Capítulo 30: Último día en Miami

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Al entrar al hotel nos encontramos con Rocío y Ryan jugando xbox, al vernos enseguida lo dejaron a un lado y comenzaron las preguntas...

-Cómo te fue? -Ryan habló primero.
-Bien, solo pagar la multa y me dejaron la licencia suspendida por un tiempo -respondió Justin mientras nos sentábamos.
-No puedes conducir en Miami solamente o en todo el país? -preguntó Rocío.
-Todo el país, durante 2 meses, luego tengo que renovar la licencia porque estaba vencida.
-Bueno, eso no es tan malo, o si? -volvió a preguntar Rocío.
-No, creo que está bien. La prensa fue la que arruinó todo como siempre con sus malditas preguntas -suspiró.
-Lo vimos -habló Ryan-, estaban en vivo-. Cassy reaccionó como lo hubiera hecho cualquiera y respondió bien a eso.
-Sí -sonrió Justin-, pero odio que me dejen ante el mundo como un drogadicto y alcohólico.
-Ellos olvidan lo que hicieron cuando jóvenes, pero eso no te tiene que afectar, no deben verte mal, eso es lo que quieren -le hablé tocando su mano y él respondió con una sonrisa.
-Hermano, ya pedí los pasajes de avión -habló Ryan luego de varios segundos-. Hoy a las 4, te parece bien?
-Sí, aprovechemos de salir a almorzar fuera y luego nos vamos al aeropuerto, les parece? -nos miró a Rocío y a mí.
-Sí -respondimos a coro con Rocío.
-Bro -Justin miró a Ryan-, llegamos de sorpresa o lo llamamos?
-Creo que es mejor llamarlo, para que esté en casa, nunca sabemos que planes tiene -sonrió Ryan y nosotras miramos extrañadas.
-Les tengo una propuesta -Justin nos habló-. Las llevaremos a sus casas y nosotros mismos hablaremos con sus papás para excusarlas, pero además les pediremos permiso para que salgan esta noche con nosotras, creen que las dejen?
-A dónde? -lo miré extrañada aún.
-A casa de Chris, un amigo, bueno, supongo que lo conocen, Christian Beadles.
-Claro, pero yo prefiero llegar mañana si es así, no te aseguro que a ninguna nos permitan salir luego de haber llegado hace minutos -rió Rocío-. Lo mejor sería llamar a nuestros papás, decir que nos íbamos a ir hoy pero el avión se retraso y llegamos mañana.
-Claro, y en ningún noticiero dirán "Justin Bieber volvió a Atlanta" -reí irónica.
-Oh, cierto.
-Llamaré a mi mamá -suspiré.
-Quieres que hable con ella? -me preguntó Justin.
-No, déjamelo a mí -caminé hacia la habitación mientras marcaba el número de mi mamá, ella contestó enseguida.

-Por dios Cassandra por fin te comunicas, te dignaste a prender tu maldito teléfono, como es posible que nos hagas esto! -comenzó a gritar en cuanto contestó.
-Eh, hola? Estoy bien gracias.
-Supongo que debes estarlo, si estas con ese chico que te hace desobedecerme y todo el mundo esta diciendo que son novios! -continuó gritando.
-Eso es mentira mamá, somos amigos, puedes dejar de gritar y escucharme?
-Sí -dijo luego de unos segundos-, lo siento, pero tú no te imaginas como he estado estos días.
-Lo sé mamá, por eso me preocupé de informarte que estaba bien en cuanto estuve en el hotel con Justin, sé que estuvo mal que saliera de casa así pero tú no me hubieras dejado venir si te lo preguntaba -le hablé tranquilamente esperando que tuviera compasión.
-Tienes razón, pero es otra ciudad Cassy, te pudo haber pasado algo durante el viaje o quizá nunca hubieras logrado entrar a ese hotel, no sé como lo lograste tampoco.
-Me comuniqué con un amigo de Justin, estoy bien, no me pasó nada ni tampoco me pasará, los guardaespaldas de Justin nos siguen a todos lados.
-Eso es bueno -suspiró-. Y cuándo te vienes?
-Sobre eso quería hablarte, tenemos pasajes para hoy a las 5, Justin y Ryan se irán con nosotras para dejarnos en nuestras casad, Justin hasta quería hablar contigo para excusarme a mí.
-No tengo nada que hablar con él -estuvo segundos en silencio-. Bueno, tampoco es su culpa lo que hiciste, lo sé, pero estoy molesta Cassy, te entiendo pero sigo estando molesta.
-Y no estas feliz por mi? Porque conocí otra ciudad, porque soy amiga de mi gran ídolo, porque él me trata bien y se preocupa por mi, eso no te pone feliz?
-Si, estoy feliz por eso, me imagino tu felicidad y soy feliz yo también -volvió a su tono normal por fin-. Pero no me pone feliz que millones de chicas te estén odiando porque piensan que eres su novia, o que en la televisión digan que te estas colgando de su fama...
-Eso no importa -la interrumpí-. Mamá, tenemos pasajes para hoy pero Justin quería ir a dejarme a casa y luego pedirte permiso para que pudiera ir a visitar a un amigo con él -fui al punto por fin.
-Esta bien, que lo haga, que te traiga a casa y que hable conmigo -se mantuvo con tono serio.
-Qué? -me sorprendí-, te lo estoy diciendo porque prefiero pedir permiso yo misma.
-No, que venga él, quiero conocerlo.
-Quieres conocerlo porque es Justin Bieber o porque es mi amigo?
-Por ambas cosas -rió.
-Está bien, entonces nos vemos en la tarde, te amo mamá, discúlpame.
-También te amo hija, acá hablaremos -cortó la llamada.

Volví a la sala con una sonrisa, los chicos hablaban entre ellos y Justin me miró enseguida cuando me senté a su lado.

-Esa sonrisa significa mi mamá me dejo salir con ustedes, o no? -preguntó.
-No, significa que no está enojada, pero quiere que llegue a casa y luego me pidas permiso para ir donde Chris.
-Yo? -rió levemente.
-Tu dijiste que lo harías -lo miré seria enseguida.
-Lo haré, solo que pensé que tu le estabas pidiendo permiso enseguida para eso.
-Si le dije, pero ella quiere que vayas tú.
-De seguro te dirá tienes que cuidar a mi hija, tráela de vuelta a tal hora, etc -rió Rocío.
-Será un agrado conocerla -sonrió Justin-. Entonces preparen mas maletas para que vayamos a almorzar.

Apenas y tenía un pequeño bolso con el que había llegado a si que todo lo tuve listo en minutos, juntamos las cosas en la sala y los guardias de Justin se llevaban todo a la camioneta, me puse el gorro que me había regalado Justin y él sonrió al verlo. Eran la 1 de la tarde, abandonamos el hotel entre prensa y beliebers que seguían afuera y se nos habían lanzado encima cuando salimos, la prensa nos siguió hasta el lugar en donde Justin quiso almorzar, pero por suerte no les permitían la entrada. Almorzamos con los ojos encima de las pocas personas que habían en el lugar, pero la prensa afuera seguía esperando. Mientras esperábamos lo que habíamos pedido todos estábamos con el celular en la mano, la prensa definitivamente era muy rápida, ya había una foto de los cuatro saliendo del hotel y de hecho había una foto en donde le hicieron un zoom a mi cadena, la que me había regalado Justin. "Cassandra luce un nuevo collar, una nota musical de oro con diamantes, quién será el chico que le da regalos tan costosos?", reí sarcástica y agobiada, Justin me miró unos segundos y luego mi celular sonó...

"Almuerzo con amigos" -tweet de Justin.

-Me encanta que tu celular suene cada vez que twitteo algo -rió mirándome.

La comida llegó pronto y almorzamos mientras hablábamos, pensé en lo rápido que había avanzado esa "relación de amigos" que tenía ahora con Justin, las primeras veces que lo vi ni si quiera era capaz de decirle algo y ahora si podía hacerlo, aunque no con la confianza que quisiera.

*

"Cassandra ese collar que tienes te lo regalo Justin? Son novios?" - "Justin Bieber podrías asegurarnos que ahora tienes una novia oficial?" - "Cuánto tiempo más estaremos viéndolos juntos?"... Miles de preguntas más cuando salimos del lugar, como siempre, pero esta vez Justin respondió.

-Mucho tiempo más, mucho.

Solo unas palabras que me dejaron congelada, la prensa seguía con miles de preguntas, no sé si me sorprendía más lo que dijo o que él hubiera respondido. Al subir a la camioneta nadie dijo nada de eso y tampoco quise hacerlo, seguimos el camino hasta el aeropuerto mientras yo pensaba en "mucho tiempo más, mucho".

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He ain't all bad © (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora