El arte de Ser

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La alarma sonó a las 5:00 a.m, el menor se levantó con muchísima energía, sin hacar mucho ruido entró a su habitación, busco el Rihal para poder orar y comenzar su día, Sergio se encontraba aún dormido, desparramado por toda la cama, Mesut lo cubrió con una manta para abrigarlo y continuó con lo suyo, oró, cepillo sus dientes, se baño, busco su ropa e hizo el desayuno, en todo este tiempo, el español segia tumbado, trato de dejarlo descansar todo lo que pudo pero ya dada las 6:20, no tuvo otra opción, se dirijo a su habitación, camino hacia su compañero y se sentó junto a él, estaba envuelto en la manta, en posición fetal, se veía tranquilo, quería dejarlo asi, pero tenían un camino muy largo hasta el estadio y odia la impuntualidad, debían estar en el  Santiago Bernabéu a las 7:45.

- Ser, deber ir al trabajo, vamos- lo movió un poco pero el defensa ni se inmutó, con ternura se recostó junto a él, lo admiró por unos segundos, ese pelo dorado, ahora desordenado sobre su rostro, esas pestañas largas, sus labios rosados y un poco entreabiertos, acarició su rostro apartando los caballos y con delicadeza de dio un beso tímido, acunando su rostro entre sus manos, el español se removió en su lugar.

- Tengo hambre i'llo- balbuceo, el turco comenzó a reír, ni siquiera esta del todo despierto y ya tenía hambre- lo siento, me he puesto nervioso, buen día- Ramos también rio, lo tomó por la cintura y le plantó un beso en la mejilla, se sentía un adolescente con mariposas en el estómago.

Mientras Ramos se duchaba, limpiaba sus dientes y su rostro, aplicandose una variedad de cremas y cepillarba su pelo, el turco preparó la mesa para desayunar, cuidando cada detalle, también se tomó el tiempo de preparale una vianda al mayor, las albóndigas que sobraron del día anterior y una ensalada sencilla, también busco algo para ver juntos, cambió de canales un par de veces, no había nada entretenido, todo era chismes de la farándula o política, cosas que no entendía, finalmente encontró un documental sobre osos pandas, ambos comieron gustosos las tostadas con frutas que el menor había preparado, luego de limpiar sus cubiertos y la mesa, se encaminaron al club en el coche del defensa.

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Sergio se acomodaba las botas, unas nuevas que combinaban mejor con la equitación, los murmullos del vestuario pasaron a ser un sonido muerto, tenía muchas cosas en la cabeza, su día comenzó genial junto a su niño, durante el camino al club, hablaron de cuanto dinero gastaba el menor en ir y venir al estadio, Mesut no tiene coche así que debe ir en taxi, un taxi por Madrid es demasiado caro, Ramos quiere convencer al turco de mudarse a un lugar más apropiado, en una mejor zona y menos alejada del campo, pero todo su buen humor cambio al llegar, el míster lo ignoraba, no le gusta que la gente le haga eso pero no es como que moriría si José no le habla, hasta lo prefiere, por lo menos unos días, no quiere tener otro enfrentamiento, pero si bien los desplantes del Portugués no le perjudica el dia, si lo hace la forma en la que menosprecia a Özil, con esa actitud soberbia que tanto le asquea, durante el repaso de las tácticas, si Mesut tenía una buena intervención o hacia alguna observación inteligente sobre las alineaciones, el Míster lo felicitaba en un comienzo pero remataba su cumplido con algo cruel, algo como "Muy bien Mesut, lastima que tu no jugarás" o "quizás podrás ponerlo en práctica la siguiente fecha", pero Özil no parecía cabizbajo o molesto por estos comentarios, todo lo contrario, sonreía por los halagos y no se paraba a pensar en el discurso de doble vara, Iker lo tomaba por la nuca cada que Mou hacia comentarios pasivo-agresivo, como recordandole a Sergio que esto es por su culpa y que no debía reaccionar por que sería peor, para el turco no suponía un problema pero Ramos se moría por dentro, más cuando veía la sonrisa triunfante del director técnico, parecía contento de haber encontrado algo, más bien, alguien, que pueda amansar el carácter frontal y agresivo del defensa, Sergio es un hombre muy orgulloso y protector con los suyos, no puede tolerar ese sentimiento de impotencia que lo invade cada vez que Mourinho lo ve a los ojos.

- ¿Nueva novia? - le pregunto Pedro Leon al verlo obsorto en sus pensamientos.

- ¿Que dices quillo?- sonrió por la pregunta del más pequeño.

- Bueno, últimamente estas más pensativo de lo normal, siempre en el aire tú, ¿hace cuanto no vas a una fiesta?, me sorprende que no hables de alguna mujer diferente por dia, ni te reconozco, capaz te conseguiste una novia- le dio unos golpecitos con el codo, sacandole una risa al defensa.

- Claro que no chaval, no tengo a ninguna mujer "especial", sigo libre como viento, es más, ¿por que no me presentas a tu madre o a alguna conocida?- bromeó.

- Prefiero morir antes que decirte papá- le siguió el juego.

- No, no, tú dime papi- los dos carcajearon por la ridiculez del otro, ajenos al resto de sus compañeros, Pedro es un chico amable y un buen amigo, no le gusta cuando José lo regaña, se mete mucho con él, lo trata mal y le hace la vida imposible, al llegar al Madrid, Pedro era un chico risueño y con carácter pero a medida que Mourinho lo fue tomando como punto, maltratando y humillado su figura, esta alegría que antes lo caracterizaba fue desapareciendo, se volvió callado y tímido, toda la confianza que tenía en sí mismo se quebró, sin embargo nunca dejó de jugar como el primer dia en el que debuto con la blanca, excelente como los tenía acostumbrados, de alguna manera, le da miedo que Mesut o él pasen por algo así- Eres grande hermano, que nadie te diga lo contrario, cuento contigo en el campo, eh- le puso una mano sobre el hombro y lo apretó un poco.

- Vale, tío- Pedro leon sonrió amistoso, tuvo el impulso de decirle eso, alentar a su amigo y hacerle saber que, pese a la disminución de sus minutos en esta temporada, seguía siendo un jugador de primera y que nada ni nadie podía decirle o hacerle sentir lo contrario, son una familia y deben acompañarse.