Wattpad Paradox

55: La chica que ve el arcoiris

—Regrese —dijo Jake mientras entraba a la casa.

—Donde estabas? estábamos preocupados por ti —respondió Kaede desde el sofá del living.

—Si, se nota... —comento el castaño luego de ver la bolsa de papas vacía en las piernas de su amiga—. Iré a bañarme.

—Kaede, haz visto mi peine? —pregunto Taby en tanto entraba al cuarto donde se encontraba a su compañera.

Kaede—. Ah si, creo que Hazuki lo tomo... despídete de el.

Taby—. Q-me lo perdió...?

—No, ella no pierde nada... pero después que ella usa algo no quieres usarlo tu... créeme... —contesto la joven a la rubia que solo se quedo viendo a su amiga—. Y a donde vas tan arreglada?

Taby—. Mi hermano me va a llevar al orfanato para ver a mi mama y mis hermanos.

Kaede—. Y por que no vas tu misma? sabes donde es, verdad?

—Pues si —respondió la rubia—. Pero el dijo que no era seguro que yo saliera sola por unos días.

—Venga, tienes una espada y de paso ya estas grandecita —comento la adolescente—. Puedes andar por la calle por tu cuenta.

Taby—. Mmmhhh... si, quizás tengas razón...

—Hey —escucharon ambas desde la entrada de la cocina, era la contraparte de Kaede—. Que hacen enanas?

kaede—. Les estoy diciendo a Taby que ya esta grande como para ir al orfanato por su cuenta.

—Obvio que ya estas grande, si no tienes confianza llévate tu espada —comento Hazuki—. Ademas vengo del cuarto del payaso, esta tratando de hacer dormir a Aela. No creo que se desocupe pronto.

—Mmmhhh... de acuerdo, si, voy por mi cuenta —aclaro la chica antes de despedirse de su amigas, tomar su espada y salir por la puerta.

Kaede—. Que hacías en el cuarto de Pierrot?

Hazuki—. Nah, mentí.

—Ya bajo Taby! —escucharon desde la planta alta.

Kaede—. Le decimos?

—Hazlo tu, yo estoy ocupada —Luego de decir eso Hazuki se retiro del lugar, dejando a su contraparte entretenida en su lectura.

Kaede—. Desde cuando?

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—Primero por la Calle Corrientes y luego doy vuelta a la derecha por la Snow... —decía Taby en tanto caminaba por las calles.
Sin embargo fue en cierto punto que la adolescente empezó a sentir varias miradas sobre ella.

—Hola —saludo un chico mientras se acercaba a ella—. No te he visto por aquí, eres nueva en el barrio?

—Disculpa, estoy ocupada —dijo la chica en tanto continuaba caminando, tratando de ignorar al joven que empezó a caminar a su lado—. En serio, estoy ocupada.

—Vamos, déjame ayudarte... he-hey!

—En serio... —dijo la rubia mientras sostenía su katana del mango, mientras que la punta del arma se encontraba apoyada sobre el cuello de aquel joven—. Estoy ocupada.

—D-de acuerdo... —tartamudeo el muchacho antes de irse corriendo en dirección contraria a la muchacha que envaino nuevamente su arma.

Taby—. Ops...