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Ramos se levantó como pudo de la cama y corriendo escaleras abajo, solo hay una persona en este mundo que puede tocarle el timbre a altas horas de la noche, ni siquiera alcanzo a colocarse los pantalones o una camiseta, simplemente abrió la puerta sin preguntar quien estaba del otro dado de la misma.

- Hola, ¿puedo entrar?- Sergio miro a Iker por unos segundos sin decir nada, el portero lo miro de arriba a abajo, el defensa solo llevaba unos calzoncillos- Lo siento, ¿te he despertado?- pregunto, se sentía incómodo, no por la desnudez de su amigo, no era la primera vez que lo veía así, es la falta de respuesta lo que lo inquietaba, lo angustia.

- Puedo cubrirme si te distraigo- dijo juguetón, recostandose sobre el marco de la puerta, posando, el portero puso los ojos en blanco, Sergio no pudo evitar bromear un poco, los nervios le jugaron una mala pasada, después de todo, el humor forma parte de su mecanismo de defensa.

- Hombre no, estas en tu casa, ¿puedo?- dijo pidiendo permiso para entras, Sergio dudo pero finalmente se hizo a un lado.

- Si pero Mesut esta en mi habitación, no hagas mucho ruido, dudo que nos escuche pero bueno- cerro la puerta detrás de su compañero.

- ¿Interrumpo algo?- levantó una ceja en señal de doble sentido, después de todo el defensa estaba casi sin ropa, Sergio sonrió negando con la cabeza.

- Hombre no, que va, solo estábamos viendo la televisión, tu sabes, gavilanes, es que la venganza de los hermanos reyes está mu' interesante- sonrió por la cara de asombro y desagrado de Iker.

- Solo a tí te gustan esas novelas para abuelas divorciadas, ¿como lo has convencido para verlas contigo?- pregunto mientras daba paso a Sergio para que esté lo guió al interior de la vivienda.

- Le he dicho que es para mejorar su español- sonrió, por unos segundos parecía que nada malo había pasado entre ellos, solo una charla de colegas, extrañaba jugar con Iker, estos días habían sido duros sin él.

- Joder, aún recuerdo las primeras semanas, solo podía preguntar dónde estaba la panadería- ambos rieron- Pero veas lo que veas junto a él le ha ayudado, mejoro mucho- el turco hasta había aprendido algunos modismos de España.

- Ya, estoy orgulloso de él- sonrió mientras llevaba una mano a su pecho, casillas sabía que era verdad.

- Pareceis una pareja de abuelitos- bromeó, puso ambas manos en los hombros de su amigo, casillas también extrañaba jugar junto a él.

- No sé si abuelos pero pareja si somos, finalmente, se lo he propuesto- sonrió y casillas juraría que tenía un leve sonrojo.

- Felicidades tío, que buena noticia- lo sacudió un poco mientras llegaban a la cocina del Español- ¿Por eso estás así? ¿Te lo has follado?- pregunto sin rodeos y el rubio carcajeo por lo directo que había sido, no estaba desnudo por eso, simplemente tenía calor y es más cómodo dormir así pero el portero no parecía pensar en eso como una opción.

- No, no, aún no, no de forma apropiada por lo menos, solo caricias- Iker tomo asiento es una de las sillas de la mesa del defensa mientras Ramos se colocaba del otro lado de la barra para poder estar de frente- Tengo miedo de lastimarlo, aún no se bien como se hace eso con otro hombre- hizo una mueca, no quiere asustar a Mesut o peor aún, lastimarlo- Tú podrías darme una mano con eso, parece que tienes la práctica fresca, ¿No?, ¿Vienes de follar con Xavi, verdad?- ambos se miraron y por un segundo todo quedó en silencio, para Ramos, desde el primer momento en que vio al portero en su puerta, desordenado, con el pelo revuelto y las obvias marcas sobre su cuello, supo que este había estado con el blaugrana, además de la hora de llegada, Iker hacía eso cada que estaba con él menor, llegaba a altas horas de la noche y se quedaba en su hogar, no quería volver y lidiar con sus problemas así que optaba por evadir todo sentimiento de culpa junto al defensa, Ramos siempre lo acogía en su hogar, después de todo son amigos.

El arte de SerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora