EL ARTE DE LAS MUSAS

CANTO XXVII| EL MÉDICO FORENSE DEL AMOR.

Compositor: Anghell Gravecraft.
Advertencia: la canción a continuación aquí escrita es totalmente de mi autoría; sólo es para leerla, queda estrictamente prohibido plagiarla para cantarla y grabarla. Gracias.

Aún extraño a aquella bella mujer, sin embargo para recuperarla no hay nada que pueda hacer, escriba lo que escriba no va a volver, como dije en otra canción, soy un poeta no tengo mucho que ofrecer, su amor me asesinó, como un cadáver en la sala de disección me voy a tender, como un médico forense las entrañas de la mente tengo que revolver y con las pinzas y guantes su recuerdo extraer.

Estoy consciente que con estas analogías médicas quizá el lector se pueda perder, pues hay muchas personas que dicen leer pero el mensaje intrínseco no les interesa entender, es algo que no puedo comprender, como escritor me siento ofender, su mente vacía no puede trascender, hay que estudiar e indagar, no basta sólo aprender, en mi quiero creer, pero hay días que subo otros que vuelvo a caer.

La vida es una montaña rusa, mi mente se encuentra confusa, desde que se fue perdí la inspiración de mi musa, siento que esa chica solamente me usa, si me besa es porque le gusto, entonces no sé por qué a estar conmigo se rehusa, después viene y con su boca me acusa, sus palabras electrocutan como tentáculos de medusa, querida en el fondo me amas, no seas ilusa.

Hay días que digo, se pudo, otros que dudo, prefiero no hablar, me gusta escribir y no soy mudo, finjo ser rudo pero soy un chico sentimental, corazón frágil como el de la protagonista de «La campana de cristal», soy un chico intelectual, mi escritura es un fractal.

Aprende la lección, amar es entregar el corazón, el amor no es solo sexo y diversión, te hace falta comprensión lectora, ¿cómo quieres ser amada si lastimas a cada chico del que de ti se enamora? El tiempo pasa y el amor se evapora, no creas que todos están enamorados de tu sonrisa encantadora, y no es una frase halagadora, es una frase que te asesora, que el corazón te perfora.

Y por consiguiente le implora a tu corazón para que con el bisturí de la poesía lo puedas abrir, mi escritura es el estetoscopio con el cual escucharé tu latir, de mí no tienes que huir, si quieres escapar solamente lo tienes que pedir, y tu vida normal te dejo seguir. Total, yo ya tengo mi paranormal vida la cual se basa en leer y escribir.

Con el bisturí poético dejé tu corazón desangrado, la operación poética resultó ser de alto grado y al final sólo yo terminé enamorado, ahora de la historia amatoria seré un personaje desterrado. La operación quirúrgica ha fracasado y la forense ha comenzado, tu recuerdo de mi cerebro he sacado, tu amor de mi corazón he extirpado.

Me convertiste en el médico forense del amor, la operación de nuestra relación fue un error, morimos y de nuestra epidermis se extinguió el color, la autopsia amatoria de nuestros pulmones extinguió el calor. Ahora más que un romántico escritor me convierto en un fúnebre doctor.