Hasta qué edad resistirá esta mente, me encuentro cara a cara con mi debilidad. Pierdo la movilidad, la agilidad y me paralizo.
Eres tú aquello que no logro derrotar.
Hago una retrospectiva, en qué momento sentencié mi acción, en qué momento decidí escribir, en qué momento llegué al punto de tener la necesidad de expresar tanta mierda.
Estoy comenzando a disgustarme, un reflejo de desprecio, extremidades sin fuerza, una mente confusa.