Llévenme al mar mientras duermo plácidamente, que las olas me arrullen con su dulce vaivén.
Rumbo a una isla donde frutas se ofrecen, una hamaca y una vida nueva me prometen.Que la locura se apodere de mi ser, en un frenesí de sueños por conocer.
En esa tierra virgen, desconocida y fresca, donde el sol y el viento juegan sin malicia.Seré cautivado por los colores del amanecer, mientras el agua salada acaricia mi piel.
Bañado en la brisa marina, me perderé, en el abrazo cálido de un paisaje lucubrado por mi ser.