Chapter 25

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Me siento en frente de un rubio amarrado a una silla, una cinta tapa su boca y una Victoria con una espada en mano le apunta.

El pobre está pálido.

Blake da vueltas en la cama mostrando su barriga.

-Vic.

-¿Dónde le apuñalo su alteza?-la punta de la espada se mueve al cuello del muchacho.

-¡Mmm!¡Mhnn!-grita desesperado.

-Jaja se ve divertido, ¿A qué si?-pregunto.

¿Quien pensaría que alguna vez tendría a alguien amarrado frente a mí?

Victoria apunta la espada en las partes del muchacho.

-¿Aquí?

¿Justo ahí?

A Lavier se le va el alma y se desmaya.

-Creo que lo asustamos-murmuro.

-¿Tu crees?-pregunta Victoria.

Nos miramos intentando saber quién fue el culpable, por lo menos yo no hice nada.

-Miauu...cof...ahg, bola de pelo.

Me siento al lado de Blake, el se vuelve a estirar bostezando hasta que me pregunta lo que tanto he pensado desde que acepté la realidad.

-Niño, ¿Que piensas hacer?

Volver no se puede, porque no tengo la menor idea de cómo abrí un portal a otro mundo.

¿Habrá sido ese collar espantoso? ¿Quién sabe?

Y comunicarse con alguien también es imposible, no importa cuanto intenté hacerlo, no agarraba señal.

Es como un celular estropeado.

En estos momentos, me siento como Rapunzel cuando pregunta el '¿Que voy a hacer?'

Simplemente que no estoy feliz de estar en este mundo sin Asmodeo.

-¿A qué ibas a venir?

¿Yo?

-A matar a alguien.

Si, esa es mi razón.

Matar a la escoria que asesinó a los abuelos, y a la persona que tramó todo.

Abro mi bolsa espacial encontrando los documentos que me dió Asmodeo.

Bosque de las penumbras.

Un lugar donde los dragones se esconden al final del bosque y dónde otros seres mágicos, como elfos, duendes o hombres lobos suelen aparecer.

Es el lugar donde la asesina de cabellos verdes vive.

Una dragona.

¿Por qué tenía que ser un maldito dragón?

-Tengo que ir al bosque de las penumbras.

El gato negro corrige su postura erizandose.

Victoria deja de lado el molestar al chico durmiente y se dirige hacia nosotros. Su mano acaricia a Blake intentando calmarlo.

-¿Que ocurre?-pregunta Victoria.

Blake me araña la pierna.

-¡Ay!

¡¿Por qué me rasguña a mí?! ¡Yo no he hecho nada malo!

-Imbécil, vuelve a pensar en ir y lo próximo que arañaré será tu rostro.

¿Que le pasa? ¿Por qué reacciona de esa forma?

-¿Hay algo malo en ese bosque?

El gato le responde a Victoria con una mirada fría.

-Ese lugar es para aislados. Cualquier forastero que entre, sin importar su raza será asesinado.

-Ah...pero no es tan malo.

Es como lo típico de una novela de fantasía, entras al lugar prohibido donde puedes resultar muerto.

-Y sus almas quedarán vagando por toda la eternidad, sin oportunidad de ir al cielo o al infierno.

Oh...

Eso sí es malo.

¿A quien le gustaría compartir con otros fantasmas? ¿Y toda la eternidad? Que estupidez. Si algún fantasma se lleva mal con el otro y el que tenga que verse todos los días...no, no me agrada la idea.

-Yo nací en ese lugar, pero al juntarme con la primera bruja, me llamaron traidor y mi raza me utilizo como sujeto de experimentación por varios años.

¿Que?

-Niño, no vayas, olvida esa idea ridícula. Si no muere esa persona morirás tú.

-Me niego.

La abueli y el abuelo...eran como mi familia.

-Y Blake, dijiste que la primera bruja te salvó, ¿Sabes algo más de ella?

Esa mujer...tengo que matarla.

Los ojos rasgados del gato se enfrían.

Sonrió en mi interior, me alegra que no sea el único que la odie.

-La primera bruja nació como una humana que obtuvo un poder inmenso a través del transcurso de su vida, ¿Cómo lo hizo? Ni idea. Cuando se volvió fuerte, se adentro en el bosque y me salvó.

-Eso quiere decir...¿Que la conociste desde antes?-pregunta Victoria.

-Si, la conocí cuando era una niña inocente, sin ningún rastro de maldad-el se queda en silencio un momento hasta continuar-pero lo que hizo en sus años de adultez...sirvió para darme cuenta, cuan malvada era.

El niño rubio abre sus ojos de a poco, le dejó que escuche, puedo borrarle la memoria después.

Blake mira un momento al rubio, yo le guiño el ojo. El entiende y continua con su conversación.

Amelie fue quién ocasionó la muerte de los abuelos, toda información de ella me sirve.

-Era una tirana, finjia ser una Santa, pero en realidad le gustaba ver a las personas sufrir y morir. Un día enredó a un hombre en sus encantos, pero al parecer no le gustó la idea de quedar embarazada.

El gato negro baja sus orejas.

-No deje que matará a esa criatura, en vez de veneno, le daba poder mágico y curativo.

Wow...

Blake es mejor de lo que pensaba.

-El padre suplicó por ese bebé, y al final, ella lo tuvo, solamente para intercambiar una piedra poderosa con ese hombre.

Esa piedra debe ser la que busca Asmodeo, ¿Pero como llegó a las manos de la iglesia?

-¿Si tuvo al bebé?-pregunta Victoria-¿No lo asesinó?

El gato negro niega con su cabeza.

-Por suerte no la mató, era una niña.

Ella suspira de alivio.

-¿Y el padre?-pregunto.

-Amélie le entregó a la niña, diciendo que no quería saber de su existencia, que para ella, era un obstáculo en su verdadero amor.

¿Su verdadero amor?

-El verdadero amor de Amélie... necesitaba esa piedra.

Mis manos aprietan la ropa de cama.

-Cuando Amélie recibió la piedra celestial de ese ángel...

¿Ángel? ¿El tipo al que enredó era un ángel?

-Se la dió al Demonio, y el la asesinó.

Un Demonio hace varios siglos.

Y un Asmodeo que conoce este lugar hace varios siglos también...

No importa dónde lo vea.

-Ese bastardo...

El plan de escape del hermano menorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora