El ambiente estaba pesado.

Jackson ya no sabía si sería capaz de seguir soportando tanta indiferencia. Estaba claro de que el grupo temía por los sujetos, según por lo que escuchó tuvieron ya problemas con un tipo y peor aun, los golpeo, amenazo hasta irrumpió en su refugio temporal haciendo que grupo, por miedo, dejará la casa, a la mano de esto, perdieron a Jehyunk, el padre de Yeri y esposo de Eunwoo.

El grupo de Daegu había perdido mucho. Un lugar seguro, provisiones y familia, algunos seguían con la duda como estaban sus padres y demás.

Wang aun recuerda aquella mañana que llamaron por ayuda urgente a Seúl. Junto a su fiel compañero y amigo Hoseok, fueron rápido hasta el punto del caos. El centro mismo de la ciudad. Había sido horrible; mujeres, hombres y niños corriendo por las calles, autos volcados y mucho que de convertían en errantes. El ruido de los cartuchos era quien dominaba esa mañana. Los llamadas de emergencia de familias crecían en número. Era algo no creer, que solo ocurrían en los filmes de cine y pura ficción.

Pasó por mucho junto a Jung, entre perder al capitán, compañeros y vehículos para volver. Todo estaba perdido.

Jackson siempre fue el típico lobo solitario que no tenía una manada. Solo sus padres, pero no vivían con él. Tampoco tuvo novia, jamás fue alguien de querer tener un compromiso con una chica. Esa soledad le gustaba, la disfrutaba. La mayor parte de fines de semana salía por unas copas con Hoseok y ese era todo su panorama, ahora estaba en una situación muy diferente, en donde estaba viviendo con gente nueva. Niños, mujeres, hombres hasta un bebé.

Jamás pensó que en un momento así conocería personas que buscaba lo mismo que él. La supervivencia. Algo que todos tenían en común.

A lo largo de las últimas semanas se hizo amigos, como por ejemplo, Yoongi. Al principio se eran indiferentes hacia el otro, como olvidar cuando Min lo golpeó. Jackson ahora solo reía con eso. Los dos hombres aveces se quedaban conversando mirando por la ventana, hablando de todo lo que lucharon para llegar hasta el hospital.

Ahora estaba preocupado. Yoongi no aparecía desde que llegaron y Suran lucía molesta con Taehyung. No se atrevía a preguntar, eran problemas entre ellos, pero el pelinegro era su nuevo amigo, más de una vez compartieron cigarrillos y anécdotas.

El militar se levantó de la silla y fue hasta donde estaba la hermana de Yoongi. La chica le miró con mala cara. Estaba de brazos cruzados mientras veía al exterior.

—¿Por qué la cara larga? —preguntó Jackson.

—Nada. No quiero hablar con nadie. —Sentenció la chica.

—¿Y Yoongi?

—En el baño llenándose los pulmones de humo —respondió con resentimiento.

Wang la dejo sola. No iba a llegar a ni una parte, así que decidió por las de él mismo ir donde el chico y hablar de que había pasado con su hermana, era su amigo y compañero, claro que le preocupaba su estado de ánimo.

Fue caminado hasta el baño en donde creía que podría estar Yoongi fumando. Lo sabría por el aroma que saldría, lo reconocía a distancia.

Cuando sus fosas nasales detectaron el conocido aroma que desprendía el cigarro supo que Min estaba en el baño de hombres. Sin aviso entró.

Al entrar vio uno de los cubículos del baño entre abierto y las piernas de Yoongi. Fue hasta allí y la abrió.

Ahí estaba el pelinegro con un cigarrillo entre los dedos, sentado sobre la tapa se inodoro, inexpresivo.

—¿Hace cuanto qué estás aquí?

—No hace mucho. ¿Quieres el otro? —Le extendió el otro cigarro que le quedaba.

Outlast ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora