Mi Héroe | Bakugou Katsuki

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Bakugo-

Cuando era pequeño solía decir que mi novia sería una princesa, la más linda de todas, Fuerte y genial pero no tan fuerte y genial como yo.

Cuando fui creciendo ese pensamiento fue cambiando y toda esa tontería del amor no me interesaba.

Las chicas me parecen escandalosas y fastidiosas.

Si llegaba a conocer a alguien solo me bastaba con que soportará mi personalidad y ya.

Ahora lo único que me importaba era convertirme en el héroe número 1 o eso creía

No andaba tan enfocado en enamorarme y toda esa estupidez

Pero de pronto un día ella apareció...

Superando todas esas expectativas que alguna vez pensé.

Ella...

- Realmente se ve como un ángel... No lo crees?- escuché preguntar a lo que asentí.

- Si...- respondí mientras la seguía viendo de lejos a lo que abrí los ojos sorprendido y voltee a mirar a mi lado.- Qué haces mirando?! Acaso no tienes nada que hacer?! Deja de holgazanear!- grite molesto cuando ví al pelos de mierda.

- Vamos bro, cálmate- dijo sonriendo mientras se apoyaba en mi hombro.- Te Vi mirando fijamente aquí así que me preguntaba que pasaba, pero ahora lo entiendo- dijo sonriendo mientras volvia a mirar por la ventana donde estaban ella y los demas idiotas.

- Ya terminó el descanso! Ensayaremos otra vez, Chicos de la banda reunanse- dijo la chica de los audífonos.

- Kirishima! Necesito que veas esto, se nos acaba de ocurrir una idea- Dijo el codos raros llamandolo.

- Bien, parece que debemos volver- dijo palmeando mi hombro para irse con los otros.

Mire una última vez más donde estaba ella

Verla sonreír es tan relajante

No importa que pase, si ella sonríe siento que todo estará bien.

Yo...

Quiero proteger esa sonrisa

Quiero convertirme en su héroe...

Moví los hombros un poco, escondi mis manos en mis bolsillos otra vez y voltee para ir con los demás.

Solía pensar que el amor solo sería un estorbo para convertirme en el número 1 pero ella se ha convertido en una de las mayores razones por las que quiero convertirme en el mejor de los héroes...

Tengo que esforzarme más...

Ruby-

Ya había llegado el fin de semana, afortunadamente Katsuki y Todoroki no tenían clases hoy así que todos estábamos trabajando con nuestros grupos.

- Ruby! Estás bien?- pregunto Ochako desde abajo.

- Si- dije asintiendo- creo que ya lo estoy controlando- dije mientras intentaba estabilizar mi vuelo usando el don de Ochako.

Estaba con los chicos de baile coordinando algunas cosas mientras prácticabamos, Había costado pero Momo había creado unas grandes alas blancas que ahora cargaba en mi espalda así que aún me estaba acostumbrado.

- Togata?- dijo Midoriya llamando la atención de todos.

El estaba entre los arbustos pero lo que más llamo nuestra atención fue ver quién lo estaba acompañando.

Ochako me bajo y desactivo su don y nos acercamos sorprendidos.

- Eri!...- dijo Midoriya saludando.

- Hola Deku...- respondió ella algo bajo.

- Tu vestido es muy bonito- dijo Tsuyu sonriendo.

- Ah! Que linda eres!- dije sonriendo emocionada viendola.

- Si!- dijo Ochako también emocionada.

- Midoriya, el director nos dió autorización- dijo el profesor Aizawa acercandose- para evitar que se asustara en el festival decidimos traerla para que se acostumbrara- mencionó a lo que volvimos a mirar a Eri.

- Hola, yo soy Ruby- dije agachandome a su altura.- Mira, nuestros cabellos son similares no crees que es genial?- pregunté sonriendo suavemente a lo que ella miraba sorprendida.

- Un ángel?...- murmuró algo bajo mientras me veía confundida.

Voltee a ver las alas que cargaba y sonreí algo divertida.

- Hola Eri, se que trabajaron mucho por ti. Me llamo Iida es un gusto.- saludo Iida acercandose sonriendo.

- Yo soy Mineta! Seguro serás una mujer linda!- dijo Presentándose a lo que Eri retrocedió un poco escondiéndose detrás de Togata.

- Ella es... un poco timida- dijo Togata sonriendo apenado mirando a Eri.- por eso la traje, pensaba darle un recorrido por toda la escuela hoy. Quieres venir Midoriya?- pregunto mirándolo.

- Ah! Si!- respondió pero Kirishima empezó a llamarnos pero apenas vio a Eri se acercó emocionado a saludar así que decidimos darnos un descanso.

A pesar de que no tenía don, Togata estaba muy alegre como de costumbre eso me aliviaba. No había tenido oportunidad de verlo hasta ahora así que me alegraba que estuviera llevando las cosas de una manera positiva.

Después de hablar un rato fueron a aprovechar el descanso para recorrer la escuela junto a Eri.

- Que tal? Creen que me veo bien?- pregunté mientras lucia las alas que cargaba con Kaminari y Kirishima que sonreían animados asintiendo.

Cuando voltee tambalee un poco al pisar y estuve a punto de caer si no fuera porque alguien me sostuvo.

- Um?- dije alzando la mirada extrañada- Katsuki!- sonreí cuando lo vi.

- Tks, porqué son tan grandes?!- grito Katsuki molesto volteando a ver a los chicos de baile.

- Ah bueno, sobre eso... Es mi culpa- dijo YaoMomo acercándose alzando la mano algo cabizabja- Calculé un poco mal y salieron más grande de lo que esperaba- dijo algo desanimada.

- Está bien, no pasa nada- negué sonriendo.- Ya me estoy acostumbrado así que está bien, tranquilo si?- dije sonriendo viendo a Katsuki.

Habíamos coordinado hacer el tamaño de las alas hasta debajo de la cintura sin embargo llegaban hasta mis rodillas, No quería desperdiciar lo que había creado Momo así que le había dicho que estaba bien.

El solo me vio y suspiro como si no pudiera decirme que no.

- Solo no te lastimes...- dijo apretando los dientes aún algo inconforme.

- Aunque puedo curarme- dije divertida alzando mi mano activando mi don formando una pequeña aura dorada en la palma de mi mano.

- No seas engreida enana- dijo desordenando mi cabello mientras yo reía un poco.

- Está bien- dije sonriendo.

- Que lindos!- escuché gritar de pronto a Mina.

Me había olvidado que estaban los demás también...

Rápidamente el resto comenzó a comentar mientras los chicos especialmente Kaminari y Sero comenzaban a molestar a Bakugo que perdió la paciencia y empezó a corretearlos amenazandolos con sus explosiones hasta que el descanso termino y tuvimos que volver a nuestras respectivas labores.