Epílogo

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EPÍLOGO. NO ENTENDÍ EL SACRIFICIO HASTA QUE LLEGÓ ÉL

En el trayecto de ida a Barcelona había pensado que los trenes eran lo más triste del mundo. El mejor lugar para dejar a tu mente divagar por los rincones más oscuros. Para reflexionar, sobre todo de lo malo. Por que sí, así son los trenes. No vas a pensar en algodón de azúcar, ni siquiera Valen lo haría. Piensas en temas más profundos.
    Cuando planeaba qué decirle a Pol, pensaba que a la vuelta estaría destrozada. Que me abrazaría las rodillas y dejaría a las lágrimas ensuciarme las mejillas. Creía que ver como las cosas corren y se quedan atrás me pondría muy triste. Todo a tu alrededor pasa de largo, sin que tú puedas detener el tiempo. Devastador, irrecuperable, a 300 kilómetros por hora.
    Y... en cierto modo, así era como me sentía. Estaba triste. Yo misma había apartado de mi vida lo más bonito que me había ocurrido. Alejé a la persona que elegí amar, y fui yo misma quien tomó la decisión. Pol me dio la vida, y lo dejé. Pero pensar que le había hecho un regalo muy necesario me reconfortaba.
    Confiaba en él, sabía que aprovecharía la oportunidad de vivir que yo le había dado, igual que yo exprimí al máximo y superé mi fobia todo lo posible estando con él.
    Fue tan increíble.
    Tomé la decisión correcta, el tiempo me haría verlo con certeza. Ahora no lo veía tan claro, aún tenía dudas. Pero... ¿cómo no iba a tenerlas? Emma ya me advirtió sobre ello. Me dijo que el día que Pol desapareciera de mi vida mataría por traerlo de vuelta. Y era cierto, en parte. Por el momento lo echaba de menos, querer a Pol es hacerlo con mucha fuerza, con toda tu alma y tu ser, y aún así no era verdad. Pol no había desaparecido de mi vida, siempre tendría su recuerdo. Emma se equivocaba, él nunca se esfumaría al completo. Yo estaba segura de que solo era necesario silbar para tenerlo a mi lado.
    Y por Emma haría lo mismo. Ella lo vería, le tocaba vivir momentos muy complicados. Lo situación de su madre sería el principio de su historia.
    Todos íbamos a vivir momentos que nos pondrían a prueba. Pol iba a luchar por él, por su futuro y por los demás, no dejaría ese prejuicio de superhéroe de lado ni de casualidad. Realmente creía que lograría sacar su vida por su cuenta. Seguiría sacrificándose por los demás, pero ya no sin olvidarse de él. Al fin y al cabo, era Pol Luna.
    Y yo, yo había descubierto mis límites con Pol, los había analizado con Vera, y me tocaba retarlos siendo simplemente Thesa.

...Y así es como la ola descubrió, que lo que creía como el todo, era en realidad una minúscula parte de lo que podía llegar a vivir, a ser.

***
Ya está, se ha acabado Simplemente Thesa.
Es muy probable que el final no sea lo que muchos esperabais, pero creo que es el que la historia merecía. Tal vez queráis dejar unas palabras o algún emoji en comentarios.
Ahora os voy a pedir que si os ha gustado la historia la compartáis con vuestros amigos y que no la eliminéis de la galería si queréis recibir noticias de SERIE SIMPLES 3. Próximamente... Simplemente ?

Simplemente ThesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora