[FANFIC/AU] Prometo Hacer Las Cosas Bien: ACTO I (Jinx)

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[Aún no pongan la canción, yo les digo en qué parte]

Los dos Kim, Matthew y Dan caminaban por los pasillos de un centro comercial, el bullicio de la gente a su alrededor iba creando un ambiente animado.

Entraron en una tienda de electrónicos, rodeados de estantes llenos de los últimos dispositivos tecnológicos.

_ Gracias a Dios este centro comercial está cerca de la casa... Y ahora Daniel, cuéntame, ¿alguna referencia para poder escoger tu teléfono ideal? - preguntó Matthew, echando un vistazo a la amplia selección de teléfonos inteligentes expuestos.

- Algo sencillo y económico - respondió Dan, sus ojos recorriendo los precios - No necesito nada sofisticado... Que sea útil y cumpla con lo básico.

Matthew sonrió, negando con la cabeza.

- No no no no no no, Kim Dan, lo que tú ecesitas... es un teléfono que te sirva para todo, no solo para llamar y mandar mensajes - dijo Matthew - Piensa en la cámara, la capacidad de almacenamiento, la recepción de llamadas ¿Qué pasa si necesitas tomar fotos de tus pacientes o almacenar datos importantes? O si alguna vez necesitas contactar a tus amigos de Seúl.

Dan suspiró, levantando un teléfono básico.

-Pero mira este, es funcional y tiene un precio no tan excesivo... Compara su precio con el de un iPhone.

Matthew tomó el teléfono de las manos de Dan y lo devolvió al estante.

- Comprendo esa parte, soy Team Android, pero vamos a buscar algo que realmente te sirva - dijo Matthew, tomando de la muñeca, prácticamente jalando al fisioterapeuta para que viera otros teléfonos que parecen tener el equilibrio perfecto entre calidad y precio - Mira este, tiene una excelente cámara y suficiente espacio para aplicaciones y datos.

Dan miró el precio y frunció el ceño.

- Es demasiado caro, Matthew. No planeo gastar tanto en un teléfono.

- Lo sé, parece caro, pero es una inversión... Ay, soné como en Shark Tank - dijo Matthew, haciendo reír a Dan -Mira... piensa en lo útil que será tener una buena cámara para tu trabajo, puedes documentar el progreso de tus pacientes, tomar fotos para informes... Y con una buena recepción de llamadas, nunca perderás una llamada importante del centro o de algún paciente... Y también a tus conocidos de Corea.

Dan seguía dudando, pero la lógica de Matthew tenía sentido.

- Supongo que tienes razón Matt... Pero no estoy seguro.

Matthew sonrió, decidido a convencer a su amigo.

- Daniel Kim, estás hablando con un gurú de teléfonos celulares, confía en mí... Este teléfono te hará la vida mucho más fácil. Además, podemos encontrar una buena oferta para una tarjeta SIM también.

- Está bien, compraré ese teléfono... Espero que tengas razón

Matthew rió y dio una palmada en la espalda de Dan.

-Confía en mí, Danny, no te arrepentirás.

Después de un rato, salieron de la tienda con el nuevo teléfono en mano, junto con una tarjeta SIM que incluía un buen plan de datos. Mientras caminaban por el centro comercial, Dan no podía evitar sentirse agradecido por la ayuda de Matthew. Sabía que este nuevo teléfono sería una herramienta valiosa tanto en su vida personal como profesional.

Ahora en la planta baja, ambos dobles parciales caminaban llegando al corazón del centro comercial, que estaba adornado con una hermosa fuente con una estatua de un ángel vertiendo una jarra larga.

- Oh Dios, hay promoción de helados, ¿quieres uno?

- No Matt, está bien, no soy fanático de las cosas dulces.

- Ay, vamos, tampoco los hay tan dulces, los hay de fresa, mango, limón, kiwi, cereza, pepino con menta, tamarindo, cítricos... Ah, ¿guayaba rosa? ese es nuevo.

- Yo me espero aquí... Ehmm... ¿Puede ser mango?

- Perfecto entonces, procuraré no tardar mucho, si me tardo es porque algún galán anda cerca.

- Ya... Rápido que se ganan lugar en la fila.

Matthew corrió hacia la fila en un instante ganándose a una horda de personas blancas que parecían Karens. Dan se fue a sentar en un banco cerca de la fuente, ahora mirando la bolsa, mirando la caja del celular, todo esto era nuevo...

Y lo que realmente convenció a Dan de elegir ese fue lo que dijo Matthew respecto a llamadas... En caso de que quisiera contactar a sus amigos en el gimnasio Team Black, o a Jongho, o a Joohyeon, y a los mayores del hospicio en Gureumhae... Necesitaba un teléfono y un plan de datos para llamadas al extranjero.

[Ahora sí, pongan la canción jsjs]

El bullicio del lugar seguía, con familias, parejas y amigos pasando a su alrededor. Sus pensamientos vagaban cuando, de repente, algo captó su atención.

A lo lejos, entre la multitud, Dan creyó ver a Jaekyung caminando. Su corazón dio un vuelco y parpadeó, pensando que estaba alucinando.

- ¿Jaekyung?, no, no puede ser él, ¿verdad? - e dijo a sí mismo, pero la imagen de Jaekyung era inconfundible. Estaba seguro de que era él, aunque no podía estar completamente seguro.

Justo en ese momento, Matthew regresó con los helados, rompiendo el trance de Dan.

-Aquí tienes, uno de mango para ti y uno de queso y moras para mí - dijo Matthew, extendiendo el helado hacia Dan.

Dan aceptó el helado, todavía un poco distraído por lo que creía haber visto.

- Gracias - dijo, tratando de sacudirse la imagen de Jaekyung de su mente.

- ¿Estás bien? Pareces haber visto un fantasma - dijo Matthew, notando la expresión en el rostro de Dan.

- No, estoy bien - dijo Dan, quien negó con la cabeza, forzando una sonrisa - Solo pensé que vi a alguien conocido, pero seguro que fue mi imaginación... Ya estoy alucinando o algo

Matthew lo miró con curiosidad, pero decidió no presionar más.

- Bueno entonces... Vámonos a casa, las lluvias aquí son largas así que será mejor que nos apresuremos.

Mientras caminaban hacia la salida del centro comercial, Dan no pudo evitar echar un último vistazo hacia donde había visto a Jaekyung.

Pero la figura ya no estaba allí. Se encogió de hombros, tratando de convencerse de que solo había sido una coincidencia.

Los dos amigos continuaron su camino, disfrutando de sus helados y charlando sobre temas ligeros, dejando atrás las preocupaciones y las visiones inesperadas.

A medida que se alejaban, Dan no podía evitar sentir una ligera inquietud en el fondo de su mente, preguntándose si realmente había visto a Jaekyung o si simplemente su mente le estaba jugando una mala pasada.

- Supongo que no te he superado tanto como pensaba... - dijo Dan en un susurro.