Un sano amor. (Pablo Alborán)

Capitulo 77

Narra marta:

No puedo abrir mis ojos, tampoco puedo moverme, me siento muy débil, pero escucho a Pablo decirme que si quiero salvar a nuestro hijo que de una señal que el solo no podía decidir eso, entonces hago todo lo posible para mover un dedo, consigo levantarlo y Pablo lo ve, y le dice al doctor que nos salve a los dos, pero que si no se puede salve al niño, y eso me da una alegría enorme, me alegra que Pablo haya sabido decidir eso aunque le esté partiendo el corazón en mil pedazos, yo no quiero que esta historia acabe así, tengo que tener fuerzas para que mi niño nazca bien y yo pueda recuperarme, o al menos vivir para conocerlo y decirle a Pablo que sea feliz y cuide de el.

Consigo abrir los ojos y Pablo me ve.

Narra Pablo:

Yo: mi niña.. Doctor a abierto los ojos.

Doctor: no puede ser.. ¿Cómo es posible esto?

Miro a marta con una sonrisa en la cara y ella débilmente me la devuelve.

Doctor: esta bien, ¿cómo se encuentra?

Marta: débil, pero quiero que mi hijo nazca por mi, y no por cesaría.

Doctor: eso no puede ser, perdería mas fuerzas, podría morir.

Marta: se que soy fuerte, doctor si voy a morir igualmente prefiero ver a mi hijo nacer.

Doctor: vamos a ponerla sangre para ver como reaccionas, si vemos que estas con fuerzas tendrás a tu hijo como tu quieres, si no, lo aremos por cesárea.

Yo: mi niña por favor se que eres fuerte, se que aun hay esperanzas que los dos podamos ver a nuestro hijo crecer juntos, por favor no me falles, yo no se que seria de mi sin ti, no me dejes ahora después de todo lo que hemos pasado, se fuerte, no me voy a separar de ti en ningún momento.

Después de una hora marta se durmió y la pusieron sangre, cuando despierta se la ve con mas fuerzas y los doctores deciden que intente tenerlo por parto natural. Aunque yo sigo teniendo mucho miedo confío en que será fuerte, en estos momentos haría lo que fuera por estar en su lugar.

Doctor: haber vamos a empezar, ¿Segura que te encuentras con fuerzas?

Marta: si doctor, por favor vamos, las contracciones duelen mucho.

Doctor: esta bien, cuando sientas que te va a venir una contracción empujas con todas tus fuerzas, respira tranquila.

Narra Marta:

Me duele muchísimo cada contracción que empujó me quedo sin fuerzas poco a poco.

Pablo: venga mi niña empuja.

Empujo agarrándole la mano muy fuerte a Pablo.

Doctor: ya veo su cabecita, una ultima venga que estas siendo muy fuerte jovencita.

Empujo con todas mis fuerzas y siento como mi hijo comienza a salir poco a poco, a Pablo se le caían las lagrimas tenía una sonrisa de oreja a oreja, El Niño empieza a llorar, Dios mío que sensación mas rara siento, Pablo llorando El Niño también y yo sin poder verlo.

Doctor: es un niño muy guapo chicos enhorabuena.

Me da al niño y cuando lo veo lágrimas empiezan a caer sobre mi, dicen que los niños cuando nacen no se parece a nadie, pero mi hijo es igual que Pablo, tiene su nariz, los labios, e incluso tiene un lunar debajo del ojo izquierdo.

Pablo: gracias mi niña, gracias por hacerme el hombre mas feliz del mundo, gracias por ser fuerte y valiente en un momento como este, te amo.

Me besa en la frente que la tengo llena de sudor, pero eso a el le da igual, luego me besa los labios y mira al bebe.

Pablo: es precioso mi niña, ¡madre mía! ¡Tiene mi mismo lunar!

Los doctores y las enfermeras que hay ahí se comienzan a reír y yo hago lo mismo.

Doctor: siento romperos este momento, pero tienen que bañarlo.

Les doy a mi hijo a las enfermeras para que lo bañen y me tumbo bien en la cama, estoy agotada.

Narra Pablo:

Este momento sin duda es el mas feliz de mi vida, mi hijo es precioso, y marta a sido la chica mas fuerte que he visto, a podido tenerlo a pesar de los impedimentos. Veo como se la cierran los ojos, me asusto muchísimo.

Yo: ¡marta! No te vayas por favor, no me dejes solo.

Marta: Pablo, jamás te voy a dejar solo, y ahora muchísimo menos.

Yo: me has asustado..

Marta: lo siento, solo es que estoy cansada.

Enfermera: aquí tenéis al niño, ¿lo quieres coger tu?

Me empieza a sudar las manos y mis piernas empiezan a flojear.

Yo: tengo miedo de que se me caiga.

Enfermera: tranquilo hombre, no se te va a caer, yo te ayudo.

Pongo los brazos y la enfermera me lo pone en ellos, me siento en una butaca, que sensación tengo ahora mismo..

Yo: ¡estoy cogiendo a mi hijo! Sigo sin creérmelo.

Narra marta :
Miles de lagrimas de alegría caen de mi ojos.. Ver a Pablo con mi hijo así emocionado, este es el día más feliz de mi vida.

Pablo: gracias marta enserio te amo, os amo.

Yo: yo también os amo a los dos, sois los hombres de mi vida.

Pablo: ahora si que somos una familia.

Me da al niño y me abraza con una sonrisa.
Enfermera: vamos a llevarla a una habitación.

Yo: esta bien, ¿pero puedo estar con mi hijo no?

Enfermera: claro que si, además hay mucha gente ahí fuera esperándoos.

Miro a Pablo confusa, y el hace lo mismo. Cuando salimos veo a a mis padres, a mi hermana a mis tíos, mis primos, la familia de Pablo y todos los de su banda.

Yo: ¡madre mía!

Medico: ¡que gran familia tenéis!
Pablo: no lo sabes tu muy bien..

Mama: hija.. Hay Dios mío que bonito es..

Todos se acercan para verlo, a todos les sale una sonrisa cuando lo ven. Hasta que se le toca el turno a ricky.

Ricky: oh Dios mío que bonito es por favor... Se le cae una lagrima.

Yo: ¿te parece guapo tu ahijado?

Ricky: ¿mi ahijado?

Pablo: tu mismo te pusiste el papel de padrino, ¿te vas a arrepentir ahora?

Ricky: ni en broma, voy a ser el padrino del niño mas guapo del mundo.

Enfermera: siento interrumpir este momento pero tenemos que llevarte a la habitación aquí no podemos estar.

Me entran a la habitación y entran mis padres, los padres de Pablo, el, yo y nuestro hijo.

Mama: hija que bonito que es.

Yo: mama no llores.

Mama: es de felicidad mi niña, y también quiero pediros perdón a los dos por deciros que sois muy jóvenes para ser padres.

Papa: así es, nos habéis demostrado que si sois capaces de serlo, enhorabuena y felicidades por este Nieto tan bonito que me habéis dado.

Escucho llorar a la madre y el padre de Pablo.

Pablo: bueno ya por favor, ya no mas lagrimas, no mas lo siento, siempre lo e dicho lo pasado, pasado queda. Mi hijo David se merece muchas sonrisas.

Yo: ¿David?

En ese momento se me viene a la cabeza mi mejor amigo, mi hermano de toda la vida.

Pablo: si, así se va a llamar, se que querías mucho a David, y esta es una bonita forma de tenerlo siempre junto a ti, y además es un nombre muy bonito.

Doctor: ¿como esta la mama y El Niño mas valientes?