Valentine
Nikolay, enojado por mi pobre escape me empuja fuertemente al suelo cuando llegamos a la habitación de mi cautiverio.
Su rostro rojo por la ira me recuerda a mis días en el orfanato, es la misma expresión de alguien enojado, y dispuesto a hacer cualquier cosa por quitar su enojo.
No es...una de mis miradas favoritas.
Al verlo levantar una lámpara me tapo instintivamente el rostro. Escucho a mi lado romperse el artefacto de vidrio.
Era bastante lujoso, si no lo hubiera roto lo habría robado una vez que salga de aquí.
Lo veo sacarse el saco y su corbata.
-Colmas mi paciencia Valentine.
-Dime algo nuevo-le echo leña al fuego.
Sus ojos rojizos brillan con intensidad, sus manos se dirigen hacia su cinturón.
¿Que es lo que...?
Unos recuerdos desagradables vienen a mi conciencia, es igual que aquella vez, pero, Nikolay no sería capaz de...
Retrocedo con temor hasta topar con la cama.
Su cinturón se desliza por sus manos, y con un aventón golpea una de mis piernas, hiriendo el costoso traje, la sangre tiñe la alfombra de un hermoso color rojo. Vuelve a golpearme, pero en la otra pierna, ya luego de estos dos golpes quema en el aire el cinturón.
A pesar que mis heridas arden, me siento aliviado en el fondo.
Creí que haría otra cosa.
Prefiero ser golpeado que violado.
Suspiro al reírme de mi mismo.
Necesito un psicólogo urgente.
-¿Cómo puedes usar magia?-entrecierro mis ojos-o lo que usas...¿Es algo más maligno?
Nikolay no es un mago, es un espadachín.
-Mi hermano menor suele ser inteligente, pero en estos momentos no parece ser así-observa mis heridas-viendo tu situación.
Me repito que el dolor es mental, y dejo de mostrar algún signo de dolor, sonrío al verlo nuevamente enojado.
-No grité-comento con burla-no me hiciste gritar.
Sus pasos se me acercan, me pongo en alerta al sentir su presencia, el huele a sangre, por lo que imagino que tuvo que haber hecho un contrato con algún demonio en el infierno.
Sus manos agarran mi ropa, y al acto siguiente estoy siendo arrastrado a la cama, con unos grilletes rodeando mis muñecas, la cadena conectada suena al moverla. Cuando mi mirada ve a Nikolay encima de mi cuerpo recuerdo las veces que me gustaba que Asmodeo hiciera esto.
Claro que en estos momentos no es lo mismo.
Ahora solo quiero matar a este protagonista estúpido.
-¿Si te hago más daño...te escucharé gritar?
-Este no es el protagonista que creé. ¿Cómo te volviste tan retorcido?
El frunce su ceño.
Mi pequeño Nikolay...
-Si, no soy tu hermano-llevo mi mano a su pecho tirando sus ropas hacia mí-¡Yo te creé hijo de puta!
Veo como el rostro de Nikolay cambia por varios colores.
-Valentine estaba destinado a morir aquel día del duelo, a manos tuyas. Su deber como personaje extra era hacerte sentir culpable por su muerte y que no vivieras feliz por el. Valentine, era tu trauma.
-Dices tonterías por la pastilla.
Me río en su cara soltando sus ropas.
-No tome tu maldita pastilla Nikolay.
El presiona mis muñecas en la almohada y se me acerca al oído preguntándome algo lógico.
'¿No eres mi hermano?'
-Es obvio que no soy tu hermano.
Sonríe, y algo me dice que acabo de cometer un error.
-Entonces no me voy a preocupar por lo demás.
Los labios de Nikolay besan a los míos, como si hubiera esperado mucho tiempo, intento soltarme de su fuerte agarre, las cadenas suenan por la habitación. Al soltar el beso le pido que me suelte, el, en cambio abre mi abrigo llegando a mi camisa, su mirada intensa deja que el poder maligno rompa los primeros botones.
-Me alegro que no seas mi hermano-ríe cerca de mi boca-ya estaba creando una nueva identidad para tí.
Mi estómago se calienta, y el dolor punzante vuelve con más fuerza. Un brillo oculto en mis ojos quiere hacerme perder la razón.
-No dejaré que sigas bastardo.
Suelto mi agarre de su mano llevándola a su pecho.
-Incluso si tengo que destruirme, no dejaré que des un paso más...
Dejo caer unas gotas de sangre de mi boca, Nikolay se sorprende, me dice que me detenga.
Lo golpeó con el poder que reside en la piedra, sujeto mi estómago retorciéndome del dolor, mis ojos apenas logran vislumbrar la sombra que entra por la ventana.
Nikolay le hace frente junto a su poder demoníaco, pero una espada atraviesa su pecho de la nada, me levanto a duras penas. Un calor en mi cuello me dice que Xion está cerca. Escucho los pasos de los caballeros corriendo hacía la habitación, mi mente se enfoca en la expresión desconcertada de Nikolay tocando su pecho, la espada yace en la mano del individuo desconocido.
-¿Quien...?-enfoco mis ojos, el cabello rubio familiar me hace actuar de inmediato.
Le quitó la espada a Xion protegiéndolo de cualquier malentendido. Nikolay choca con la pared en sus espaldas, diciendo el nombre de Valentine al arrastrarse por esta.
Mi mano tiembla al ver su cuerpo sin vida.
Los caballeros llegan rompiendo la puerta, y al ver a su Emperador muerto me apuntan.
Grito con la poca fuerza que me queda.
-¡¿Que creen que hacen?! ¡Apuntando sus armas a su nuevo soberano!
Veo como uno por uno baja su espada y me piden perdón, para luego jurarme lealtad. Escucho sus gritos 'Larga vida al Emperador' a lo lejos antes de caer en los brazos de Xion.
Antes de desmayarme, los ojos fríos de Xion cambian y me miran dulcemente.
-Larga vida a su majestad...
Zorro astuto.
ESTÁS LEYENDO
El plan de escape del hermano menor
FantasyOlvídalo loco. No me quedaré a ser asesinado o a intentar cambiar al protagonista masculino. Así que... Cómo dice el corazón en la maleta. ¡Y yo me voy! ¡Adiós, me fuí! ¡Y no me importa! Quedense con el cliché de porquería que creé. Prefiero irme...