Wattpad Paradox

07: Un día en la ciudad

Era un nuevo día en la ciudad, y debido a que no existía ni siquiera una leve brisa que acompañara al aire, hacía bastante calor.

Mientras que muchos adultos terminaban de trabajar y regresaban a sus hogares, varios adolescente pasaban el tiempo entre ellos.
Y de la misma manera, los infantes disfrutaban con sus amigos el fin de semana.

—Por donde comenzamos...?— pregunto Salem en tanto caminaba junto a Neftali.

—Escuche de un lugar las afueras de la ciudad donde venden todo tipo de cosas— comento la muchacha de reflejos verdes a su amiga, por lo que ambas chicas estuvieron de acuerdo.

—Una carrera?— pregunto la castaña antes de que una cortina de humo y cenizas cubriera toda la cuadra, y luego de toser unos momentos, Neftali pudo observar como su compañera se alejaba montada en lo que parecía una especie de águila gigante.
Con unas enormes garras en sus patas y un pico alargado que llegaba cercano a un metro, además de que al frente de su cabeza tenía 3 brillantes ojos rojos.

—Para que preguntas si de todas formas ya empezaste?— cuestionó la muchacha en tanto flexionaba un poco sus rodillas.

—Oh, hola Nef...— dijo un chico de cabello verde que casualmente pasaba por ahí, aunque fue alertado por una breve pero potente ráfaga de viento que lo sorprendió.
Despeinado y aturdido, el peliverde vio como la chica había desparecido, dejando nada más que un pequeño cráter en donde estaba y lo que parecían unas especies de quemaduras en la acera.

—Si... tal vez deba dejar de juntarme con estos chicos...— susurro Brais algo asustado, antes de retirarse del lugar tambaleándose.

Por su lado, Kaede estaba terminando de comer las tostadas que había ordenado, sin nada que hacer, pensando de qué manera podría entretenerse.
No tenía ganas de ir a la piscina, ni tampoco quería pasar un lindo día en su casa, por lo que estaba dudosa sobre qué hacer para pasar su tiempo.

—Qué te pasa?— pregunto su compañero, estando sentado frente a ella, sacándola de su mundo.

—Ah... eh... nada, perdón— respondió la chica mientras apartaba la mirada.

"Qué vergüenza... me olvide por completo de su existencia..." pensaba la adolescente antes de retirarse del lugar junto a Alex.

—Bueno... que quieres hacer ahora?— pregunto el castaño.

—Ni idea... en realidad era eso lo que estaba pensando— respondió Kaede en tanto estiraba sus brazos hacia el cielo.

—Mmmhh... Conozco otros lugares donde podemos pasar el tiempo, tienen especiales de tartas, pasteles, helados y otros postres— comento Alex, a lo que su amiga estuvo de acuerdo, y de esa forma ambas chicos se retiraron camino al próximo local.

Mientras tanto, lejos de ahí, un joven moreno y una muchacha castaña caminaban por las calles en tanto charlaban entre ellos.
Discutiendo sobre lo que comprarían.

—Y aquí estamos— dijo Pierrot en tanto se detenía frente a una enorme tienda, donde podían verse cantidades exorbitantes de dulces, pasteles, tartas, frutas, caramelos y muchos otros postres.
Dejando a Cinthya sin palabras.

—Increíble...— susurro la chica en tanto entraban a la tienda.

—Este es el mejor lugar para comprar cosas dulces— Pierrot.

—Vienes muy seguido?— Cinthya.

—Oh, hola Pierrot, recuerda que pasado mañana es la celebración del día de apreciasión a la crema batida, aunque te darán un descuento del 50 por cierto ya que eres miembro veterano— Vendedor.