He ain't all bad © (TERMINADA)

Capítulo 54: Paciencia

Abrí la boca para decir algo pero no fui capaz de decir nada, ni si quiera sabía que podía decir. Debía molestarme porque ellos fueron con nosotros? No lo sé, no son malas personas, pero Justin con ellos se comporta mal y eso es lo que me molesta.

-Por qué haces esto Justin?

-A qué te refieres? –levantó la mirada y yo aparté mis manos de las suyas.

-A todo, por qué te drogas? Por qué si haremos un viaje para conocer a tu familia piensas en llevar a tus amigos?

-Creo que… -comenzó a hablar pero no terminó la frase.

-Ni si quiera eres capaz de pensar con droga en el cuerpo, te estás matando las pocas neuronas que deben quedarte –suspiré resignada-. No iré a ese viaje contigo, espero que te vaya bien con tus amigos.

Di media vuelta y emprendí paso firme a la salida, pero recordé que mis maletas seguían ahí, me voltee y Justin estaba de pié mirándome como me alejaba. “Otro día vengo por mis maletas, o si me las envías sería mejor” -le dije a la distancia y seguí mi camino mientras algunas lágrimas caían por mis mejillas. Tonta Cassy, imbécil, me sequé las lágrimas molesta, odiaba llorar con tanta facilidad. Abrí la puerta principal y miré un poco hacia afuera esperando que no hubiera prensa, pero si había, respiré profundo preparándome para salir, pero antes de que lo hiciera sus brazos me voltearon y con una mano en mi mejilla y la otra en mi cintura me pegó a su cuerpo, me besó tan rápido como pudo, fue en cosa de segundos y luego de reaccionar me alejé bruscamente.

-No, drogado no –lo miré fijamente aún sin poder volver a mi respiración normal por ese beso.

-Discúlpame por favor, te quiero Cassy, no me dejes solo –me habló suplicante mirándome a los ojos mientras aún mantenía su mano en mi mejilla y me acariciaba con su pulgar.

-No estás solo, adentro te esperan.

-No Cassy, estar con ellos jamás será como estar contigo, te necesito en mi vida, te juro que quiero dejar todo esto, pero no podré hacerlo si me dejas –insistió.

-Hablemos otro día, está bien? –suspiré profundamente.

-No, no te vayas, viniste a quedarte y eso tienes que hacer, por favor no me dejes –insistió.

Soy la persona con menos voluntad del mundo, solo bastó que me mirara a los ojos y me pidiera que me quedara, para que yo lo hiciera. Volví a la casa tomada de su mano, subimos hasta su habitación y me dejó ahí mientras se fue a decirle a sus amigos en que habitaciones dormirían esa noche, volvió al cabo de unos minutos.

-Me daré una ducha –me dijo mientras tomaba una toalla, yo estaba recostada en su cama mirando el techo, pensando en mi poca dignidad, pero en mi gran amor por él.

-Ok –respondí en un susurro, ni si quiera sé si realmente me escuchó.

Estuve mirando el techo unos minutos mientras escuchaba el agua caer, realmente estaba siendo difícil estar con él, pero nadie dijo que sería fácil, sabía desde un principio como era él y me arriesgue, ahora no puedo dejar todo a medias, él me necesita, tengo que ayudarlo a que salga de todo lo malo en lo que está, tengo que lograr ayudarlo. Lo quiero, ese es mi problema, que lo quiero demasiado como para abandonarlo y aunque tenga que dejar mi dignidad a un lado creo que no podré dejar esta relación, a menos que sea él quien me deje y de verdad espero que no sea así, pese a todo, creo que no podría soportar perderlo.