Imposible, Asmodeo me confesó haber puesto los dispositivos mágicos, no pudo haber sido Nikolay. Se que al principio fingía ser el pero...
-¿Fuiste tu?-pregunto.
-Por supuesto, tenía que encerrar de alguna forma al hermano menor que usa magia para escapar.
Evito mirarlo, y me concentro en el platillo, me dan náuseas.
-Escuché de mis caballeros cercanos, que Asmodeo los quitó cuando te atrapó, les pregunto porque estabas débil y ellos contestaron por los dispositivos que puse, dió la orden de encontrarlos y destruirlos-agrega con frialdad-un demonio sintiendo preocupación por un ser humano, ¿No es gracioso de ver?
Golpeó el platillo dejándolo caer a sus pies.
-No comeré.
Se levanta de la cama y se me acerca.
-Eres un niño malo Valentine.
-No voy a comer.
Un golpe se siente en mi mejilla, me sorprendo al ver que Nikolay me ha golpeado.
-Supongo que tendré que educarte.
Toco la parte adolorida temblando, el sigue su camino diciéndome que si no deseo comer, que me muera de hambre.
Una empleada vuelve a limpiar en silencio, le pido ayuda, por lo menos para soltarme. Ella hace que no me escucha y se va.
-Buscaré ayuda-la voz de Ludwing recorre mi oídos-no mueras antes de que vuelva.
-¿Como podría? Tenemos una venganza que cumplir.
Me mira preocupado.
-No le respondas a Nikolay, la influencia del infierno lo convirtió así. Puede hacerte más daño si desea, ahora, eres débil.
Veo su silueta desaparecer, me preguntó a quien irá, no hay personas que lo vean, a menos que sea un gran mago como mi maestro, un ángel o un demonio. Los humanos normales no lo verán.
-Creo que estoy jodido.
¿Cómo saldré de este lugar?
Nikolay regresa más tarde en la noche, otra vez con un platillo en mano. ¿Soy un perro? Viene solo a darme alimento.
La comida repugnante vuelve a ser puesta en mis muslos, no quiero comerla porque se que tiene algo.
-No voy a comer.
-Come.
Sus ojos rojizos me miran con molestia.
-Si no lo haces, te lo daré a la fuerza.
Le tiró la comida encima repitiendo mis palabras.
El hace hace aparecer una pastilla en su mano, se abalanza hacia mí mientras yo cierro mi boca con fuerza. Un poder rojizo un poco espeluznante recorre mi cuerpo, me obliga a abrir mi boca, dejándolo poner aquella pastilla en mi lengua, el agua me es obligada a tomar o de otra forma, moriría ahogado.
Lo empujó tosiendo cuando ya he ingerido la pastilla.
-Tu...cof...
-Te veo mañana, hermano menor.
-¡Espera!-lo llamo, Nikolay de detiene esperando mi próximo comentario.
Agachó mi cabeza, y con un poco de vergüenza le pido el baño.
Nikolay se tapa su boca como si hubiese cometido un error, me libera diciéndome que el baño está en la habitación, que no me demoré.
-Quiero bañarme-le digo.
ESTÁS LEYENDO
El plan de escape del hermano menor
FantasyOlvídalo loco. No me quedaré a ser asesinado o a intentar cambiar al protagonista masculino. Así que... Cómo dice el corazón en la maleta. ¡Y yo me voy! ¡Adiós, me fuí! ¡Y no me importa! Quedense con el cliché de porquería que creé. Prefiero irme...