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De los nervios, Jaekyung no logró dormir bien... No es sorpresa para los que leemos el manhwa... Pero llegó 20 minutos antes a la estación del tren que lo llevaría a Gureumhae... Era solo un viaje de ida y vuelta, así que no llevaba equipaje, si acaso una mochila con agua, un cargador, y algo de dinero en efectivo en caso de que en algún lado no pasase su tarjeta...

El ojigris tomó lugar en su asiento en el tren, mirando por la ventana mientras el paisaje urbano se transformaba gradualmente en campos abiertos y colinas verdes. El ruido constante de la ciudad se desvanece, reemplazado por la tranquilidad del campo.

Es un cambio que siempre le resulta extraño y, al mismo tiempo, fascinante. Nunca había pasado mucho tiempo fuera de la ciudad, y ver esos paisajes vastos y abiertos le da una sensación de libertad y calma que no había experimentado antes.

A medida que el tren avanzaba en las dos horas que duraba el trayecto, Jaekyung se pierde en sus pensamientos.

En el tiempo en el que salió primero del hospital, siempre imaginó que Dan estuviera bien, contrastando con la vida de mierda que ahora llevaba después de que sus caminos se separaran. Pero la última vez que lo vio en la estación, la expresión en el rostro de Dan le había indicado lo contrario. Esa imagen de Dan, abatido y perdido, sigue persiguiéndolo.

Los campos se llenaban de las flores silvestres más hermosas y placenteras visualmente y pequeños pueblos comienzan a aparecer en el horizonte. Jaekyung no podía evitar pensar en cómo Dan podría reaccionar al verlo. ¿Sería miedo, sorpresa, odio o indiferencia? La incertidumbre lo inquietaba, pero sabe que tiene que intentarlo.

— No tengo idea de cómo va a reaccionar... Pero necesito verlo... hablar con él... Convencerlo de que vuelva al gimnasio, a su casa, a la mía quizá... Que vuelva a ser mi fisioterapeuta... Y quizás, solo quizás, llegar a conocerlo mejor — dijo Jaekyung en voz baja.

El tren cruzó un río, reflejando el cielo azul y las nubes blancas en sus aguas tranquilas. Jaekyung siente que este viaje no es solo un desplazamiento físico, sino también un viaje emocional hacia la claridad, esa imagen de las nubes le era la representación visual de la niebla de duda que siente respecto a lo que siente por Dan.

— Tengo que entender qué carajos siento por él. No puedo seguir así, con esta confusión. Quizás todo tenga más sentido después...

Las montañas empiezan a aparecer en la distancia, y el tren se adentró en un paisaje más montañoso y verde... Jaekyung se dio cuenta de que está cerca de su destino... Su perseverancia crece a medida que el tren se acerca a Gureumhae... Sabe que este viaje es crucial, no solo para Dan, sino también para él mismo.

— Esta vez, no puedo fallar... Debo ayudarnos, y ayudarme a encontrar mis propias respuestas.

El tren comenzó a reducir la velocidad a la que iba, indicando que estaba llegando a la estación de Gureumhae. Jaekyung respiró hondo, preparándose para lo que venga. Está listo para enfrentar sus miedos y dudas, y espera que este viaje le brinde las respuestas que tanto busca.

El tren se detuvo, y tan pronto las puertas abrieron, el azabache bajó del tren y comienzó a caminar por las calles de Gureumhae, el pueblo  parecía sacado de un cuento (o de un manhwa).

[N/A: Gureumhae es una mezcla del pueblo de donde es Jooha (Pearl Boy) y el de Cuando el sol se asoma]

Las casas de tejados rojos y jardines bien cuidados le daban un aire acogedor y pintoresco. Los árboles eran frondosos y ofrecían sombra a los caminos empedrados, y el sonido lejano de los pájaros creaba una banda sonora natural que acompañaba su paseo.

Cada rincón del pueblo parece tener una historia, y Jaekyung no podía evitar admirar la belleza sencilla y tranquila del lugar. Habían niños corriendo y juganfo en las calles, mientras los ancianos se sientan en los porches, charlando y disfrutando de la brisa fresca de la mañana. Es un contraste completo con el bullicio constante de la ciudad. Jaekyung siempre soñó con ser capaz de hacer esto cuando era niño, pero sus padres nunca le dejaron tener esa oportunidad.

Es tan diferente aquí. Tan tranquilo. Puedo entender por qué alguien querría vivir en un lugar como este...

Continuó caminando y sigue un sendero que lo lleva hacia un puente que se alzaba sobre un río. El sonido del agua corriendo debajo le atrae, y se detiene un momento para escuchar el relajante fluir del río. El paisaje es sereno y pacífico, con árboles altos inclinándose sobre el agua y el sol reflejándose en las ondulaciones del río.

Jaekyung se apoyó en la barandilla del puente, respirando hondo y dejando que la calma del lugar lo envuelva. Hay algo en el fluir del agua que le bada una extraña sensación de paz, algo que rara vez experimenta en su vida agitada y competitiva.

— Tan pacífico...

Lo que Jaekyung no sabía es que este mismo puente fue el lugar donde Dan, desesperado y abatido, intentó saltar.

Después de unos minutos, Jaekyung se aleja del puente, decidido a encontrar a Dan. Mientras caminaba de regreso hacia el centro del pueblo, se sentía un poco más tranquilo, un poco más preparado para la conversación que sabe que debe tener.

La belleza y la calma del lugar han infundido en el algo extraño, y ahora estaba listo para enfrentar cualquier cosa con tal de ayudar a Dan y desentrañar sus propios sentimientos.

[FANFIC/AU] Prometo Hacer Las Cosas Bien: ACTO I (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora