Capítulo 50: Él todo mío

47.6K 1.4K 55
                                    

-Es cierto, quería ocultarte algo porque pensé que te molestaría -me dijo mirándome luego de haberme abrazado en silencio por varios minutos.

-Por qué me molestaría? -quise sonar tranquila.

-No los conoces cariño, sé que puedes pensar mal de ellos por lo que viste la primera vez que conociste a algunos, no quería que pensaras que voy a estar metido en problemas por el hecho de estar con ellos -habló sin dejar de mirare a los ojos.

-Me limitaré a no pensar absolutamente nada, solo confiaré en ti como te he dicho miles de veces, pero si vuelves a intentar ocultarme algo esa confianza desaparecerá Justin -hablé seria pero a la vez tranquila-. La confianza no es fácil de conseguir, pero es muy fácil de romper -agregué.

-Lo sé, discúlpame, no volverá a pasar -intentó sonreír.

-Ok -suspiré finalizando con una leve sonrisa, Justin se iría de viaje en dos días y solo quería disfrutar de estar con él, eso no iba a ser arruinado.

Subimos hasta su habitación luego de aquella conversación, no queríamos salir a que la prensa nos rodeara por todos lados, solo queríamos estar juntos y tranquilos, un día de películas y descanso era buena idea si solo quería poder abrazarlo. Fruta picada y helado de chocolate, eso estaba perfecto para ver algunas películas, aunque en realidad Justin no miraba demasiado cuando se trataba de algún protagonista guapo, libremente me tapaba los ojos con sus manos para que no pudiera ver.

-No seas idiota -reí diciéndole mientras lo hacía.

-No mires a nadie, yo no miré a la chica en ropa interior que apareció hace un rato -se excusaba.

-Yo si te vi mirando y eso es más peligroso que lo haga yo -quité sus manos de mi rostro.

-Por qué sería peligroso? -rió irónico.

-Porque es televisión Justin, son actores, celebridades, no sería nada difícil que localizaras a una chica de cualquier película y ella quisiera estar contigo -intenté reír aunque lo que decía era cierto y no me gustaba para nada asumirlo.

-No seas tonta -se lanzó a abrazarme-. No me importa nadie, absolutamente nadie más que tú.

Entre risas él comenzó a besarme, estaba a mi costado totalmente pegado a mi cuerpo e inclinado hacia mí boca, sonreía mientras me besaba lentamente y pronto comenzó a mover sus manos torpemente, como lo hacía siempre que estábamos en esa situación, besándonos en la cama, supongo que eran nervios, o por lo menos por mi parte si habían nervios. Cada vez que estábamos en esa situación él terminaba por alejarse antes de que yo se lo pidiera y volví a mirar la televisión, hablaba sobre cualquier cosa para hacer como si nada pasara, pero esta vez no fue así, se mantuvo besándome por largos minutos. Sentí que mi corazón se aceleraba, también sentí el suyo, iba tan rápido como el mío y su mano encontró mi cadera, sus dedos estaban casi enterrados en la piel que había entre mi camiseta y mis jeans, me alejé un poco de su boca y vi su rostro frustrado, mantuvo sus ojos cerrados y bajó la cabeza. El hecho de haberme alejado de su boca no fue porque no quisiera seguir besándolo, simplemente fue un impulso producto del nerviosismo y me arrepentí en cuanto vi la frustración en el rostro de Justin, ya no podía seguir con eso de alejarlo de mi cada vez que estábamos en aquella situación, sé que me quiere, sé que no solo espera tener sexo conmigo, pero también sé que si sigo rechazándolo siempre él buscara lo que necesita en otro lugar...

-Lo siento -susurré.

-No lo sientas -me sonrió falsamente, su respiración aún estaba acelerada.

Tomé su rostro y lo volví a acercar a mí para besarlo, pero él me alejó de inmediato.

-Sé lo que estas pensando y no lo hagas por eso -su mirada era totalmente seria.

-Qué estoy pensando? Lees mentes?

-No, no leo mentes, solo te he aprendido a conocer bastante bien y sé que estás pensando que si no lo hacemos yo querré irme con otra.

-No, no estaba pensando en eso -mentí, era increíble que mis pensamientos fueran tan predecibles.

-No mientras -puso su mano en mi mejilla y me dio un beso rápido-. Pero te equivocas y no quiero que lo hagas por esa razón.

-Ok, puede que lo haya pensado en algún momento, pero no sería la razón exacta.

Justin me miró en silencio, antes de que pudiera pasar más tiempo en ese incómodo silencio me acerqué a él y lo besé, respondió a mi beso tranquilo, como si fuera un beso de finalización de alguna conversación, pero yo no lo vi de ese modo. Minutos de besos eran peligrosos, peligrosos para mí, pero totalmente tentadores. Volví a recostarme en la cama y Justin ésta vez se posicionó sobre mí con sus manos a mis costados, las mías llegaron hasta su espalda y podía sentir sus músculos tensarse, recorrí su espalda con mis dedos, sus músculos se marcaban con cada respiración y me estaba derritiendo por dentro. Su boca llegó hasta la esquina de mi oreja y comenzó a bajar lentamente, sus pequeños besos recorrieron mi cuello y me hacían estremecer, sentí mi cuerpo tensarse totalmente cuando su boca llegaba casi hasta mi pecho pero cambió de dirección, llegó hasta mi hombro y con su mano hizo a un lado mi camiseta y el tirante de mi sujetador.

-Tengo que decirte algo -susurró sin dejar de besar mi cuello, no respondí-. Debo admitir que cómo hombre tengo algunas necesidades -continuó y se alejó de mi, me miró a los ojos antes de seguir-. Pero en estos momentos mi mayor necesidad es mantenerte a mi lado y para eso esto no es necesario ahora, lo juro.

Me quedé en silencio observándolo, tenía sus labios húmedos y seguía humedeciéndolos con su lengua mientras me miraba con sus ojos color miel, se veían más claros aún y sus pestañas más rubias. Sin pensarlo demasiado llegué hasta su boca y lo besé mientras ubicaba mi mano en su cabeza, mis dedos se enterraron en su cabello y él rápidamente volvió al ritmo anterior, ésta vez quise ayudarlo un poco, acercándolo más a mí me dispuse a quitar su camiseta, él no opuso resistencia, al contrario, me ayudó a hacerlo y cuando la tuvo en su mano la lanzó lejos sin mirar y volvió a besarme. Recorrí su pecho con la yema de mis dedos mientras lo besaba y él comenzó a subir mi camiseta lentamente, como si estuviera esperando que me arrepintiera y lo detuviera, pero cuando me la quitó totalmente supe que ya no había forma de detenerlo, aunque en realidad yo tampoco quería que lo hiciera. Simplemente dejé que todos los impulsos que me habían reprimido antes ahora desaparecieran e hice cada cosa que sentí, su piel era tan suave y tibia, sus besos me transmitían un éxtasis infinito que no podía controlar y sus manos recorrían cada centímetro de mi cuerpo con delicadeza.

-Te quiero -me susurró al oído en el momento exacto.

-Yo te quiero más -respondí entre suspiros.

-No te imaginas la magnitud de lo que yo siento -volvió a susurrar, sentía su respiración caliente estremecer mi piel.

No hubieron más palabras entre nosotros, solo pasó lo que debía pasar, solo dejé que todo siguiera su rumbo, nuestros cuerpos encajaban a la perfección y su manera de tratarme era como si fuera su tesoro más preciado que no podía lastimarme ni si quiera un poco, pero a la vez sentí su locura en aquellos momentos. Él todo mío, simplemente mío y yo toda suya, como siempre lo soñé.

-------------------------------------------------------------

SALUDOS ESPECIALES A MI GRUPO FRATINGS GIRLS <3 MANE ME SIENTO ALAGADA DE SER TU PRIMERA LECTURA POR DIVERSIÓN JAWAJSJJ LAS ADORO <3

Todos los derechos del autor reservados ©

Ésta historia tiene los derechos de autor reservados, está prohibida su copia y/o adaptación. En el caso de que exista se denunciará por plagio.

He ain't all bad © (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora